publicado hace 17 días
Andrea Arueste asume como Directora del Centro Comunitario del Círculo Israelita de Santiago
En esta edición conversamos con Andrea para conocer su nuevo rol y sus desafíos.-Estimada Andrea, para algunos de nuestros lectores que no conozcan mucho de ti, cuéntanos un poco de ti. -Soy una mujer judía chilena, que, gracias a mis padres, los cuales optaron por criarme junto a mis hermanas, en un entorno judío activo y practicante, reforzaron valores y compromisos desde que era niña. Sumado a lo anterior, soy ex alumna del I. Hebreo, ex madrija de Maccabi y nieta de un ex presidente de la comunidad Sefaradí, son las bases de la mujer que decidí ser en el ámbito comunitario. Como psicóloga, definí que trabajaría con propósito, estuve 18 años en Ariel Job Center, de los cuales 12 años liderando estrategias con impacto directo a la empleabilidad de profesionales comunitarios como externos. Tuve, además, el privilegio de colaborar y articular con las distintas organizaciones que son parte de la red asistencial comunitaria y apoyar diversas iniciativas junto a la CJCH y JDC, con el fin de maximizar los esfuerzos comunitarios, para dar respuestas específicas, aportar a las mesas de trabajo, transferencias de conocimientos y ser una agente activa, en el tejido comunitario. Forme una familia junto a Ariel Schapiro, donde nuestro compromiso comunitario, lo desplegamos en acciones concretas, para que nuestros hijos, visualicen, que construir comunidad es un trabajo colectivo y la continuidad depende de responsabilidades compartidas.-¿Cómo se gestó la llegada al Círculo Israelita y qué rol desempeñas? -Mi aterrizaje en el Mercaz, responde a una necesidad de cambios y buscar nuevos desafíos laborales, que siguieran sumando al trabajo con propósito. En mi búsqueda hacia un nuevo trabajo, además de aplicar lo que resaltaba en las asesorías de outplacement, que estaba realizando, pasó lo del 7 de octubre, que removió muchas emociones y me descubrí queriendo contribuir aún más de cerca a la comunidad. En conversaciones, aparece la oportunidad de participar en el proceso como Directora del Centro Comunitario del Mercaz, un cargo nuevo, orientado a contribuir en estrategias, ser parte del trabajo colaborativo, estar más cerca de nuestra comunidad, aportar a todo lo que se ha construido con tanta dedicación y compromiso. Sumar valor al trabajo comunitario para preservar nuestros valores, fortalecer la identidad y continuidad. No me costó mucho decidir, me sentí profundamente honrada de haber sido elegida y orgullosa del tremendo desafío y responsabilidad que significa ocupar este lugar. -¿Cuáles son tus expectativas para este nuevo desafío laboral?-Mis expectativas son múltiples y van de la mano con la misión del Mercaz y considerando los hechos desde el 7 de octubre y sus repercusiones, el escenario cambia para las comunidades judías en el mundo y eso impacta en las prioridades y necesidades que tenemos. Mis objetivos a alcanzar, tienen que ver con; contribuir en la continua construcción de comunidad, poniendo el foco en las opiniones de nuestros socios y socias, para elaborar propuestas de valor significativas y flexibles, que permitan seguir fortaleciendo nuestra identidad, tradiciones, participación y sentido de pertenencia. Referente al ejercicio de nuestro sionismo, el desafío está en fomentar activismo comunitario y la participación en iniciativas informativas, reflexivas y de debate.Mi compromiso, también está en la línea de enriquecer la calidad de vida judía, brindando espacios que fomenten las relaciones, redes de apoyo e interacción social.Seguir fortaleciendo una cultura de trabajo colaborativo.Resguardar la continuidad, perseverar en crear impactos positivos y cohesión comunitaria, asegurándonos de que cada acción que emprendamos refleje nuestros valores y fortalezca nuestra unidad. Juntos, enfrentaremos los desafíos del presente y construiremos un futuro.