La ciencia ficción llega al teatro en “La ciudad de los Césares”
Por LPI
Un meteorito que cae en la Placa de Nazca causa el desmembramiento del territorio chileno en pequeñas islas, casi hasta desaparecer. La democracia se derrumba, cediendo el espacio político a una guerra civil. En este escenario post apocalíptico, dos personajes que son mitad hombre y mitad robot, interpretados por los actores Alex Zisis y Roberto Poblete, persiguen una utopía, que es la felicidad.
Este es el punto de partida para la obra de teatro “La ciudad de los Césares”, escrita por el dramaturgo Marco Antonio de la Parra, y el escritor y divulgador de la historia Jorge Baradit. Escrito y estrenado en un tiempo récord, este montaje asume la arriesgada misión de llevar la ciencia ficción a las tablas, bajo la dirección de Sebastián Jaña y con funciones confirmadas hasta el 14 de septiembre, en el Teatro La Comedia (Merced 349, Barrio Lastarria, Santiago).
El responsable de esta osada apuesta teatral es el actor Alex Zisis Drinberg, intérprete de vasta trayectoria en teatro y televisión, que tuvo sus primeras experiencias en las tablas con la Compañía de Teatro Aleph, en la década del ’70, mientras estudiaba Ingeniería Comercial. Fue Zisis que, tras escuchar a Jorge Baradit en una actividad de la Feria del Libro de Ñuñoa, en diciembre del año pasado, decidió invitarlo a participar del naciente proyecto que desarrollaba junto a Roberto Poblete -también de una nutrida carrera en las tablas y las pantallas de cine y TV, además diputado independiente pro Partido Socialista entre 2014 y 2018, y miembro del Comité de Interparlamentario Chileno Israelí- y Marco Antonio de la Parra, renombrado dramaturgo nacional. “Lo estaban entrevistando, lo encontré histriónico y pensé “con él hay que trabajar, hay que llevarlo al drama”, relata el actor. De esa idea resultó un trabajo conjunto entre los dos autores que, después de 24 versiones, llegó al resultado que se estrenó el 18 de julio recién pasado.
“Parece que a este grupo le gusta asumir riesgos”, señala Alex Zisis, pero no sólo en referencia al tiempo récord en que desarrollaron la obra sino al hecho de que en esta “versión libre”, como la llama él, de la novela del escritor chileno Manuel que contaba la historia de conquistadores españoles buscaban la mítica ciudad rica en oro y plata, se asume la difícil misión de contar en clave de ciencia ficción la historia de la búsqueda de otra utopía, que es la felicidad.
“Sebastián Jaña, en ese sentido, ha sido súper importante para llevar la ciencia ficción al teatro. La apuesta era muy importante, porque había que hacerlo creíble, y Sebastián hizo lo suyo. Ha sido una experiencia muy única y nueva para todos. Hemos tenido que, por un lado, los actores interpretar personajes son mitad humanos y mitad robots, y por otro lado Marco Antonio (de la Parra) ha tomado el material de Jorge Baradit con mucha delicadeza, haciéndolo funcionar en teatro”, comenta el actor.
Sin duda es una arriesgada apuesta que, hasta ahora, ha recibido la aprobación de la prensa y del público que la ha ido a ver, y que plantea la idea romántica de que aun en el peor de los escenarios, el ser humano -o en este caso, el humano-robot- busca lo más básico y sin embargo difícil de encontrar: la felicidad.