Documentales y películas que narran el 7 de octubre

A un año del ataque terrorista de Hamás contra Israel, el cine y los documentales se han convertido en una herramienta esencial para preservar la memoria y mostrar al mundo lo que ocurrió aquel 7 de octubre de 2023. En distintas plataformas, realizadores israelíes y extranjeros han dado forma a obras que buscan poner rostro, voz y contexto al mayor pogromo contra judíos desde la Shoá.El resultado son producciones conmovedoras, valientes y, muchas veces, difíciles de ver. A continuación, un recorrido por los títulos más relevantes que hoy pueden encontrarse —o pronto podrán verse— en Chile.Cada una de estas producciones demuestra que la memoria puede expresarse a través del cine. Que frente a los intentos de negar o relativizar el horror, las imágenes, las voces y los testimonios tienen el poder de resistir. Desde Bibas hasta We Will Dance Again, el mensaje es el mismo: no olvidar, contar, y volver a bailar, incluso después del dolor más profundo.Bibas: asesinados por ser judíosEsta producción retrata la tragedia de Shiri Bibas y sus hijos Ariel y Kfir, los bebés colorines que se transformaron en símbolo del horror del 7 de octubre. Con testimonios directos y material de archivo, el documental reconstruye los momentos previos y posteriores al secuestro de la familia, mostrando el impacto que su historia generó en Israel y en las comunidades judías del mundo. Su estreno gratuito en toda Latinoamérica busca —según sus realizadores— “mantener viva la verdad frente a la desinformación”.- Disponible: en Mercado Play7.10 Sur RojoEste documental de Uriel Sokolowicz, presentado en diversas comunidades locales, ofrece una mirada latinoamericana e íntima del 7 de octubre. Reúne testimonios de israelíes y judíos de la diáspora que vivieron el ataque desde distintas latitudes, y muestra cómo ese día cambió la manera en que el mundo percibe la seguridad, la fe y la identidad judía. - Disponible: en Directv (canal 700 / 1700) y mediante la plataforma DGO. Screams Before SilenceDirigido por Sheryl Sandberg, exejecutiva de Meta, este impactante documental reúne testimonios de mujeres israelíes sobrevivientes de violaciones y violencia sexual durante la masacre de Hamás. Sandberg viajó personalmente a Israel para registrar las voces que el mundo no quiso escuchar durante meses. El título se convirtió en una denuncia global sobre la violencia de género en contextos de guerra y fue proyectado en universidades y foros internacionales, incluido el Parlamento Europeo.- Disponible: en YouTubeBearing Witness to the October 7th MassacreProducido por el Gobierno de Israel y proyectado ante legisladores y periodistas de distintos países, este corto documental de 43 minutos muestra imágenes sin editar captadas por los propios terroristas de Hamás y cámaras de seguridad. Es una experiencia difícil, pero fundamental para entender la dimensión del horror vivido. - Disponible: en varios países, su proyección está restringida a funciones privadas debido a la crudeza del material.Tel Aviv y el 7 de octubre | DW DocumentalEl canal alemán Deutsche Welle presenta un retrato profundo del impacto social y psicológico que el ataque tuvo sobre los israelíes. A través de entrevistas en Tel Aviv, muestra cómo la vida cotidiana —cafés, universidades, familias jóvenes— cambió irreversiblemente después del 7 de octubre. - Disponible: en YouTube, con subtítulos en español.Red AlertLa miniserie documental Red Alert, que aborda minuto a minuto los ataques del 7 de octubre y las historias de quienes sobrevivieron en los kibutz del sur de Israel. Con una narrativa intensa y testimonios directos, la serie permite revivir el horror y la resistencia de aquel día desde distintas perspectivas, combinando material de archivo con entrevistas exclusivas.Disponible: en Paramount+ para el público chileno.We Will Dance AgainInspirado en los sobrevivientes del festival musical Nova, el filme combina testimonios y dramatización para recordar la fuerza de los jóvenes que amaban la música y la libertad. Su mensaje es de esperanza: bailar de nuevo, vivir de nuevo. - Disponible: en Prime Video en algunos países y pronto llegará oficialmente a Chile.One Day in OctoberUn documental británico que reconstruye, minuto a minuto, la cronología del 7 de octubre. Utiliza grabaciones telefónicas, mensajes y audios de emergencia para mostrar el caos inicial y la heroicidad civil y militar que emergió entre la tragedia. Su enfoque periodístico lo ha convertido en referencia para medios internacionales. Disponible: en HBO Max, aunque al acceder desde Chile aparece el mensaje de que “este título no está disponible en tu país”.  No obstante, también figura en Amazon Prime Video como parte de su catálogo internacional, lo que sugiere que puede estar habilitada en Chile según acuerdos regionales. Si la plataforma la muestra, podrás acceder desde Chile sin necesidad de VPN. The Road Between UsUna emotiva coproducción israelí-estadounidense que aborda las secuelas del secuestro y la búsqueda de los rehenes. Relata cómo familias, soldados y voluntarios se unieron para traer de regreso a quienes fueron arrancados de sus hogares. Su tono íntimo y esperanzador lo distingue dentro del panorama audiovisual post 7/10.- Disponible: en YouTube.

László Krasznahorkai, Premio Nobel de Literatura

Laszló Krasznahorkai nació el 5 de enero de 1954 en Gyula, Hungría. Su padre, György Krasznahorkai, era abogado y su madre Júlia Pálinkás, una administradora de seguridad social. Él es judío por parte de su padre. Su abuelo paterno cambió su apellido Korin a Krasznahorkai en 1931. Laszló dice que sus raíces le fueron ocultadas durante la era comunista en Hungría. Aunque el judaísmo no es un tema central en su obra, el trasfondo judío y su historia familiar de persecución influyen en los temas de su literatura. En una entrevista se refirió a su identidad como “mitad judío” y comentó sobre el creciente antisemitismo en Hungría, diciendo que si las cosas continuaban así, “pronto seré enteramente judío”. Desde 1968 hasta 1972 asistió a la enseñanza media en  Gyula, especializándose en Latín y luego en 1973 estudió Derecho en la universidad József Attila; en 1976 se trasladó a la Universidad Eötvös Loránd in Budapest desde 1976 hasta 1978. De 1978 a 1983 estudió el lenguaje húngaro en la Facultad de Humanidades, donde obtuvo su grado. Su tesis se enfocó en el escritor Sandor Marai luego de su exilio del régimen comunista en 1948. Al completar sus estudios, comenzó a trabajar como escritor; su primera novela, Sátántangó, de 1985, captó la atención internacional, que lo estableció como un líder en la literatura húngara. La historia familiar de ocultamiento y supervivencia, en el contexto de la Hungría comunista, que suprimía las identidades minoritarias, se conecta con los temas recurrentes de su obra, como la desintegración moral, la resiliencia espiritual y el colapso social. Su novela “Guerra y guerra” incluye un protagonista llamado Korin, el apellido original de su abuelo. Su traducción al inglés recibió el Best Translated Book Award en 2013. Es una descripción sombría y conmovedora de la vida en una granja colectiva en decadencia. El libro se convirtió en un referente de la literatura húngara y posteriormente fue adaptado en una película de siete horas. Sus novelas posteriores, entre ellas “La melancolía de la resistencia”, consolidaron su reputación como escritor visionario que explora el colapso moral y existencial.Su obra, a menudo apocalíptica y existencialista, puede interpretarse como un reflejo de la historia de Europa del Este en el siglo XX, incluyendo las persecuciones y los legados del Holocausto. Aunque Krasznahorkai se inspira en una amplia gama de tradiciones filosóficas y religiosas, su trasfondo judío forma parte de las experiencias humanas que explora su literatura.  Es una de las figuras literarias más aclamadas de Europa Central. Sus obras son conocidas por su prosa compleja y cautivadora, y su profundidad filosófica, que a menudo explora la tensión entre la esperanza y la desesperación en el mundo moderno. En 2015, ganó el Premio Booker británico por su trayectoria y dijo que esperaba que esto le permitiera acceder a un público más amplio. En octubre de 2025, recibió el Premio Nobel de Literatura “por su obra convincente y visionaria que, en medio del terror apocalíptico, reafirma el poder del arte”. Al ser preguntado por las imágenes apocalípticas en su obra, dijo: “Quizá soy un escritor que escribe novelas para lectores que necesitan la belleza en el infierno”. Krasznahorkai estuvo casado con Anikó Pelyhe desde 1990 hasta su divorcio. En 1997 se casó con Dóra Kopcsányi, sinóloga y diseñadora gráfica; tene tres hijos.

publicado hace 8 días

Baruch Samuel Blumberg, Premio Nobel de Medicina

Baruch Samuel Blumberg nació el 28 de julio de 1925 en Nueva York en el seno de una familia judía ortodoxa. A veces, algo que se aprende de niño o adolescente, queda grabado en la mente por el resto de la vida; Ese fue el caso de Baruch Samuel Blumberg, cuyos estudios judaicos lo llevaron a ser médico y más adelante a descubrir una de las enfermedades más letales en el ser humano y su posible prevención. Estudió en la yeshiva de Flatbush y después asistió a la preparatoria Far Rockaway en Queens. Después de hacer su servicio militar en el ejército estadounidense durante la Segunda Guerra Mundial, Blumberg estudió matemáticas y medicina en la universidad de Columbia. Se graduó en 1951 y trabajó como médico varios años, después se inscribió en la universidad de Oxford para hacer un doctorado en bioquímica. Décadas más adelante, fue designado Maestro del prestigioso colegio de Balliol en Oxford (fundado en 1263); fue el primer norteamericano y el primer científico en recibir ese título.En 1960, Blumberg descubrió el antígeno de la hepatitis B y pronto demostró que el virus era una de las principales causas de cáncer de hígado. Su equipo empezó a trabajar en una prueba para la detección y en una vacuna; exitosamente produjeron ambas. Aunque Blumberg tenía la patente de la vacuna, la regaló para que cualquiera pudiera usar sus descubrimientos gratis y salvar cuántas vidas fueran posibles. En un estudio que se hizo a los 30 años de haber salido al público, se descubrió que la vacuna había reducido la infección de un 20% a un 2% en la población, y había evitado el 90% de las muertes por cáncer de hígado. Por eso muchos la han llamado “la primera vacuna contra el cáncer”.Blumberg recibió el premio Nobel en Medicina por su trabajo con la hepatitis B, y sus “descubrimientos con respecto a mecanismos nuevos que originan y diseminan enfermedades infecciosas.” En 1992 fundó en un trabajo conjunto la Fundación por la Hepatitis B. Esta asociación se dedica a ayudar a personas contagiadas a sobrellevar de mejor manera la enfermedad en su vida diaria; además, otorga financiamiento para fomentar la investigación hacia la recuperación. En el entretanto, Blumberg enseñó medicina y antropología en la universidad de Pensilvania. Sorprendentemente, también dirigió el Instituto de Astrobiología de la NASA; fue presidente de la Sociedad Filosófica de América; un miembro distinguido del Consejo Científico y Médico para la Asesoría, al igual que del Congreso de Bibliotecas. Trabajó en el Instituto Nacional de la Salud y el Instituto para la Investigación del Cáncer.Blumberg fue observante de la Torá toda su vida, y rara vez faltaba a su clase de Talmud. El afirmaba que sus estudios judíos lo habían impulsado a ser médico, pues desde joven le permitieron educar y refinar su mente para destacar en ámbitos académicos. Además su primordial interés en la medicina surgió gracias a la frase talmúdica, donde se afirma que “si alguien salva a una vida, salva al mundo entero”. Con méritos se ha dicho que Blumberg “previno más muertes de cáncer que cualquier otra persona en este mundo”. Casado con Jean Liebesman, Blumberg falleció el 5 de abril de 2011,​ poco después de pronunciar un discurso en la NASA.

publicado hace 15 días

François Englert, Premio Nobel de Física

François Englert nació en Bruselas el 6 de noviembre de 1932 en el seno de una familia judía. Es un sobreviviente del Holocausto​; durante la ocupación alemana de Bélgica en la II Guerra Mundial, tuvo que ocultar su identidad judía viviendo en orfanatos en diferentes ciudades belgas hasta que fue liberado por el Ejército de los Estados Unidos. Se graduó como ingeniero eléctrico-mecánico en 1955 de la Universidad Libre de Bruselas (ULB), donde obtuvo su doctorado en ciencias físicas en 1959. Desde 1959 hasta 1961, trabajó en la Universidad de Cornell, primero como investigador asociado de Robert Brout y luego como profesor adjunto. Regresó a la ULB, donde fue profesor universitario y se unió allí con Robert Brout. A partir de 1980 ellos encabezaron el grupo de física teórica. En 1998 fue nombrado Profesor Emérito de la ULB, miembro del Servicio de Física Teórica. También es Profesor Sackler por Designación Especial en la Escuela de Física y Astronomía de la Universidad de Tel Aviv​ y miembro del Instituto de Estudios de Quantum en la Universidad Chapman, California. En octubre de 2013 fue galardonado con el Premio Nobel de Física, junto a Peter Higgs por el descubrimiento del mecanismo de Higgs.Según la física moderna, la materia consiste en un conjunto de partículas que actúan como bloques de construcción. Entre estas partículas se encuentran fuerzas mediadas por otro conjunto de partículas. Una propiedad fundamental de la mayoría de las partículas es su masa. De forma independiente, en 1964, Peter Higgs y el equipo de François Englert y Robert Brout propusieron una teoría sobre la existencia de una partícula que explica por qué otras partículas tienen masa. En 2012, dos experimentos realizados en el laboratorio del CERN confirmaron la existencia de la partícula de Higgs. En colaboración con Robert Brout, propuso el mecanismo de Brout-Englert-Higgs para explicar la masa de partículas elementales.​ Un mecanismo similar fue propuesto simultáneamente por Peter Higgs​ a cuyo nombre se ha asociado el bosón de Higgs, también llamado bosón de Brout-Englert-Higgs. El Mecanismo Brout-Englert-Higgs es el fundamento de la teoría electrodébil de partículas elementales y sentó las bases de una visión unificada de las leyes básicas de la naturaleza.Se le concedió, junto con Robert Brout y Peter Higgs, el Premio de Altas Energías y Partículas de la Sociedad Europea de Física en 1997 y el Premio Wolf de Física en 2004 por el “mecanismo que unifica a corto y largo alcance interacciones a través de la generación masiva de bosones vectores gauge”. Hizo importantes contribuciones a la física estadística, teoría cuántica de campos, la cosmología, la teoría de cuerdas y super gravedad. En 2013 fue galardonado con el Premio Nobel de Física y el Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica junto a Peter Higgs y el CERN. Además del Premio Nobel de Física, obtuvo el Primer Premio por Essays on Gravitation, el de Altas Energías y Partículas de la Sociedad Europea de Física, los Premios Francqui, Wolf, Sakurai, y el Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica. Por real decreto, el 8 de julio de 2013 fue ennoblecido como barón por el rey Alberto II de Bélgica. Casado con Mira Nikomarow tiene tres hijos de un primer matrimonio y dos del segundo matrimonio.

publicado 26 Septiembre 2025

Alvin Roth, Premio Nobel de Economía

Alvin E. Roth nació en Nueva York, de padres judíos el 18 de diciembre de 1951. Se graduó de la Escuela de Ingeniería y Ciencias Aplicadas de la Universidad de Columbia en 1971, luego se trasladó a la Universidad de Stanford, recibiendo allí tanto su maestría como su doctorado en Investigación de Operaciones en 1973 y 1974, respectivamente. Después de dejar Stanford, Roth fue a enseñar en la Universidad de Illinois, que dejó en 1982 para convertirse en el profesor de economía de la Universidad de Pittsburgh; también se desempeñó como becario en el Centro de Filosofía de la Ciencia de la universidad y como profesor en la Escuela de Negocios Katz.​ En 1998, se incorporó a la Facultad de Economía de Harvard, hasta que decidió regresar a Stanford en 2012.​ En 2013, se convirtió en miembro de pleno derecho y fue profesor emérito en Harvard. ​Roth es miembro de la Academia Americana de Artes y Ciencias, de la Oficina Nacional de Investigación Económica (NBER) y la Sociedad Econométrica. ​ En 2013, Roth, Shapley y David Gale ganaron un Golden Goose Award por su trabajo en el diseño del mercado. Roth ha trabajado en la teoría de juegos, el diseño del mercado y la economía experimental. En particular, ayudó a rediseñar los mecanismos para seleccionar a los residentes médicos, a la oferta de plazas a los estudiantes de las escuelas públicas secundarias de la ciudad de Nueva York y a las escuelas primarias de Boston. Describiendo el dinamismo del diseño del mercado, Roth sugiere que a medida que cambian las condiciones del mercado, el comportamiento de las personas cambia las reglas, se descartarán las no operativas y se crearán nuevas reglas.Alvin Roth ganó en 2012 el Premio Nobel de Economía, en conjunto con su compatriota Lloyd Shapley, por ideas que fueron la base para que miles de personas adicionales pudieran realizarse un trasplante de riñones. Por ejemplo, una esposa puede necesitar un riñón y su esposo puede querer donarlo, pero tienen una incompatibilidad del tipo de sangre que hace imposible la donación. Ahora pueden hacer un intercambio.Sus propuestas surgieron de la teoría de juegos y Roth las aplicó al diseño de mercados. Así prosperó el concepto de mercados de emparejamiento o coincidentes (“matching markets”, en inglés), que llevó la clásica correspondencia de la ley de la oferta y la demanda a una escala en que el óptimo permitió salvar vidas. Gracias a esa innovación, pacientes pudieron recibir órganos de donantes desconocidos, quienes, a su vez, obtenían el beneficio para sus familiares de parte de otros desconocidos, generando una especie de cadena entre donantes vivos y receptores compatibles. No fue ese el propósito original de Roth cuando publicó sus primeros trabajos en el diseño de mercados estables; estaba más interesado en saber cómo se generaban las estrategias dominantes de médicos para elegir un trabajo. También se interesó en el mecanismo de las familias para escoger escuelas, algo que lo intrigaba desde sus años en la secundaria en Queens, Nueva York. Roth vino a Chile invitado por el Instituto Milenio para el Estudio de las Imperfecciones del Mercado y Políticas Públicas (MIPP), por el Centro de Modelamiento Matemático (CMM) y por Ingeniería Industrial de la Universidad de Chile. Roth está casado y tiene dos hijos. 

publicado 19 Septiembre 2025

Rudolph Marcus, Premio Nobel de Química

Rudolph Marcus nació en Canadá el 21 de julio de 1923, hijo de Esther Cohen y Myer Marcus. Su familia procede de Lituania.​ Creció en un barrio judío de Montreal, pero también pasó parte de su infancia en Detroit, Estados Unidos. ​Su interés por las ciencias comenzó a una edad temprana. Destacó en matemáticas en el instituto Baron Byng. Luego estudió en la Universidad McGill, donde tomó más cursos de matemáticas que un estudiante medio de química, lo que más tarde le ayudaría a crear su teoría sobre la transferencia de electrones. Se licenció en 1943 y se doctoró en 1946, ambos en la Universidad McGill.​ En 1958, se nacionalizó estadounidense. Tras licenciarse, en 1946, trabajó primero en el Consejo Nacional de Investigación de Canadá y después en la Universidad de Carolina del Norte y en el Instituto Politécnico de Brooklyn. En 1964, enseñó en la Universidad de Illinois. ​ En 1992 recibió el Premio Nobel por sus investigaciones de reacciones por transferencia de electrones. Estas reacciones juegan un papel importante en la fotosíntesis en que las plantas usan la energía solar para  producir oxígeno a partir de dióxido de carbono y agua, en la respiración de los humanos y otros seres vivos, y también en muchos otros procesos tales como la corrosión de metales, la emisión de luz por luciérnagas o el funcionamiento de baterías recargables de autos. La transferencia de electrones puede ser una de las formas más básicas de las reacciones químicas, pero sin ella la vida no podría existir. En el proceso de oxidación de las moléculas de los alimentos, dos iones de hidrógeno, dos electrones y una molécula de oxígeno reaccionan para dar lugar a una reacción exotérmica (que genera calor), así como a una molécula de agua. Debido a que la transferencia de electrones es una reacción tan amplia, común y esencial dentro de la naturaleza, la teoría de Marcus se ha convertido en algo vital dentro del campo de la química.Los nuevos desarrollos surgen como resultado de experimentos inéditos que arrojan resultados inesperados dijo Marcus para describir cómo surgió la teoría de la transferencia de electrones, que le valió el Premio Nobel de Química. El químico teórico, considerado entre los científicos más prominentes del mundo, comenzó a desarrollar la teoría de las reacciones de transferencia de electrones en los sistemas químicos en la década de 1950, cuando trabajaba en la Universidad Politécnica de Brooklyn. Marcus recibió títulos honoríficos de muchas universidades, incluso un doctorado honorario de la Universidad de Santiago de Chile en 2018, y muchos premios antes del Nobel en 1992. Durante el gobierno de Eduardo Frei Ruiz-Tagle,  presidió el jurado que otorgó las Cátedras Presidenciales en Ciencia entre 1995 y 1997, dictó la conferencia inaugural del 44° Congreso Internacional de Químicos Teóricos de Expresión Latina en Santiago, en el que el rector de la PUC, Ignacio Sánchez, le entregó la Medalla Monseñor Larraín Gandarillas por su gran contribución a nivel global. Tiene 10 títulos de Doctor Honoris Causa de universidades estadounidenses, canadienses, europeas y japonesas, es miembro honorífico de muchas sociedades científicas nacionales e internacionales, ha publicado cientos de artículos científicos originales, artículos de revisión, libros y capítulos de libros. De 102 años, está casado con su mujer durante 50 años, y es padre de tres hijos.

publicado 12 Septiembre 2025

Ralph Steinman, Premio Nobel de Medicina

Ralph Steinman nació el 14 de enero de 1943 en Canadá, hijo de inmigrantes de Europa oriental. Su padre, Irving, y su madre, Nettie, eran dueños de un almacén. Recibió la licenciatura en ciencias en la Universidad McGill de Montreal y su doctorado en medicina en 1968 en la Universidad de Harvard. Completó su formación médica en el Hospital General de Massachusetts. Fue investigador en biología celular de la Universidad Rockefeller. En 1973, acuñó el término “célula dendrítica” durante su postdoctorado en la Universidad Rockefeller. Las células dendríticas, llamadas así por su forma arborizada, median la comunicación entre antígenos dañinos y los linfocitos T linfáticos (glóbulos blancos que activan moléculas para combatir estos antígenos). Steinman demostró que estas células dendríticas son capaces de capturar invasores, como el virus del resfriado común, y enviar señales a linfocitos específicos para que los destruyan.Steinman dedicó el resto de su carrera a investigar cómo estas células especiales podrían utilizarse para combatir el VIH y el cáncer. Sin embargo, los antígenos tumorales liberados por las células cancerosas evaden el sistema inmunitario eliminando o escondiéndose de las células T defensivas. La quimioterapia destruye directamente las células cancerosas, pero también destruye células sanas. Gracias a investigaciones de Steinman, los tratamientos de inmunoterapia contra el cáncer pueden aprovechar la capacidad selectiva del sistema inmunitario natural. Las vacunas de inmunoterapia manipularían las células dendríticas para capturar antígenos tumorales y presentarlos a linfocitos específicos del cáncer, mejorando la capacidad del organismo para encontrar y destruir células cancerosas con mucha mayor precisión que la quimioterapia. Sin embargo, la quimioterapia actúa con relativa rapidez mientras la inmunoterapia fortalece el sistema inmunitario con mucho tiempo. Se estima que alrededor del 10% de los pacientes con cáncer pueden beneficiarse de los tratamientos de inmunoterapia. Sin embargo, se espera que esta cifra aumente a medida que más investigaciones revelen cómo funcionan estos mecanismos.En 2007, cuando Steinman recibió el diagnóstico de cáncer con una esperanza de vida de 6 meses, envió muestras de su tumor a laboratorios de inmunoterapia de todo el mundo. Steinman sabía que quizás era demasiado pronto para este tipo de tratamiento; aun así, depositó su fe en su investigación y se convirtió en su propio paciente. Logró prolongar su vida tres años y medio más de lo previsto y mantuvo una buena salud física durante la mayor parte del tiempo. Finalmente, el cáncer dejó de responder a las vacunas y la enfermedad se extendió por todo su cuerpo. Falleció el 30 de septiembre de 2011, apenas tres días antes de saber que le habían concedido el Premio Nobel de Medicina, siendo el único fallecido galardonado con un premio Nobel, y que se convirtió en paciente de su propia investigación. La Fundación no otorga el Premio a personas fallecidas, pero en el momento del anuncio, la noticia de su fallecimiento aún no había llegado al comité del Nobel, por lo que decidieron que su esposa e hijos podrían aceptar el premio en su nombre.  Steinman recibió numerosos galardones tales como el Premio Albert Lasker, el de la Fundación Internacional Gairdner y el William B. Coley del Instituto para la investigación del cáncer de Estados Unidos; fue elegido miembro del Instituto de Medicina y de la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos. 

publicado 05 Septiembre 2025

Barry Barish, Premio Nobel de Física

Barry Barish nació el 27 de enero de 1936, en Omaha, Nebraska, Estados Unidos. Hijo de Lee y Harold Barish, inmigrantes judíos de Polonia. Sus abuelos eran de la región de Europa del Este de una pequeña aldea cerca de Kiev. Llegaron a Omaha a inicios del siglo XX, donde había una pequeña comunidad judía. Luego su familia se trasladó a Los Ángeles por cuestiones laborales, donde había una comunidad judía más grande. No se considera religiosamente judío, pero su esposa y amigos son judíos. No tuvo una educación judía religiosa porque su familia era muy pobre, por lo que no pudo ir a una escuela hebrea. De niño le gustaba leer. Su padre no fue a la escuela y su madre venía de una familia donde su padre no les permitía a sus hijas ir a la escuela. Aunque sus padres no fueron educados, tenían un gran valor por la educación.Barish asistió a la John Marshall High School entre otras escuelas. Obtuvo un BA en Física en 1957 y se licenció en física experimental de altas energías en 1962 en la Universidad de California. Ingresó al Instituto de Tecnología de California (Caltech) en 1963 para experimentar en física de partículas utilizando aceleradores. Entre 1963 y 1966, fue investigador, y entre 1966 y 1991, profesor adjunto, profesor asociado y profesor de física. De 1984 a 1996 fue el investigador principal del Caltech High Energy Physics Group. De 1991 a 2005, fue catedrático de Física. Algún tiempo trabajó en la Universidad de Cornell donde probó un principio de física nuclear llamado “resonancia magnética nuclear”, del que igualmente nadie sabía cuál sería su uso. Pero hoy día se trata del dispositivo de escaneo más importante en medicina.En 1950, Einstein desarrolló una nueva teoría de la gravedad después de 200 años de la teoría de Newton, en la que predice que así como la electricidad y la luz se manifiesta en ondas, la gravedad también lo hace, pero pensó que no podrían ser detectadas porque son muy pequeñas. No pudo tener la visión de lo que se podría hacer en la actualidad con láseres modernos y óptica, dispositivos más sensibles de los que pudo llegar a imaginarse. Gracias a la detección de ondas gravitacionales anticipadas por Einstein, que venían de la fusión de dos agujeros negros que ocurrió hace 1.3 mil millones de años, pero tan lejos que le tomó todo ese tiempo hasta llegar hasta el punto en que captaron su señal, logro con el que Barish obtuvo el Premio Nobel de Física 2017. Este descubrimiento está considerado como uno de los logros científicos más importantes al validar uno de los pilares de la física moderna, la teoría general de la relatividad y abrir una nueva ventana para observar el Universo. Es miembro de la Sociedad de Física, de la Academia de las Artes y Ciencias, y de la Academia Nacional de Ciencias de los Estados Unidos, de la Academia de Ciencias de Rusia y de la Royal Society. Ha obtenido las siguientes distinciones: Premio Enrico Fermi, Giuseppe and Vanna Cocconi Prize, Medalla Henry Draper, Premio Nobel de Física, Premio Princesa de Asturias de Investigación Científica y Técnica, y la Medalla Nacional de Ciencia de los Estados Unidos. Está casado con Samoan Barish y tienen dos hijos.

publicado 29 Agosto 2025

Joseph Stiglitz, Premio Nobel de Economía

Joseph Stiglitz nació en Indiana el 9 de febrero de 1943 en una familia judía, pero no hay información disponible sobre su nivel de observancia religiosa o práctica del judaísmo. De 1960 a 1963, estudió en el Amherst College, en el cuarto año de pregrado se trasladó al  MIT donde realizó su postgrado. De 1965 a 1966 estudió en la Universidad de Chicago, y de 1966 a 1967 estudió para su PhD en el MIT, y de 1969 a 1970, fue investigador Fulbright en la Universidad de Cambridge. En años siguientes impartió clases en las universidades de Yale, Duke, Stanford, Oxford y Princeton. Es actualmente Profesor en la Universidad de Columbia.Es conocido por su visión crítica de la globalización, de los economistas de libre mercado, del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial. En 2000, fundó la Iniciativa para el Diálogo Político, un centro de estudios con base en la Universidad de Columbia, y dirige el Instituto Brooks para la Pobreza Mundial, de la Universidad de Mánchester. Considerado generalmente un economista de la nueva economía keynesiana, fue durante 2008 el economista más citado en el mundo. ​ En  2012 ingresó como académico correspondiente en la Real Academia de Ciencias Económicas y Financieras de España. Durante la presidencia de Bill Clinton fue presidente del Consejo de Consejeros Económicos. En el Banco Mundial, estuvo como primer vicepresidente y economista jefe hasta que el Secretario del Tesoro lo forzara a renunciar. Ha sido uno de los autores principales en el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático. Es miembro de la Pontificia Academia de Ciencias Sociales. Fue laureado con el Premio Nobel en el año 2001 por sus análisis de mercados e información asimétrica. Su investigación más famosa es sobre el “screening”, una técnica usada por un agente económico para extraer la información privada de otro. La literatura económica neoclásica tradicional asume que los mercados son siempre eficientes excepto por algunos casos. Stiglitz y otros revocan esa presunción; para él, no existe la “mano invisible” de Adam Smith.Stiglitz ha incursionado en política en una controvertida posición de izquierda. El politólogo chileno Axel Kaiser destaca cómo Stiglitz ha estado más que dispuesto a promover y defender a los demagogos y dictadores socialistas de Latinoamérica. Visitó al Presidente Boric, quien se ha autodefinido como “marxista” y que ha prometido “enterrar el neoliberalismo”, su amistad con la corrupta dinastía Kirchner en Argentina es de larga data, a quien apoyó en su agenda “antineoliberal”, gobierno que terminó en 2022 con una tasa de inflación de más del 100% y una tasa de pobreza de casi el 40%. Cuando Evo Morales necesitaba a un economista internacional para dar credibilidad a la nacionalización de los campos de gas y petróleo, Stiglitz estuvo feliz de complacerlo. En 2007, Stiglitz viajó a Ecuador para reunirse con la administración de Rafael Correa para discutir políticas económicas. En 2007, Stiglitz también viajó a Caracas para reunirse con Hugo Chávez y felicitarlo personalmente por el gran trabajo que estaba realizando en el frente económico y de políticas públicas. Pero en ningún lugar se reflejó más claramente el desprecio de Stiglitz por la democracia liberal, la verdad y los derechos humanos que en sus visitas a Cuba en 2002 y 2016. Está casado con Anya Schiffrin y tiene cuatro hijos.

publicado 22 Agosto 2025

Arthur Kornberg, Premio Nobel de Química

Arthur Kornberg nació el 3 de marzo de 1918 en Nueva York. Su padre, Joseph Kornberg, era sastre y más tarde montó una pequeña ferretería. Hablaba varios idiomas de forma autodidacta; su madre fue Lena Katz, ambos judíos emigrados de Polonia. Realizó los primeros estudios en escuelas públicas, después en la Abraham Lincoln High School y más tarde en el City College de Nueva York. Obtuvo el grado de bachiller en biología y química con honores en 1937. En plena gran depresión, mientras estudiaba, ayudó a su familia trabajando en sus comercios. Dada su condición de judío, le fue difícil ingresar a Harvard, Cornell y Columbia, entre otras, pero fue aceptado para estudiar medicina en la Universidad de Rochester, donde ingresó en 1937. Se graduó en 1941 y completó el periodo clínico en el Strong Memorial Hospital entre 1941 y 1942.A finales de los años cuarenta la bioquímica era todavía un campo poco desarrollado. Pronto Kornberg llegó a ser un especialista en coenzimas, moléculas no proteicas que participan con las enzimas en reacciones metabólicas. En 1953 se trasladó al Departamento de Microbiología de la Universidad de Washington. Ese mismo año Watson y Crick descubrían la estructura del ADN, lo que fue decisivo en la trayectoria de Kornberg. Él y su equipo estudiaron a mediados de los años cincuenta los mecanismos por los que el ADN se replica. Después de varios procesos de purificación, obtuvieron pequeñas cantidades de la enzima ADN-polimerasa, que cataliza la síntesis  del ADN. Después de un tiempo sintetizaron por primera vez ADN en un tubo de ensayo. Este hecho le valió el premio Nobel en 1959. Ese mismo año organizó el Departamento de Bioquímica de la Universidad de Stanford. Kornberg atrajo a científicos destacados que pronto convirtieron el departamento en el más importante del país. En 1967 sintetizaron un ADN viral viable, lo que entonces se llamó “la creación de la vida en un tubo de ensayo”. Después hallaron enzimas responsables de la reparación y el reordenamiento del ADN así como otras responsables del inicio y alargamiento de las cadenas de ADN y los cromosomas.Kornberg jubiló como profesor emérito en 1988. Continuó activo hasta prácticamente pocos días antes de su fallecimiento. Desde 1991, Kornberg cambió su foco de la replicación del ADN a una enzima que producía polifosfato, una forma de almacenamiento de energía para las células bacterianas, e identificó posibles funciones que pudieran utilizarse para el desarrollo de nuevas drogas. Dedicó también su vida a la enseñanza en los posgrados de magister y doctorado. Publicó más de trescientos artículos y varios libros. Desempeñó diversos cargos, formó parte de comités y consejos de diversas universidades, del gobierno y de institutos de investigación ligados a industrias. Sus descubrimientos fueron decisivos en el desarrollo de la ingeniería genética, además de proporcionar la base para elaborar muchos medicamentos actualmente utilizados para tratar el cáncer y las infecciones virales. Se le considera el padre de la replicación del ADN. Sostenía que sus estudios eran una prueba evidente que la investigación básica es fundamental para obtener avances médicos con repercusiones prácticas. Recibió numerosos premios y honores en vida. Se casó tres veces y tuvo tres hijos. Su hijo Roger obtuvo el premio Nobel de Química en 2006. Murió el 26 de octubre de 2007 en Stanford, California, de una insuficiencia respiratoria.

Isaac Caro, Roman Yosif y Gabriel Zaliasnik opinan

Cuando el fuego se apagaPor Gabriel Zaliasnik, Profesor de Derecho Pena Facultad de Derecho, Universidad de Chile. Expresidente de la CJCh.Escribo esta columna a solo horas que, finalmente, tras 738 días desde la barbarie perpetrada por grupos terroristas palestinos el 7 de octubre de 2023, el conflicto en Gaza llegue a su fin y se liberen los últimos 48 civiles secuestrados, vivos y muertos. El acuerdo de Sharm el Sheij, impulsadopor Washington y apoyado por el mundo árabe y musulmán, marca un punto de inflexión. Lo que no logró el indolente apaciguamiento europeo ni el antisemitismo de Sánchez en España, ni las condenas estériles de la ONU, lo consiguió el Presidente Donald Trump con resión decidida sobre Hamas. Su firme claridad moral —no la fría e interesada equidistancia ni las mal intencionadas palabras vacías de Petro o Boric- abrieron en definitiva la puerta a la paz.Esta guerra no era inevitable. Fue impuesta cuando Hamas con intenciones genocidas asesinó, secuestró y convirtió a inocentes en escudos humanos. Israel respondió como cualquier democracia que se defiende del terrorismo. El acuerdo da un respiro a millones, pero es innegable que estos años rompieron algo profundo: el espejismo de normalidad de la vida judía en todo el mundo. Desde el 7 de octu-bre, cada día nos recuerda que el antisemitismo no desapareció tras el Holocausto de 6 millones de judíos, solo dormía. Cuando el yiha-dismo lo despertó, lo hizo con furia. Las máscaras cayeron y muchos entendimos, con dolor, quiénes estaban realmente a nuestro lado.Pero de ese horror también brotó una certeza. El pueblo judío ya no es un huésped en la historia de otros, sino que un actor libre y soberano en su tierra milenaria, con lengua, sueños y destino propios.Israel no es un accidente geopolítico, sino la prueba viva de la continuidad y renacimiento judío. La guerra reafirmó que por su existencia no debe pedir disculpas. Su firmeza no fue arrogancia sino supervivencia. De allí que la extrema izquierda islamofascista que tanto exigía un cese al fuego unilateral, hoy no celebre.Ahora toca mirar hacia adelante. Gaza debe reconstruirse, pero sobre nuevos fundamentos: desradicalización y educación para la paz. Nunca más un niño debe ser usado como escudo ni convertido en terrorista. Ningún aula debe dedicarse a impartir odio. La ayuda internacional debe estar condicionada al desarme, la rendición de cuentas y la edificación de instituciones civiles palestinas fuertes y no corruptas. Solo así podrá nacer un futuro compartido en el que la prosperidad sustituya al martirio.Hay en el esfuerzo de Trump un nuevo comienzo, uno en que ya no se cuestione la legitimidad de Israel como único estado judío, y uno en que se sienten las bases para la autodeterminación palestina, viviendo en paz y seguridad. Nada lo expresa mejor que la letra de la canción “A new day will rise” de la cantante israeli Yuval Raphael en el festival Eurovision 2025: “Un nuevo día surgirá, la vida continuará. /Todos lloran, no llores solo. /La oscuridad se desvanecerá, todo el dolor pasará. /Pero nos quedaremos, incluso si dices adiós.*Reproducción autorizada por el autor.Publicada en Diario La Tercera. (14-10-2025)--Volver a casa para un nuevo comienzoPor Roman Yosif Capdeville, Director del Círculo Israelita de Santiago.Describir desde las emociones más profundas lo que hemos vivido en las últimas horas parece una tarea imposible. Lo único que podemos afirmar es que estamos cerrando un ciclo largo, complejo y agotador, especialmente para las familias de los secuestrados, para toda la sociedad israelí y para las comunidades judías del mundo que hemos seguido este proceso día a día desde el 7 de octubre de 2023. Nuestro compromiso sionista nunca estuvo tan fuerte como en estos meses.Como generación, somos privilegiados. Hemos sido testigos de la era dorada del desarrollo de la vida judía y del Estado de Israel, nacida en la posguerra y tras 2.000 años de persecuciones. Y hoy también tenemos la fortuna de presenciar el inicio de una nueva etapa en la historia del Estado Judío y de Medio Oriente en general.Nunca antes habíamos estado tan cerca de una estabilización en las relaciones de Israel con sus vecinos árabes y con el mundo musulmán. La cumbre de Sharm El Sheik del lunes, con Trump a la cabeza, es un ejemplo de ello. Allí no solo participaron países moderados como Jordania, Egipto y Arabia Saudita, sino también Qatar, uno de los principales financistas del Hamas, e Indonesia, el país musulmán con mayor población del mundo. Ver esas imágenes llena de esperanza, pues todos muestran voluntad política de poner fin a la guerra provocada por Hamas y sus aliados iraníes, avanzar en la ampliación de los Acuerdos de Abraham y, sobre todo, construir una Gaza sin islam radical y abrir una posible convivencia en paz entre el futuro Estado Palestino e Israel.Hace algo más de un año, tuve la oportunidad de viajar con un grupo de dirigentes comunitarios a Israel para conmemorar Yom Haatzmaut. Fue quizás una de las conmemoraciones más tristes en la historia reciente, en plena guerra, en medio del duelo y la incertidumbre que enfrentaba el país. La tensión social, los secuestrados, los reservistas en movilización, la economía afectada y los cuestionamientos al gobierno de Bibi Netanyahu. En ese momento había mucha confusión, división y poca claridad respecto al futuro. Hoy, tras estos meses, hemos llegado a aquel día con un alto costo en vidas humanas, en salud mental, en cohesión social y en antisemitismo global. Sin embargo, la comunidad internacional, liderada por Estados Unidos, presenta un plan audaz. Habrá que ver los pasos de su real implementación que nos ilusiona a todos. La pregunta que queda en el aire es: ¿Qué viene para la interna de Israel ahora?La imagen que captamos en mayo de 2024 es de un Israel de contrastes. Por un lado, el Tel Aviv de la innovación y los startups billonarios, con el Bnei Brak, donde a pocas cuadras, el mundo ultraortodoxo vive en condiciones de pobreza y lejanía de la modernidad. También tenemos el Israel de los ashkenazim liberales y de las universidades de clase mundial, pero también el Israel Mizrahi, cada vez más relevante, con su cultura más tradicional. oriental y conservadora. A esto hay que sumar las grandes ciudades, donde el valor del metro cuadrado alcanza el de Manhattan, versus las comunidades agrícolas como en el Neguev, que continúan luchando contra el desierto con innovación.Estas diferencias profundas, a veces algo irreconciliables según demógrafos como Sergio Della Pergola, enriquecen a un Israel diverso y lo convierten en una potencia cultural, económica, militar y social única en el mundo.Pero, tras el fin de esta guerra, Israel debe enfocarse en revisar su sistema político fragmentado, sus políticas públicas respecto a la comunidad ultraortodoxa, y en avanzar en la integración de la población árabe-israelí. Es fundamental repensar su estrategia de defensa, manteniendo alianzas con Occidente, pero sin depender exclusivamente de ellas para enfrentar futuros escenarios de agresión.Todos estos desafíos de largo plazo requieren consensos y una visión de Estado, tal vez apuntando a un nuevo gobierno de unidad nacional. La sociedad israelí necesita potenciar a sus liderazgos moderados, aislar a los más radicales y asegurar la sostenibilidad del Estado para sus próximos 77 años, que estará en juego durante esta etapa decisiva.Lo positivo es que, tras la masacre del 7 de octubre y la guerra en múltiples frentes que siguió, se abre un nuevo escenario para diseñar, con liderazgo, fuerza y sabiduría, el futuro del Pueblo Judío.Desde Chile, también podemos ser parte de esa construcción. Es momento de fortalecer nuestra comunidad: más amable, más integrada, con menos odios y con menos deslegitimación entre instituciones. Lo anterior con un foco especial en ser fuertes por dentro para los desafíos que tenemos hacia el exterior, donde nadie sobra. Tenemos todos una responsabilidad ética con nuestro pasado y con la continuidad judía de nuestros hijos, que al igual que en Israel, requiere más Ahavat Jinam (amor gratuito) para asegurar una vida judía plena, profunda y significativa.La invitación es compleja y simple a la vez: Hinei ma tov umanaim shevet ajim gam yajad, aprovechemos este momento de catarsis colectiva como pueblo, para que este volver a casa simbolice volver a ser más hermanos y caminar más juntos que nunca este nuevo comienzo.Am Israel Jai.--Acuerdo de paz Israel-Hamás: Alcances y limitaciones Por Isaac Caro, Universidad Alberto HurtadoEl 13 de octubre de 2025 será considerado como un día histórico para Israel y para el conjunto de Medio Oriente. En primer lugar, tuvo lugar la liberación de 20 rehenes israelíes que fueron capturados en el ataque llevado a cabo por Hamás en contra de Israel el 7 de octubre de 2023. Aquel día el movimiento islamista asesinó a unas 1.200 personas, tomando como rehenes a unas 250. En segundo lugar, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dio un discurso ante la Knesset o parlamento israelí, celebrando el cese al fuego y el regreso de los rehenes, anunciando un nuevo amanecer para la región. Anteriormente, sólo tres presidentes estadounidenses se habían dirigido ante la Knesset.  En marzo de 1979, el discurso de Jimmy Carter se dio en el contexto de las negociaciones que llevaron a los Acuerdos de Campo David, en virtud de los cuales Egipto e Israel firmaron un tratado de paz. Posteriormente, después de los Acuerdos de Oslo entre Israel y la Organización de Liberación Palestina, en octubre de 1994 Bill Clinton se dirigió a los legisladores israelíes. En la década siguiente, el 15 de mayo de 2008, George W. Bush pronunció un discurso con motivo del 60 aniversario de la fundación del Estado de Israel. El tercer hecho, también significativo, refiere a la firma del acuerdo de paz alcanzado por Israel y Hamás, suscrito en la ciudad egipcia de Sharm el Sheik, por el presidente Trump y los máximos dirigentes de Egipto, Turquía y Qatar, que actuaron como mediadores de este convenio. En una ceremonia que contó con la presencia de más de 20 jefes de Estado y de Gobierno se selló un acuerdo impulsado por el presidente estadounidense y que genera esperanzas para una paz duradera en la guerra de Gaza, como primer paso para una solución al largo conflicto israelí-palestino. El acuerdo, de 20 puntos, establece, entre otras cosas, un cese al fuego, la liberación de rehenes israelíes, la excarcelación de presos palestinos, lo cual se ha cumplido, faltando que Hamás libere a los rehenes muertos en cautivero. Además, quedan muchos temas que parecieran ser difíciles de resolver, como el desarme definitivo del grupo terrorista Hamás, la reconstrucción de Gaza, la retirada completa de las fuerzas de defensa israelíes, y la forma de gobierno en Gaza. Al respecto, se establece la conformación de una “junta de paz”, presidida por el presidente Trump, con la participación del exprimer ministro británico, Tony Blair, así como el despliegue de “fuerzas policiales palestinas” con el apoyo de Egipto y Jordania. A pesar de todas sus limitaciones, el acuerdo abre un camino de esperanza hacia una paz duradera en la región, que sea consistente con la ampliación de los Acuerdos de Abraham, en que nuevos países árabes reconozcan y entablen por primera vez relaciones diplomáticas con Israel, y se avance en la fórmula de dos Estados, que incluya fomentar las condiciones para la creación de un “futuro Estado palestino”, como lo estipula el punto 19 del acuerdo. 

¡Estamos completos!

Dada la contingencia, preparamos la caravana rápidamente para dar respuesta a un sentir comunitario. Y fue muy emocionante. La gente estaba muy alegre, entusiasmada, salieron gritando, cantando, con niños. Fue una explosión de alegría por la liberación de los secuestrados. Los miembros de nuestra comunidad tenían ansias de expresar lo que sentían, sin miedo, con mucha energía. Aún cuando quedan cuerpos en Gaza, tenemos la alegría de recuperar a los vivos, y seguiremos la lucha hasta que vuelvan todos.Alfredo Misraji, presidente de la CJCh--Creo que la alegría que se sentía en la caravana nos dio mucho ánimo como comunidad. Nunca había visto tanto orgullo de ser judío en Chile como ayer, judíos de todas las edades con banderas de Israel, música en hebreo y gritando “Am Israel Jai”. Lo que más me alegró fue la cantidad de personas que aplaudían al paso de los autos. Mostrarnos como somos, con la unidad y los valores que tenemos, nos abre muchas puertas, y lo que hicimos ayer lo demuestra.Mica Tramer, presidenta de la FEJJ--Lo del lunes fue un hecho histórico por la cantidad de gente. Además fue una oportunidad única que muestra que sí podemos salir a la calle, que sí hay necesidad de expresar, levantar la cabeza y alzar la voz. Creo que no tenemos que tener miedo de salir. La comunidad no está acostumbrada a este tipo de cosas, y ¡pucha que lo necesita! Fue un momento de encuentro en que, desde niños hasta abuelitas, estuvieron felices gritando “Am Israel Jai”. Estábamos todos felices, y fue un gran acierto hacerlo ese mismo día, porque la caravana se transformó en un espacio de desahogo. Necesitamos aprender que sí podemos salir a la calle: como comunidad lo merecemos. El miedo de que mucha gente nos va a criticar o amenazar, debe quedar atrás. Los aplausos y el apoyo que recibimos fueron mucho más que las ofensas. ¡Se puede salir y mostrar el orgullo judío!Gerardo Gorodisher, expresidente de la CJCh--Después de dos años marcados por tanto dolor, odio e indiferencia, salí a las calles de Santiago con mis banderas de Chile e Israel, un poco asustada al comienzo, pero con más ganas de mostrar mi apoyo a la paz y celebrar la vuelta de los rehenes que tanto, tanto esperamos.Recibí gestos de apoyo, aplausos y miradas sonrientes que me sorprendieron y me emocionaron.El silencio que tantas veces dolió en las redes hoy casi no estuvo en mi recorrido. Fue esperanzador. Fue sanador.Gracias de corazón, si en estos dos años no elegiste la indiferencia, si mandaste un mensaje, una reacción, una palabra de apoyo o simplemente estuviste ahí.Quizás no “tenías nada que ver con la causa”, pero elegiste la empatía, la amistad y el cariño.Jamás olvidaremos eso tampoco.Hoy volví a sentir esperanza <3Nicole Alter--Participar en la caravana fue una experiencia profundamente significativa para mí. No fue solo un acto simbólico: fue una expresión de memoria, unidad y esperanza. Sentí el peso del dolor colectivo, pero también la fuerza de un pueblo que no se resigna al olvido ni al silencio.Me conmovió —y gratamente sorprendió— ver tantas muestras espontáneas de apoyo de personas en las calles: gestos, miradas, bocinazos, manos levantadas. En un mundo que tantas veces elige mirar hacia otro lado, ese respaldo sincero devolvió algo de fe en la humanidad.Volví de esa caravana con el corazón lleno y la convicción más firme de que, mientras haya quienes se movilicen por la vida y la dignidad humana, ningún cautiverio ni oscuridad podrá vencer del todo.Ariel Schapiro--Debo confesar que hoy lloré de emoción. Teníamos que salir a las calles, porque el mundo tiene que ver y sentir lo importante que es este momento, en que se han liberado a veinte rehenes, se está alcanzando la paz, se ha declarado un alto al fuego y, cada vez más, Hamás está quedando aislado.Por eso esta caravana —con más de 300 autos y cientos de banderas— fue una instancia muy especial para estar con la comunidad y compartir nuestra alegría con todos los chilenos.Shai Agosin, expresidente de la CJCh--La caravana fue un momento de catarsis: por fin pudimos permitirnos estar felices después de dos años de angustia y tristeza. Celebrar orgullosos a nuestro amado Israel en las calles, junto a tanta gente, y recibir la buena onda de quienes pasaban a nuestro lado fue maravilloso.Ariela Agosin, expresidenta de la CJCh--Siento que, después de dos años en que venimos sintiendo un dolor en el corazón, una tremenda pena, un abandono y una soledad muy grande, en que muchos pensaban que tenían que esconder su judaísmo o sentían miedo de expresarlo abiertamente en la calle, esta fue una muy buena experiencia.Fue un momento de alegría, de esperanza, porque empezamos a sentir el término de la guerra y un horizonte mucho más positivo y esperanzador, por lo cual era necesario abrazarnos, mirarnos, salir a la calle juntos y decir que estamos orgullosos de quienes somos y de vivir nuestro judaísmo abiertamente, en la calle y sin miedo.Dafne Englander, directora ejecutiva CJCh--No tenía claro cuántos seríamos los que íbamos a participar en la caravana por el término de la guerra y la liberación de los Jatufim. Cuando estacioné detrás de otro auto antes de la calle Ben Gurión, pude ver que los judíos de Chile dijimos “presente”. Mi emoción era inmensa, y junto a mi señora empezamos a cantar a toda voz “Am Israel Jai”.Durante el recorrido pude ver a personas en la calle que nos aplaudían, y eso me llenó de orgullo.Salo Goldzweig--Fue emocionante ver la convocatoria espontánea a la Caravana por la Vida y la Paz en Chile, celebrando la alegría por la liberación de nuestros hermanos secuestrados por Hamás. Una multitud se reunió con globos, banderas y sonrisas para recorrer las calles entre bocinas y esperanza. Fue un momento histórico para nuestra comunidad, que quedará grabado en nuestra memoria y en el corazón de nuestros hijos.Tauba Müller--Tengo 46 años y no recuerdo haber salido con banderas de Israel a mostrar nuestra identidad sionista, y esto fue más emocionante todavía porque lo pude compartir con mi esposa y mis dos hijos, que estaban muy emocionados, muy orgullosos de Israel, de mostrar que somos judíos, que somos sionistas, que amamos al Estado de Israel y deseamos que perdure en el tiempo. Y quisimos salir a manifestárselo a todo el país. Y la verdad es que recibimos mucho apoyo. Hubo muchos pulgares hacia arriba, muchos toques de bocina en respuesta a los nuestros, muchos aplausos. Algunos autos nos felicitaban o hacían el símbolo de la paz. Entonces fue muy lindo, muy lindo, y nos dejó con el alma muy llena.Creo que para todos los que participamos, para las nuevas generaciones, y en especial para mis hijos, este fue un mensaje muy potente: no escondernos y mostrar con orgullo nuestro sionismo.Diego Barr--Lo que se sintió en este momento tan histórico, en que liberaron a los rehenes, fue súper emocionante. Ver a tanta gente de la comunidad unida, sin escondernos y alzando la voz por lo felices que estábamos después de dos años tan duros, me conmovió profundamente.Me sorprendió mucho ver que también había gente que nos apoyaba, que levantaba el pulgar, nos sonreía y aplaudía.Eso también me dio mucha emoción y alegría, porque no me hubiera imaginado que, más allá del antisemitismo que vemos en las redes sociales, hay gente en la calle que nos apoya.Galit Rezepka

EL INICIO DEL FIN DE UNA PESADILLA

Baruj Atá Adonay Elohenu Mélej Haolam, Shehejeiánu vequiemánu vehiguianu lizman haze“Bendito eres Tú, Adonái, nuestro D-os, Rey del universo, que nos has dado vida, nos has sostenido y nos has permitido llegar a este momento.”Con esta bendición  las familias recibieron a los veinte secuestrados que volvieron con vida, y a la vida, el lunes recién pasado. Padres, madres, esposas e hijos se fundieron en un interminable abrazo con quienes estuvieron 738 días en cautiverio, sometidos a torturas y a un sufrimiento inimaginable.El portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel anunció:“Después de 738 días, los últimos 20 secuestrados vivos han regresado a casa. Este es un momento que pertenece al pueblo de Israel, a todos aquellos que creen en la humanidad, a los soldados que lucharon con valentía, a las familias que esperaron con fe y a los caídos cuyo sacrificio hizo posible este día. Desde lo más profundo de nuestro dolor hemos demostrado al mundo: Israel no olvida a su gente”.Reencuentros: historias de resiliencia que nos emocionaron hasta las lágrimasElkana Bohbot, israelí-colombiano, abrazó a su hijo de cinco años. Su esposa escribió el siguiente mensaje: “Hace dos años que estamos esperando este momento. El instante en que nuestra pequeña familia volverá a reunirse. El hombre que significa el Hogar para mí, está regresando a casa, a mí, y más que nada, a Reem, nuestro hijo”.David Cunio, argentino-israelí, se reunió con sus hijas, Emma y Yuli, tras dos años. Las niñas también fueron secuestradas por Hamás cuando tenían apenas tres años y hasta ahora soñaban con reencontrarse con papá.Conocimos a Iair y Eitan, por ser argentinos. Ambos fueron secuestrados del Kibutz Nir Oz. Iair fue liberado tras casi 500 días y nunca dejó de luchar por el regreso de Eitan, a quien pudo abrazar el lunes 13 de octubre.Evyatar David resistió la tortura. Lo hicieron cavar la que dijeron sería su tumba. Pero sobrevivió y regresó a los brazos de su familia.Omri Miran, se reencontró con su esposa y sus dos hijas, de 2 años y apenas 6 meses cuando fue secuestrado.La historia de Avinatan Or es una de las más conocidas. El día del ataque estaba fuera de peligro, pero regresó para salvar a otros. Esa decisión le costó la libertad durante 738 días.Este lunes se reencontró con su pareja, Noa Argamani, quien también fue secuestrada y liberada en una operación especial de las FDIUna de las imágenes más conmovedoras fue la del padre de Bar Kupershtein, quien quedó paralítico tras un accidente de tránsito y prometió recibir a su hijo de pie. Así fue: al ver regresar a su hijo, se incorporó y lo abrazó, desatando lágrimas en todo Israel y todo el mundo.Estos momentos, capturados en videos y fotografía virales, simbolizan la sanación. Sin embargo, quienes regresaron enfrentan los desafíos de la rehabilitación. Familias como la de Matan Zangauker insisten en no descansar hasta recuperar todos los cuerpos.Donald Trump: El artífice del acuerdoEl presidente estadounidense Donald Trump pronunció un discurso histórico en la Knésset por su rol en la liberación de los rehenes, describiendo el día como “un avance trascendental” y “un nuevo comienzo para Medio Oriente”.En medio de ovaciones, aseguró que el acuerdo marca “el inicio de una era dorada para Israel y la región”.Por su parte, Benjamín Netanyahu reconoció que Trump fue “determinante para el regreso de los rehenes”.Los países mediadores —EE.UU., Egipto, Catar y Turquía— firmaron un plan de paz en una cumbre celebrada en Sharm el Sheij, Egipto, con la presencia de una veintena de líderes mundiales, incluido el propio Trump.La alegría y el dueloLa euforia del regreso se vio ensombrecida por el duelo de las víctimas que no sobrevivieron.El lunes, Hamás entregó los cuerpos de Guy Illouz, Yossi Sharabi, Bipin Joshi y el capitán Daniel Pérez. Las familias lloran a sus seres queridos, mientras otras siguen esperando.Hamás está devolviendo los cuerpos de a poco, incumpliendo el acuerdo.Eli Sharabi, ex rehén israelí liberado por Hamas en Gaza en febrero pasado, muestra ante la ONU la fotografía de su difunto hermano Yossi, asesinado por Hamas (Reuters).El Foro de Familias de Rehenes y Desaparecidos expresó su desesperación: “Esperamos que el gobierno de Israel y los mediadores actúen inmediatamente para corregir esta terrible injusticia”.No recuperar los restos es una pesadilla para los familiares, pues la digna sepultura es importantísima para el judaísmo, Hamás lo sabe y desde el mismo 7 de octubre -cuando decidieron llevarse los cadáveres a Gaza- han utilizado ese sufrimiento como arma.Así como lloramos a los muertos que aún no llegan, lo hacemos por aquellos que no podemos olvidar. En Ma’ale Adumim, se erigió una estatua en memoria de Shiri, Ariel y el pequeño Kfir Bibas, asesinados en cautiverio. La imagen de Shiri abrazando a sus hijos se convirtió en uno de los símbolos más desgarradores del 7 de octubre.Sociedad israelíDurante dos años, los rostros de los secuestrados estuvieron presentes en cada calle, cada sinagoga, cada plaza.Los carteles dispuestos en el aeropuerto Ben Gurión fueron finalmente retirados, marcando el cierre de una etapa.Kikar Hatufim, la Plaza de los secuestrados en Tel Aviv, fue el epicentro de las familias de los secuestrados. Allí se realizaron vigilias, manifestaciones y shabatot.   Se convirtió en un espacio de encuentro para las familias y sus simpatizantes. Desde allí se organizaron marchas en todo el país para exigir el alto el fuego y un acuerdo sobre el regreso de los secuestrados.Hoy se proyecta transformar la plaza en un sitio permanente de memoria y unidad nacional.Unidad global y celebraciones La diáspora judía, se emocionó con la llegada de cada sobreviviente y el reencuentro con sus seres queridos. La celebración de Simjat Torá multiplicó la alegría. Las comunidades religiosas de todo el mundo invitaron a celebrar este primer Simjat Tora con “simjá” (alegría) después de los dramáticos hechos de 2023.Comunidades judías de todo el mundo organizaron caravanas, marchas y encuentros para abrazarse después de dos años de angustia a la distancia.En Chile, la Comunidad Judía de Chile (CJCh) convocó a una caravana que permitió expresar la alegría, así como el sentimiento de unidad y esperanza que ha imperado durante esta crisis (nota en páginas interiores).Un mensaje de resiliencia Mientras el mundo observa, los judíos demuestran que en medio del dolor más profundo puede florecer la esperanza.Han sido dos años de tristeza, de angustia, de desgarro por cada muerto, por cada familia que perdía a un ser querido; de impotencia ante cada video de los secuestrados, pero nunca de falta de fe.El judaísmo ha sobrevivido a la destrucción, al exilio y al odio, pero siempre ha vuelto a levantarse. Lo que vimos esta semana no fue solo el fin de un cautiverio, sino la afirmación de una identidad milenaria que se niega a rendirse.Shehejeianu: gracias a D-os por permitirnos llegar a este momentoAm Israel Jai —el pueblo de Israel vive.

Círculo Israelita de Santiago y Club La Dehesa se unen para fortalecer la vida judía en Chile

El 25 de septiembre quedará marcado como una fecha significativa para la comunidad judía en Chile. En esa jornada, el Círculo Israelita de Santiago (Mercaz) y el Club La Dehesa, firmaron una alianza estratégica con el objetivo de potenciar la vida comunitaria, deportiva y social de sus socios, abriendo un espacio de cooperación que, según todos los participantes, será duradero y fructífero.La ceremonia se realizó en el Kadima Center, en un ambiente de cercanía con palabras de las autoridades de ambas instituciones, quienes coincidieron en que el acuerdo representa una forma concreta de tender puentes y crear sinergias.Desde el Círculo Israelita de Santiago, el entusiasmo también se hizo notar. David Naschelski, director del CIS, recalcó el valor de trabajar de manera conjunta con instituciones de prestigio: “Estamos muy contentos de hacer esta alianza que va a fortalecer los beneficios que podemos ofrecer a nuestros socios. Al mismo tiempo, seguimos estrechando lazos comunitarios con otras instituciones y generando un modelo de crecimiento mutuo. Esto no se trata de que cada institución crezca sola, sino de que todos podamos potenciarnos. Además, el Mercaz aporta volumen de socios que es un buen match con las necesidades del club. Al final, todos ganamos”, señaló Naschelski.Tradición y aperturaPara Sebastián Bercovich, director del Club La Dehesa, este acuerdo es parte de un proceso natural de acercamiento a la comunidad judía en Chile: “Estamos muy contentos y emocionados. Esta alianza es parte de uno de los pilares más importantes para nuestro Directorio, que es justamente proteger y profundizar los valores fundacionales y la identidad judía de nuestro Club tal como lo imaginaron sus fundadores hace más de 60 años. Estamos seguros que esta alianza será próspera, duradera y traerá grandes beneficios para los socios de ambas instituciones”.El Mercaz reafirma su rol comunitarioEn representación del Círculo Israelita de Santiago, Mario Kiblisky, director ejecutivo del Mercaz, destacó que se trata de una nueva etapa: “Hace algunas semanas nos asociamos con el Estadio Israelita, y ahora con el Club La Dehesa. Estos acuerdos reflejan lo que entendemos como vida comunitaria: un espacio donde la cultura judía y el deporte se entrelazan para fortalecer la identidad judía en un entorno plural, abierto y diverso. En concreto, familias socias del Círculo Israelita de Santiago podrán optar a ser socios del Club La Dehesa en la categoría “No Golf”, con una membresía mensual que se pagará directamente al Club, actualmente de UF 5. Además, estarán exentos del pago de la cuota de incorporación. Andrea Arueste - andrea@cis.cl.-, directora del Centro Comunitario, podrá resolver dudas y entregar mayor información”.Una apuesta por la tradición y la familiaEl espíritu de esta alianza también fue resaltado por quienes ven en el Club La Dehesa un espacio donde el judaísmo pueda transmitirse a las nuevas generaciones.Marco Castro Silva, gerente general de la inmobiliaria del Club, expresó: “Lo que más valoro es mantener las tradiciones. Siempre hemos estado atentos a resguardar los valores judíos. Para mí es fundamental que estas cosas se traspasen de generación en generación. Mis hijos crecieron vinculados al Mercaz, celebrando sus etapas de vida judía, y este acuerdo me emociona porque asegura que esas experiencias sigan vivas para otras familias”.Una mirada desde la gestión Para la administración del Club, este acuerdo es también una oportunidad para acercar la cultura judía a quienes no forman parte directa de la colonia, pero comparten su espíritu.Pablo Millar Talciani, gerente general del Club Deportivo lo explicó de esta manera: “Cuando me hice socio, hace cinco años, la comunidad me abrió las puertas como si fuera uno más. Hoy, estar involucrado en este acuerdo con el Mercaz me parece extraordinario, porque refleja el deseo del club de mantener raíces y valores judíos. Personalmente, me ha permitido aprender muchísimo sobre el judaísmo, una religión que merece ser conocida y valorada. Este es un beneficio enorme y espero que sea solo el inicio de muchas más iniciativas conjuntas”.Un futuro compartidoEl acuerdo no solo abre puertas para proyectos inmediatos, sino que también proyecta un horizonte de colaboración a largo plazo. Tanto el Mercaz como el Club La Dehesa coincidieron en que este es apenas el primer paso de un proceso que traerá consigo actividades conjuntas, programas culturales, deportivos y sociales que enriquecerán la experiencia de los socios de ambas instituciones.En un Chile donde la vida comunitaria judía se enfrenta a desafíos de integración, pertenencia y continuidad, acciones como esta confirman que el trabajo conjunto es la clave para crecer con solidez.Un mensaje de unidadLos testimonios de los protagonistas de esta firma coincidieron en una idea central: la importancia de mantener vivas las costumbres judías en un contexto de apertura y colaboración.La alianza entre el Círculo Israelita de Santiago y el Club La Dehesa no es solo un acuerdo administrativo. Es un símbolo de lo que significa ser parte de una colectividad: mirar al futuro sin olvidar las raíces, compartir experiencias diversas y, sobre todo, construir juntos.Con la firma del acuerdo, ambas instituciones sellan un compromiso que trasciende lo formal. Una alianza que une deporte, cultura, tradición y comunidad, con la certeza de que, trabajando en conjunto, el camino será más fuerte y más enriquecedor para todos.

El coraje de seguir juntos

A dos años del 7 de octubre, el corazón del pueblo judío sigue latiendo con una mezcla de dolor y esperanza. Dolor por las vidas que se apagaron en aquel día que cambió para siempre la historia reciente de Israel y del pueblo judío. Esperanza, porque incluso en los momentos más oscuros, nuestra identidad se ha forjado en la capacidad de sobreponernos, de reconstruirnos y de seguir caminando unidos.El 7 de octubre fue una herida profunda, una tragedia que atravesó fronteras y generaciones. Pero también fue un espejo en el que vimos reflejada una verdad esencial: la resiliencia es parte de nuestro ADN como pueblo. No hay otro en el mundo que haya sabido transformar tanto sufrimiento en energía para seguir creando, educando, innovando y soñando. Israel se levantó en horas. Las comunidades judías del mundo entero, desde las más grandes hasta las más pequeñas, respondieron con solidaridad, con acción y con amor. Nos unimos, sin distancias ni diferencias, recordando que cuando uno de nosotros sufre, todos sufrimos.Esa unidad es la que nos sostiene. Esa red viva, tejida con la fuerza de la fe y la convicción de que no hay dolor que pueda vencer nuestra neshamá. Cada vela encendida, cada tfilá, cada abrazo, ha sido una manera de decir: seguimos aquí, seguimos juntos.Hoy, mientras el mundo observa con atención los pasos hacia un posible acuerdo que permita el regreso de los rehenes y abra una puerta a la paz, elegimos mirar con esperanza. Sabemos que la paz no se construye de la noche a la mañana, y menos después de tanto dolor. Pero también sabemos que la esperanza es el acto más valiente y vulnerable del ser humano, y que creer en ella es, en sí mismo, una forma de resistencia.Nuestra historia nos enseña que después de cada destrucción, hemos sabido levantar escuelas, sinagogas, kibutzim, comunidades y sueños. Que después de cada noche, el amanecer llega. Por eso, cuando el odio intenta dividirnos, respondemos con unidad. Cuando la desesperanza asoma, respondemos con la fe en el futuro. Y cuando el mundo calla, seguimos hablando en nombre de la vida.A pesar de nuestra historia, el pueblo judío no se define por su dolor, sino por su capacidad de convertirlo en luz. No por su miedo, sino por su decisión de seguir amando, creando y construyendo. En cada generación hemos encontrado razones para creer, y esta no será la excepción.La esperanza no es ingenuidad. Es coraje. Es elegir la vida, una y otra vez.A dos años del 7 de octubre, creemos en algo más grande: en el valor de la vida, en la fuerza de la comunidad, y en la posibilidad, aún viva, de que un día no tan lejano, Israel pueda vivir en paz.

Israel y Hamás alcanzaron un acuerdo en Gaza, los rehenes serán liberados en 72 horas

Negociadores en Egipto alcanzaron un acuerdo para liberar a los rehenes restantes en Gaza y eventualmente poner fin a la Guerra entre Israel y Hamás, anunció el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, temprano el jueves por la mañana.“Estoy muy orgulloso de anunciar que Israel y Hamás han dado luz verde a la primera fase de nuestro Plan de Paz,” escribió Trump. “Esto significa que TODOS los rehenes serán liberados muy pronto, e Israel retirará sus tropas a una línea acordada como los primeros pasos hacia una Paz Fuerte, Duradera y Permanente.” El Primer Ministro Benjamin Netanyahu declaró que llevará el acuerdo al gabinete para su votación el jueves.N12, citando a un alto funcionario estadounidense, declaró que los rehenes serán liberados 72 horas después de que el gabinete apruebe el acuerdo.“Todo el mundo se ha unido en esto, Israel, todos los países se han unido. Ha sido un día fantástico,” dijo Trump a Reuters en una breve entrevista telefónica.“Este es un gran día para el mundo. Este es un día maravilloso, un día maravilloso para todos”, dijo.Trump y Netanyahu se felicitan mutuamente por el acuerdo sobre GazaNetanyahu y Trump hablaron poco después de que el presidente anunciara el acuerdo el jueves.Un comunicado de prensa de la Oficina del Primer Ministro dijo que los dos “mantuvieron una conversación muy emocional y cálida, felicitándose mutuamente por el logro histórico de firmar el acuerdo para la liberación de todos los rehenes”.“El Primer Ministro agradeció al Presidente Trump por todos sus esfuerzos y por su liderazgo global, y el Presidente Trump felicitó al Primer Ministro por su liderazgo decidido y las acciones que lideró”, añadió el comunicado.Los funcionarios israelíes se están preparando para la visita del Presidente Trump el domingo. Según informes, se dirigirá al Knesset.En una entrevista posterior con Fox News, Trump dijo que creía que Irán sería parte del acuerdo de paz en Oriente Medio que medió después de poner fin a la guerra en junio.El presidente dijo que Irán estaba “a un mes, tal vez dos meses de tener un arma nuclear” antes de actuar, afirmando “si hubiera permitido que eso sucediera, este acuerdo no habría sido posible”.Trump dijo que Irán “bendijo el acuerdo” y ha tenido “conversaciones muy buenas” con el país. Le dijo a Netanyahu: “Israel no puede luchar contra el mundo” y señaló que eliminar la capacidad nuclear de Irán era clave para el acuerdo. “Ha unido a todo el mundo. Nunca he visto nada así. Es muy bueno para Israel”, dijo Trump.Rehenes vivos serán liberados en un solo loteEl acuerdo significa que Hamás liberará a los 20 rehenes vivos restantes en las próximas 72 horas. Una fuente de Hamás le dijo a Al-Araby Al-Jadeed que todos serán liberados en un solo lote durante la primera fase del acuerdo.Se espera que el acuerdo se firme en Egipto el jueves por la tarde, según fuentes de la organización terrorista Hamás citadas por el canal libanés al-Mayadeen.Sin embargo, la liberación de los rehenes fallecidos restantes podría retrasarse, ya que Israel duda de que Hamás pueda localizar a todos ellos.La Guerra entre Israel y Hamás comenzó hace más de dos años después de que el grupo terrorista palestino matara a más de 1.200 israelíes y secuestrara a 250 hombres, mujeres y niños hacia la Franja de Gaza el 7 de octubre de 2023.

Viaje al “Cómo entender lo inentendible”

Hay amistades que son como raíces: profundas, invisibles para los demás, pero que sostienen y nutren toda una vida. La nuestra nació en el Gan del Instituto Hebreo, un lugar que no solo nos dio educación formal, sino también un marco de valores, identidad y pertenencia que marcaron para siempre nuestro camino. En esas aulas aprendimos hebreo, celebramos jaguim y conocimos de cerca la historia y el compromiso con Am Israel. Pero lo más importante, y algo que sólo te lo da el Hebreo, forjamos una amistad que se transformó en un lazo inseparable, sólido y ejemplar, que ha resistido el paso del tiempo y sigue siendo un pilar fundamental para nuestras vidas. Esa amistad, se hizo extensiva en Israel, al reencontrarnos con otros 15 ex compañeros de la generación del IH, recordando momentos y anécdotas de nuestra infancia y juventud.Ese mismo espíritu y amistad se potenció en Tzeirei Ami, nuestro movimiento juvenil, donde reforzamos los valores recibidos en el colegio y nuestras respectivas familias, incorporando liderazgo y un profundo sentido de sionismo. Allí entendimos que ser judíos no era solo una identidad cultural, sino un compromiso activo con nuestras raíces y con Israel. Con gran emoción, también pudimos reencontrarnos con Rina y Zeev, Shlijim en Tzeirei Ami hace 40 años, quienes dejaron una huella imborrable en nuestra formación y en nuestro vínculo con Israel y el judaísmo.Por eso, cuando el 7 de octubre nos golpeó tan de cerca, no dudamos en dar un paso al frente. Cinco amigos de la infancia, decidimos emprender juntos un viaje a lo que siempre nos dijeron sería la tierra de leche y miel, pero que hoy también es un lugar de preguntas dolorosas y realidades difíciles de digerir. Durante una intensa semana recorrimos lugares impensados y en ocasiones indeseados. Conversamos con personas de todos los rincones del mosaico israelí. Hombres y mujeres, de izquierda y de derecha, religiosos y seculares, Jayalim en servicio, padres de soldados solitarios (Jayalim bodedim), voceros de la Tzavá (Roni Kaplan), incluso con un amigo que hice en mi juventud en España y que hoy es periodista y corresponsal en medio oriente (Sal Emergui), todo esto en un intento de entender lo inentendible.Junto a Keren Hayesod, tuvimos la oportunidad de visitar Ben Yakir, una aldea que acoge a jóvenes en situación de riesgo social. Allí conocimos de cerca la esperanza que hoy reciben gracias a la reciente donación de la División Femenina de Chile, que permitió la creación de un moderno centro tecnológico destinado a entregarles herramientas y abrirles un futuro mejor, pese a las duras adversidades que les ha tocado enfrentar.Con una emoción aún mayor, también recorrimos el Centro Terapéutico de la aldea, un espacio que guarda un significado muy especial para nosotros: los cinco fuimos parte de su materialización en nuestra juventud, cuando me tocó presidir la división Dor Hemshej de Keren Hayesod. Verlo en funcionamiento, ayudando a tantos jóvenes a sanar y salir adelante, fue profundamente conmovedor. Y al mismo tiempo doloroso, porque producto de la guerra, este centro se ha transformado, lamentablemente, en el espacio más solicitado de toda la aldea.Estremecedor fue visitar el Kibutz Nir Oz, acompañados por Yftaj, hijo de uno de sus fundadores. Con gran emotividad, y a ratos con la voz quebrada y las palabras atascadas en la garganta, nos relató lo macabro y doloroso que fue vivir el 7 de octubre de 2023. Entre cenizas, escombros y silencios que gritaban, escuchamos de primera fuente historias imposibles de asimilar. Historias que mostraban lo más oscuro de la condición humana, tan crueles que cuesta llamarlas humanas. Y entendimos, con rabia y desgarro, que los responsables no eran personas, sino que verdaderos monstruos.El momento más desgarrador fue al detenernos frente a la casa de la familia Bibas. En su fachada aún colgaban fotos de esos niños de sonrisa inocente y mirada enternecedora, abrazados a sus padres. Imágenes que parecían gritar lo que el corazón no alcanza a procesar. Imposible no preguntarse ¿cómo se puede seguir viviendo después de tanto dolor? ¿Cómo aceptar que una familia, con toda una vida y un futuro por delante, como cualquiera de nuestras propias familias, haya visto truncado una vida que apenas comenzaba a escribirse?Mientras recorríamos el kibutz, escuchamos el crujir de las maderas de las primeras casas que comenzaban a ser demolidas. Y entonces, con la voz entrecortada, lágrimas contenidas y pausas que dolían más que las palabras, Yftaj nos explicó la decisión del Kibutz: por más recuerdos y vida que hubiera en esas paredes, después de las atrocidades del 7 de octubre, “No queremos vivir en un Auschwitz”, nos dijo. Y en ese silencio que siguió a sus palabras, sentimos de golpe la magnitud del dolor de un pueblo que, a pesar de todo, sigue luchando por levantarse.También visitamos otros lugares cargados de un peso emocional imposible de describir. Uno de ellos fue el lugar donde ocurrió la masacre del Festival Nova: allí, donde casi 400 jóvenes fueron asesinados y 44 secuestrados, simplemente por bailar y cantar en un festival que paradójicamente celebraba la paz.Caminar por ese espacio fue estremecedor. Cada rincón parecía contar una historia, cada foto y cada nombre eran un recordatorio de sueños interrumpidos. Sentimos en la piel la fragilidad de la vida al imaginar a esos jóvenes, tan llenos de energía, de ganas de vivir, de disfrutar, de construir futuro, siendo víctimas de una tragedia inconcebible.No muy lejos de allí nos encontramos con el llamado “cementerio de autos”. Decenas de vehículos acribillados permanecen como testigos mudos de la barbarie. Allí fueron asesinados cruelmente quienes intentaron escapar de las balas asesinas, buscando desesperadamente salvarse para poder seguir escribiendo sus propias historias. Las balas en las carrocerías, los vidrios quebrados y las huellas de violencia transforman a esos autos en un memorial desgarrador de lo que no debería haber ocurrido jamás.Tuvimos también la oportunidad de visitar el centro de rehabilitación ADI, principalmente destinado a los soldados heridos en la guerra y en el cual también cuenta con el apoyo de Keren Hayesod. Allí, en un ambiente cargado de humanidad y resiliencia, escuchamos testimonios que nos estremecieron profundamente. Cada historia relataba no solo el instante en que fueron heridos, sino también el duro y a la vez esperanzador proceso de rehabilitación que hoy enfrentan. Fueron relatos que nos golpearon el corazón y al mismo tiempo nos mostraron la fuerza y determinación de quienes, pese al dolor, luchan día a día por volver a levantarse.Fuimos parte de la tradicional manifestación cada sábado en el Kikar Hajatufim, acompañando a cientos de miles de israelíes que clamaban, con un grito unánime, por el pronto regreso de los rehenes y por la tan anhelada paz para Israel y el mundo.Allí, entre banderas, cantos y plegarias, escuchamos los testimonios de quienes lograron volver del cautiverio y, sobre todo, la voz quebrada de los familiares de aquellos que ya cumplían 700 días secuestrados. Sus palabras, entre lágrimas y esperanza, se proyectaban sobre grandes pantallas que mostraban los rostros de sus seres queridos: imágenes de hijos, padres, hermanos, con sonrisas congeladas en el tiempo, esperando volver a ser abrazados.Pero junto a este intenso y necesario recorrido, también pudimos reencontrarnos con el Israel que tanto queremos y recordamos: el de las playas llenas de familias, risas y juventud; el de las mesas compartidas en restaurantes y cafeterías repletas de vida, aromas y esperanzas; en esas conversaciones que siempre terminamos con un brindis por la amistad, por un Israel seguro y por la continuidad del pueblo judío.Porque más allá del dolor y la complejidad de lo vivido, este viaje fue también una celebración: de la amistad que perdura y se fortalece con los años, del compromiso inquebrantable con nuestro pueblo y de la certeza de que, incluso en tiempos oscuros, lo que nos sostiene son la unidad y los vínculos verdaderos.Y quizás esa sea la mayor enseñanza que nos llevamos: que no se trata de intentar entender lo inentendible, sino de acompañar, escuchar y abrazar, de estar presentes, hoy más que nunca, con Israel, nuestras instituciones y la comunidad judía, porque así y solo así, más unidos que nunca, podremos dar continuidad a nuestro milenario pueblo judío.Am Israel Jai

Dos años de guerra en múltiples frentes:

Israel en PerspectivaPor aire, mar y tierra. Así irrumpió Hamás la madrugada del 7 de octubre del 2023, hoy conmemorado como el día más mortífero para el pueblo judío desde el Holocausto. Más de 5.000 misiles fueron disparados desde Gaza y casi 4.000 terroristas de Hamás cruzaron la frontera en decenas de ubicaciones simultáneas. A ellos se sumaron miles de civiles gazatíes que ingresaron después, saqueando y destruyendo.En pocas horas, el país quedó sumido en el horror: cerca de 1.200 personas fueron asesinadas, entre ellas familias enteras y jóvenes en un festival de música. Más de 250 hombres, mujeres y niños fueron secuestrados y arrastrados a la Franja.“Actuaremos con toda la fuerza y el compromiso inquebrantable de eliminar esta amenaza para nuestro pueblo. Perseguiremos a todos aquellos que perpetren y apoyen estos actos atroces contra nosotros. Sé que el espíritu israelí vencerá”, aseguró el presidente de Israel, Isaac Herzog, horas después de la masacre. Esa jornada, cargada de desconcierto y brutalidad, marcó el inicio de una guerra que no tardó en expandirse.Hezbolá, el brazo armado más poderoso de Irán en la región, abrió fuego desde el sur del Líbano al día siguiente. Misiles comenzaron a caer sobre comunidades y ciudades en la Galilea, obligando a más de 60.000 residentes a evacuar sus hogares. La seguridad se quebró de golpe. Se movilizaron más de 300.000 reservistas y la sociedad civil también reaccionó: organizaciones de diversas índoles comenzaron a enviar alimentos, ropa y medicinas para desplazados y soldados, además de multiplicarse las redes de voluntariado para hacer frente a la situación de emergencia.La unidad nacional pareció sólida al comienzo, como si todo el país se fundiera en un solo frente de resistencia. Sin embargo, con el paso de los meses resurgieron divisiones que ya estaban presentes antes del ataque, cuando Israel vivía una fuerte crisis política por la reforma judicial.Confrontación regionalAdemás de Hamás en Gaza y Hezbolá en el Líbano, Israel se ha defendido contra otros cinco actores: el regimen hutí en Yemen, que dispara misiles y drones a más de 2.000 kilómetros de distancia; milicias chiitas en Irak y Siria; organizaciones terroristas en Judea y Samaria; y la República Islámica de Irán, que financia a esas organizaciones con el fin de aniquilar al Estado judío.En 2024 y de forma inédita, Teherán decidió atacar directamente y no solo a través de sus proxys. Pero el verdadero salto se produjo en julio de 2025, cuando, con Donald Trump de regreso en la Casa Blanca, ambos países protagonizaron una guerra de doce días.Israel lanzó la operación León Ascendente con ataques selectivos contra científicos vinculados al programa nuclear iraní e instalaciones estratégicas como Isfahán y Natanz. Según explicó el Portavoz de las FDI, Effie Defrín, el objetivo fue “eliminar la amenaza existencial que enfrenta el Estado de Israel, atacando el programa nuclear en todos sus componentes y degradando significativamente su arsenal de misiles”.Teherán respondió con misiles y drones que alcanzaron zonas residenciales y objetivos sensibles, entre ellos el Instituto Weizmann de Rehovot y el Hospital Soroka. Hubo decenas de muertos, la mayoría civiles. Israel amplió su histórica campaña aérea y la escalada sólo se detuvo tras la mediación directa de Trump, que logró imponer un alto al fuego temporal. Más de un año después de la masacre, Israel acumuló avances clave en el plano militar: debilitó a Hamás en Gaza, golpeó severamente a Hezbolá y contuvo en gran parte a las milicias aliadas. Además, medirse directamente con Irán reforzó la percepción de haber resistido la mayor amenaza regional de su historia reciente.La herida abierta: Gaza y los secuestradosEn la Franja de Gaza se concentra el frente más dramático y prolongado del conflicto. Hamás utiliza sistemáticamente a los dos millones de habitantes como escudos humanos y ha convertido túneles, mezquitas, hospitales y escuelas en una red de comando y depósitos de armas que transforman cada operativo en un dilema moral y estratégico para Israel.Hasta hoy, 48 personas siguen secuestradas en manos de los terroristas que comenzaron esta guerra. Se estima que apenas una veintena sigue con vida. Diversos acuerdos parciales y algunas operaciones especiales han permitido liberar a más de 200 cautivos en dos años, siempre bajo enorme presión de las familias, que continúan exigiendo un acuerdo total de liberación de sus seres queridos en una fase.Los informes médicos confirman la magnitud del trauma. Un reporte del Ministerio de Salud israelí presentado a la Cruz Roja reveló “humillación psicológica sistemática, negligencia médica y agresiones sexuales contra rehenes liberados”. La lucha interna entre quienes priorizan un alto el fuego y quienes insisten en mantener la ofensiva militar ha profundizado la fragmentación en la sociedad israelí. En paralelo, la devastación humanitaria en Gaza alimenta la presión internacional.Las imágenes de destrucción multiplican las críticas en organismos internacionales, gobiernos y universidades occidentales, debilitando la narrativa israelí en el exterior. Recientemente, tras una reunión de gabinete, Netanyahu resumió así su postura: “Respecto al daño propagandístico: si tengo que elegir entre la victoria sobre nuestros enemigos y la mala propaganda contra nosotros, prefiero la victoria.”Los objetivos de guerra de Israel siguen claros: desmantelar a Hamás, traer de regreso a todos los secuestrados y asegurar que una autoridad distinta gobierne Gaza. Dos años después, esas metas continúan en disputa.Rendición de cuentas y el futuro del conflictoPero la gran incógnita persiste: ¿Cómo un país en constante estado de alerta, con uno de los ejércitos más sofisticados del mundo, fue tomado por sorpresa? Las investigaciones apuntan a una excesiva confianza en sistemas automatizados de vigilancia y a la ausencia de inteligencia en terreno. Se habían acumulado indicios, entre ellos reportes de la Unidad de Observación de las FDI que habían advertido movimientos inusuales en Gaza, pero esas señales quedaron relegadas. “En los días y horas previos al 7 de octubre, información de inteligencia que debía haber ascendido en la cadena de mando de las FDI no llegó a las personas indicadas”, relata el libro While Israel Slept, de Yaakov Katz y Amir Bohbot. La investigación describe cómo fallas en sistemas de vigilancia, reportes minimizados y una gestión excesivamente cautelosa de las alertas —incluído el uso masivo de tarjetas SIM israelíes por parte de operativos de Hamás— impidieron que se reforzaran posiciones en la frontera. La falta de reacción dejó al país expuesto a la ofensiva. Como consecuencia, el jefe del Estado Mayor, Herzi Halevi, y el comandante del Comando Sur, Yaron Finkelman, presentaron sus renuncias a comienzos de 2025. En paralelo, el ministro de Defensa, Yoav Gallant, fue destituido en noviembre de 2024. Netanyahu, por su parte, ha reconocido que deberá rendir cuentas, aunque insiste en que sólo lo hará una vez que la guerra concluya.Ahora Israel intensifica sus operaciones en la Ciudad de Gaza, el último bastión de Hamás y el enclave más densamente poblado del territorio. La oposición ha criticado abiertamente esa estrategia: Yair Lapid calificó que “sería un desastre para el ejército”, que suma más de 900 soldados fallecidos, y que “provocaría la muerte de los rehenes restantes”.En el frente diplomático, aumentan las voces internacionales que reclaman el establecimiento de un Estado palestino. Israel rechaza de plano esa presión, alegando que ceder sería poner en riesgo la seguridad de sus ciudadanos.Al mismo tiempo, la posibilidad de un acuerdo para llegar al fin de la guerra mediado por Catar sigue sobre la mesa, aunque el reciente ataque contra figuras de la cúpula de Hamás en Doha podría alterar por completo esas dinámicas. Dos años después de la masacre, Israel mantiene su capacidad de resistencia, pero enfrenta una sociedad fracturada, un escenario internacional adverso y un futuro incierto, donde los ecos del 7 de octubre siguen marcando cada decisión política, militar y diplomática.

95 AÑOS JUNTO A LA COMUNIDAD

Este año, La Palabra cumple 95 años de vida. Casi un siglo de presencia ininterrumpida lo convierte en un testigo privilegiado de la historia reciente de Chile, de la comunidad judía y de las transformaciones del mundo. Desde sus primeros números, el semanario asumió una tarea clara: ser un puente de información, reflexión y encuentro.Somos el único semanario judío de Chile, una responsabilidad que asumimos con la seriedad que exige la memoria y con la apertura que demanda el presente. Nuestra línea editorial ha sido siempre transversal: aquí confluyen voces diversas, opiniones distintas y miradas críticas, en un espacio donde lo central no es la uniformidad, sino la conversación y la construcción colectiva. La Palabra Israelita nació como una publicación al servicio de la comunidad, pero con el tiempo ha trascendido esas fronteras. Hoy somos leídos en todo el mundo por judíos y no judíos, por quienes buscan conocer más sobre la vida comunitaria y también por quienes valoran la riqueza de una mirada plural, democrática y profundamente conectada con los desafíos de la sociedad chilena.A lo largo de estos 95 años hemos acompañado a varias generaciones, y nuestro compromiso sigue intacto: mantenernos abiertos, fieles a la verdad y a la diversidad, y seguir siendo una tribuna donde la historia, la identidad y el diálogo se encuentren. La Palabra Israelita es, en definitiva, más que un semanario. Es memoria viva, voz transversal y espacio abierto. Un lugar donde la tradición se une al presente para seguir construyendo futuro

Cuatro Conversaciones del Judaísmo Moderno

Esta serie forma parte del segundo semestre del programa Mercaz Lemida, dirigido por el Rabino Ari Sigal. El Dr. Rodrigo Garrido, Doctor en Teología, exploró encuentros entre pensadores judíos del siglo XX: algunos fueron amigos que rompieron, otros colaboradores hasta la muerte, y algunos que, aunque contemporáneos, no dejaron registro de diálogos directos.Lapide-Panikkar: Tender puentesPinchas Lapide huyó de Austria en 1938 a los quince años. Raimon Panikkar nació entre dos mundos: hindú y catalán. Ambos dedicaron sus vidas al diálogo interreligioso. Lapide insistía en el “silencio reverente” ante lo sagrado. Panikkar respondía que Dios solo aparece en el encuentro directo. Ambos parafraseaban la máxima talmúdica: toda discusión tiene tres caras —la tuya, la mía y la verdadera.Scholem-Arendt: La rupturaAmigos durante décadas, Gershom Scholem y Hannah Arendt, rompieron en 1963 por el libro sobre Eichmann. Ella escribió que el mal era “banal” - Eichmann era un burócrata, no un monstruo. Él la acusó de falta de amor al pueblo judío. Arendt respondió: “No amo pueblos, amo personas. Amar abstracciones es la raíz del mal político.”En 1964 intentaron reconciliarse. Scholem reconoció: “Somos dos marginales. Esa es nuestra conexión real.”Buber-Rosenzweig: La traducción imposibleMartin Buber y Franz Rosenzweig tradujeron la Biblia hebrea preservando su extrañeza. En 1925, Rosenzweig ya estaba paralizado, comunicándose letra por letra. Discutían si la Torá era ley o poesía, práctica o encuentro místico.En sus últimos escritos, Rosenzweig reflexionó sobre la experiencia de ser “extranjero en toda lengua”—una idea central de su filosofía sobre la traducción y el exilio. Murió en 1929, y Buber tardó 35 años más en terminar solo el proyecto.Levinas-Derrida: Ética primeraEmmanuel Levinas, cuya familia fue asesinada en Lituania, enseñaba que el rostro del otro dice “no matarás” antes que cualquier filosofía. Su discípulo Jacques Derrida, expulsado de la escuela en Argelia por ser judío, objetaba que incluso nombrar al “otro” es violencia.Cuando Levinas murió en 1995, Derrida lloró: “Me enseñó que decir ‘aquí estoy’ ante otro ser humano es más fundamental que pensar.”El fuego que no se apagaEstos encuentros revelan las tensiones vitales del judaísmo moderno: ¿Particularidad o universalidad? ¿Ley o experiencia? ¿Memoria o futuro? No son heridas para sanar, sino paradojas que dan vida al pensamiento."Esh Tamid" (Fuego Eterno) no es la llama del Templo, sino el calor del desacuerdo productivo. En tiempos de polarización, estos diálogos enseñan que se puede discrepar sin destruir, que pensar juntos duele, que a veces la reconciliación es parcial.Mercaz Lemida demuestra que estos encuentros siguen resonando porque plantean preguntas que cada generación debe reformular. El judaísmo no es museo, sino laboratorio, donde el fuego eterno arde entre voces que dialogan, discuten y vuelven a dialogar, manteniendo viva la llama de la pregunta en un mundo que prefiere las respuestas definitivas. Nuestros participantes opinanPeppy Rubinstein: “Hacer estas 4 clases se me despertaron muchas inquietudes que tenía en mis 20 años, en que era todo pregunta y las respuestas se me dieron algunas con los años, tus clases perfectas, elaboradas con lenguaje simple y los diálogos entre los distintos filósofos y su pensamiento me encantaron. Agradezco al Mercaz esta oportunidad de crecer desde el alma y por la capacidad de lograr comunicar el “Pensamiento Judío”.Shlomit Cabello: “Para mí fue un espacio de aprendizaje significativo, me dio impulsos para seguir estudiando. Además, las clases tenían un objetivo claro y una secuencia adecuada. Rodrigo explica los conceptos difíciles con un lenguaje claro y didáctico. Excelente uso del tiempo. Sentí que aprendí mucho”.Roberto Berrios: “Fueron sesiones muy fructíferas en las cuales entregaron una reseña y línea de pensamiento de filósofos que ciertamente son muy conocidos a nivel académico. Esta aproximación permite iniciar el conocimiento de Hannah Arendt de una línea muy vigente por toda la problemática y coyuntura mundial, también me permitió conocer más a Martín Buber, también a Emmanuel Levinas. Inició una apertura a conocimiento que permitirá seguir estudiando estos temas y eventualmente seguir profundizando para entender estas líneas filosóficas”.Juan Fco. Riquelme: “Primero, agradecer a Rodrigo Garrido y a Mercaz Lemidá, por el curso del Pensamiento Judío en Diálogo, para mí fue un descubrimiento de otra faceta desconocida de algunos filósofos y en otros casos empezar su conocimiento. Esta no fue una clase de filosofía o historia, fue revivir su pensamiento en diálogos, principalmente en contraposición en temas filosóficos, místicos, históricos, sociales, donde la profundidad, el respeto y la fraternidad entre ellos marcan un apasionante y ejemplificador ejercicio que tanta falta hace hoy en día. Este curso es una puerta que invita a conocer a la persona y su pensamiento, que en mi caso siguen resonado, como Raimon Panikkar, Pinchas Lapide, Hannah Arendt, Gershom Scholem, Emmanuel y Martin Buber”.

“No contribuye en nada a poner fin a la guerra en Gaza”

Contexto del boicot y la contra carta A principios de septiembre de 2025, el movimiento Film Workers for Palestine reunió a alrededor de 4.000 artistas que se comprometieron a no colaborar con festivales, productoras o instituciones culturales israelíes que, en su visión, estén implicadas en “genocidio y apartheid” en Gaza. En respuesta, más de 1.200 artistas, bajo organizaciones como Creative Community for Peace y The Brigade, firmaron una carta en la que rechazan ese boicot. Denuncian que se está confundiendo arte con política, y que la cultura no debería ser un campo para acusaciones generalizadas ni para castigos colectivos. Los argumentos de quienes firmaron la cartaUno de los puntos clave que alegan los firmantes es que el boicot cultural no contribuye significativamente a poner fin a la guerra en Gaza. Según ellos, medidas simbólicas como estas no logran cambios en terreno, no terminan con la violencia ni con la crisis humanitaria. Otro argumento central es que al boicotear based on nacionalidad o por asociación, se corre el riesgo de castigar a personas o instituciones que pueden no estar alineadas con las decisiones del gobierno israelí, pero que trabajan en ámbitos culturales u independientes. Se denuncia también que estas campañas pueden fomentar antisemitismo al tratar de forma colectivizada a artistas por su origen. Firmantes como Mayim Bialik, Debra Messing, Liev Schreiber, y otros, han expresado que esta carta pretende defender el diálogo, preservar la libertad artística y evitar que se silencien voces críticas dentro de Israel. También piden que las acciones culturales no fomenten la división. Críticas al boicot: eficacia y consecuenciasQuienes apoyan la carta anti-boicot señalan que la medida no logra resultados concretos sobre el terreno: no frena los bombardeos, no libera rehenes, no mejora la ayuda humanitaria ni produce presión política efectiva que lleve a negociaciones creíbles para el fin de la guerra. Además, advierten que este tipo de boicots puede generar un efecto contraproducente: polarización, censura implícita, y marginar a artistas que podrían estar buscando construir puentes o denunciar injusticias desde dentro. Se plantea también que el activismo cultural debe enfocarse en lo que une más que en dividir, especialmente en contextos de alta sensibilidad política. Reflexión: ¿cultura como instrumento de cambio?La tensión entre cultura, política y protesta es antigua. En este caso, la carta “anti-boicot” surge como rechazo a lo que muchos ven como un uso superficial de la cultura para presionar, sin estrategias concretas, que alivien el sufrimiento en Gaza. La pregunta que queda es qué formas de activismo cultural son útiles cuando la urgencia de los daños bondadosos es grande. ¿Cuándo sirve más alzar la voz que cortar colaboraciones? ¿En qué medida el arte debe tomar partido o mantenerse independiente?Para los firmantes, la cultura debe ser espacio de conversación y cuestionamiento, no de exclusión generalizada. Su posición es que las medidas de boicot pueden tener una motivación simbólica comprensible, pero no acompañan soluciones reales ni alivian directamente a quienes sufren.ConclusiónLa carta de 1.200 artistas que defiende a Israel del boicot cultural plantea un argumento claro: este tipo de acciones simbólicas no contribuyen de forma tangible a detener la guerra en Gaza ni a mejorar la situación de los civiles afectados. Más allá de la polarización mediática, este debate invita a pensar cómo el arte y la cultura pueden aportar realmente al diálogo, al entendimiento mutuo y a la construcción de paz, en lugar del aislamiento y la confrontación.-- Fuente: VIS A VIS: “La carta que firmaron más de 1.000 artistas para defender a Israel del boicot: ‘No contribuye en nada a poner fin a la guerraen Gaza’” (25 de septiembre de 2025). También artículos relacionados en Tomatazos, Voz.us y Espinof que reportan la carta contra el boicot. 

Arte, memoria y comunidad en homenaje a los caídos en Gaza

Si alguien ha perdido a un hijo o una hija en la guerra, no hay palabras suficientes para llenar ese vacío. Pero a veces el arte puede tender un puente entre el dolor y la memoria. Ese es el espíritu de Héroes Eternos, proyecto que entrega retratos personalizados de cada soldado caído en la Guerra de Gaza a sus familias.En conversación con La Palabra Israelita, Óscar Furman explica que no se trata solo de una obra de arte: “Cada retrato es un homenaje íntimo. Lo que reciben las familias no es un retrato cualquiera, sino un recordatorio de que su hijo o hija sigue presente, de que su sacrificio es reconocido en Israel y en todo el mundo”, señala.El origen del proyecto y su impacto en las familiasLa iniciativa nació en Israel de la mano de Zenón Szyldhaus, pintor chileno que vive en Israel, pero pronto se internacionalizó gracias a voluntarios de distintas comunidades judías. “La idea es simple y a la vez poderosa: cada soldado merece un tributo personal. Cada familia merece sentir que su dolor no pasa desapercibido”, explica Furman.El formato también tiene un sello especial: el tamaño del retrato es de 30 x 40 cm, solo se puede pintar en tonos de grises y el único color aceptado es el de los ojos del soldado, símbolo de vida y conexión. “Los ojos son la ventana al alma, y queremos que cada obra transmita justamente eso”, agrega.Oscar nos cuenta que los artistas reciben una foto del soldado con la que irán creando un retrato que capture su esencia y personalidad. El cuadro final, será entregado personalmente a la familia, acompañado de un mensaje personal del artista.A diferencia de los homenajes masivos, explica Furman, “este proyecto ofrece un tributo íntimo, personal y singular. Cada retrato es una obra de arte única y un símbolo de amor y reconocimiento, que llega directamente al corazón de la familia, como  un gesto de solidaridad y un mensaje de que no están solos en su duelo”.Chile y su aporteEn Chile, el equipo formado por Oscar Furman, Roberto Fleiderman, Edith Vidal y Roberto Gejman se ha lucido. Nuestro país ha tenido un rol destacado en esta cruzada global. Según Furman, en Chile participan 46 artistas, desde profesionales consagrados hasta aficionados que decidieron poner su talento al servicio de la memoria. “Nunca habían trabajado en un proyecto de este tipo y lo viven como una experiencia profundamente transformadora”, comenta. Además, destaca que cada obra es sometida a revisión por un comité artístico para cautelar la calidad de las mismas.Metas y desafíos: un llamado comunitarioEl objetivo inmediato de Héroes Eternos es claro: llegar a Iom Hazicaron 2026 con los 903 retratos terminados. Para ello, se requieren más artistas, voluntarios y fondos para trasladar las obras a Israel. “También queremos organizar exposiciones en cada país donde hay artistas trabajando para que puedan ver estos rostros y entender que detrás de cada nombre hay una historia de vida y de heroísmo. Además, estamos viendo para hacer una exhibición en Santiago para presentar este proyecto a la comunidad y agradecer a los artistas que desinteresadamente han contribuido con este proyecto”, adelanta Furman.El duelo de las familias de los soldados caídos es una herida profunda en el tejido de la nación. A pesar de los honores formales, existe una necesidad constante de gestos personales que reafirmen que el sacrificio del soldado y el dolor de la familia son vistos y valorados por el pueblo judío y por el Estado de Israel."Héroes Eternos" ha creado una oportunidad única para sanar. La entrega de estos retratos a las familias en un momento tan significativo como Iom Hazicarón 2026, puede transformar la conmemoración de una fecha de dolor en una celebración de la memoria y la vida, fortaleciendo el vínculo entre el pueblo de Israel y la Diáspora.La entrevista cierra con una invitación directa: “aquí no se busca protagonismo individual. Es un acto comunitario, un gesto de unión. Cualquiera puede ayudar: pintando, organizando o apoyando con recursos. Lo importante es que cada soldado tenga su homenaje y cada familia sienta nuestro abrazo”, concluye Furman.--Datos clave del proyecto (sept - oct 2025)Total de soldados caídos: 903Retratos ya terminados: 550Retratos en proceso: 353Artistas participantes: 260 en 18 países (46 en Chile)--Balance actualLos países participantes actualmente y la cantidad de artistas en cada uno es la siguiente; Argentina - 51Holanda - 1Australia - 11Inglaterra - 12Bélgica - 2Israel - 13Canadá - 1Italia - 1Chile - 43México - 45Costa Rica - 11Panamá - 2Curazao - 1Sud África - 4España - 1Uruguay - 3Francia - 3USA - 19

Avinu Malkeinu

Por una casualidad, las elecciones en Chile suelen realizarse un poco antes de los Yamim Noraim, fechas en que recitamos el Avinu Malkeinu, un rezo por el perdón, una plegaria por el año entrante. Una curiosidad, que no se les escapó a los sabios, es la combinación de ambas palabras, ambos conceptos, de “padre” y de “rey”. La razón, dicen, es que capta dos dimensiones complementarias de la autoridad: la compasión y el poder. Si trasladamos esta metáfora a la política, “Avinu” representa un Estado benefactor y benevolente, reflejando la política como un espacio donde las instituciones brindan orientación, protección y apoyo a los ciudadanos, a los cuales se les entrega la confianza y el poder de construir sus propios destinos. Avinu se refleja en los sistemas de bienestar, la educación pública, las redes de protección social y todos los mecanismos a través de los cuales el Estado defiende la dignidad y el bienestar de la población.“Malkeinu”, en cambio, encarna el poder político ineludible del Estado, el Leviatán de Hobbes. La democracia liberal fue diseñada para limitar o contrarrestar dicho poder. El Estado, con su dominio (supuestamente) exclusivo sobre la violencia, cuenta con el poder de imponer leyes, impuestos y políticas que condicionan nuestras vidas de manera profunda. Malkeinu, en este contexto, simboliza el lado coercitivo y obligatorio de la política: el elemento que impone cumplimiento, incluso cuando no hay consenso.Son dos extremos, que de alguna forma se ven reflejados en la oferta política que enfrentaremos en la urnas. Pocas veces hemos tenido que elegir entre dos modelos tan diferentes, entre Avinu y Malkeinu. De hecho, desde que asumieron la condición de ciudadanos (que en términos históricos fue bastante recientemente), los judíos, acostumbrados a la combinación tanto de Avinu como Malkeinu, han tendido a favorecer el centro. En Los orígenes del totalitarismo Hannah Arendt explica que esto se debía en parte a que el liberalismo del siglo XVIII les entregó a los judíos, por primera vez en casi dos mil años, derechos civiles, y a la vez los judíos nunca encajaron bien en el sistema de clases del siglo XIX. Como consecuencia, los judíos fueron víctimas de las dos ideologías extremas del siglo XX. El impulso centrista ha perdurado en el tiempo. En 1995 los sociólogos Seymour Martin Lipset y Earl Raab destacaron las características de la comunidad judía norteamericana, notando un profundo compromiso con un centrismo progresista, que se refleja en el firme apoyo que tiene el Partido Demócrata entre los judíos estadounidenses hasta la fecha (alrededor de 70% votaron por Kamala Harris en 2024).La oferta política local nos ofrece una elección entre un modelo que ve al ciudadano como un hijo mimado al que se le debería entregar todo sin considerar costos o eficiencia, y otro que ve al país como un conjunto de “emergencias” que deben ser extinguidos con toda la fuerza del Leviatán. La historia nos enseña que un gobierno eficaz necesita de ambas dimensiones: un Estado que cuide de sus ciudadanos y, al mismo tiempo, posea la autoridad para hacer cumplir las normas y tomar decisiones vinculantes. Poner demasiado énfasis en el primero reduce la política a aspiraciones sin capacidad de ejecución. Pero un exceso de Malkeinu conduce al autoritarismo y la alienación. La vigencia de la metáfora reside en recordarnos que la legitimidad política descansa no solo en la autoridad, sino también en la compasión, y que los mejores gobiernos son aquellos capaces de combinar poder con cuidado, y coerción con empatía.

Capellán judío de La Moneda, en el Te Deum Ecuménico del 18 de septiembre.

Elokei Harujot Lejol. BasarD-os que anidas en el alma de todo ser.Te pedimos una bendición para Chile, nuestra patria querida.Para sus habitantes desde el norte al sur de esta loca geografía.Para los hombres y mujeres laboriosos y creativos que componen esta nación plural, sin dejar a nadie de lado, porque sabiendo que todos sus habitantes cuentan, la patria no estará completa si alguno faltara.Te pedimos una bendición de progreso y desarrollo para sus valles, ríos y montañas, para su mar fecundo y sus islas.Sabiendo que las palabras crean realidades, te rogamos que nos des inteligencia, para proferir palabras que unan y no separen, palabras que integren y no dividan.Que podamos abrazarnos como hermanos que somos, por sobre las lógicas diferencias de pensamientos que nos hacen humanos.Que Tu amor reine sobre todos nosotros y que podamos construir una sociedad en la que quieras habitar.Que todos los hombres y mujeres del mundo prioricen la paz, el diálogo y el entendimiento.Y que todo hijo de Chile se sienta seguro y querido, y no discriminado por su origen o elección de vida, en esta patria, porción de cielo, que Tú nos regalas.Bendice A-donai a Chile, tierra generosa y buena con Tu bendición de amor.Ki Ata Shomea tefila, porque Tú escuchas nuestras oracionesAmén

Sellan alianza para fortalecer la vida comunitaria judía en Chile

El Estadio Israelita Maccabi (EIM) y el Círculo Israelita de Santiago (Mercaz) anunciaron la puesta en marcha de un acuerdo de trabajo conjunto que busca potenciar la vida comunitaria judía en Chile. El acuerdo permitirá a los socios de ambas instituciones acceder a una amplia gama de actividades y beneficios cruzados, integrando lo mejor del ámbito deportivo, social, cultural y religioso.“Estamos muy contentos de poder dar otro paso más entre dos instituciones hermanas como el Estadio y el Mercaz, en beneficio de toda nuestra comunidad. Ojalá esto sea inspiración para que cada vez más instituciones trabajen juntas, porque creemos que ese es el camino que debemos seguir como una gran comunidad”, señaló Ezequiel Klas, presidente del Mercaz.La firma del acuerdo se realizó en el Kadima Center del Mercaz, en un ambiente íntimo y cercano, donde primaron la alegría y un profundo sentido de orgullo.En ese contexto, David Naschelski, director del Mercaz, enfatizó que la alianza es una oportunidad para complementarse: “Somos tan pocos en Chile que, más que nunca, tenemos que hacer cosas juntos, potenciarnos y no competir. Nuestras fortalezas como Mercaz son el culto, mientras que las del Estadio son deportivas, y en esa línea buscamos generar proyectos en conjunto que saquen lo mejor de cada uno”.Naschelski también destacó la apertura y disposición del Estadio: “El trabajo fue muy fluido y agradable. Ahora nos abocaremos a implementar todas las acciones necesarias para que esta alianza funcione bien. Nosotros tenemos una gran cantidad de actividades —cursos, talleres, viajes y sobre todo nuestro fuerte, que es la vida judía y el culto— que ahora abrirán sus puertas a los socios del Estadio. Qué lindo poder hacer cosas así, donde todos sienten que ganan”.Mario Kiblisky, director ejecutivo del Círculo Israelita de Santiago, nos comentó que “ este acuerdo de colaboración nos llena de felicidad porque permite que Instituciones puedan juntarse para trabajar con un solo objetivo común que es potenciar la vida Judía, y así poder brindar mayores beneficios y alternativas a los socios de ambas instituciones.  Iremos implementando actividades en conjunto gradualmente comenzando de inmediato”.Después de la firma de rigor, el presidente del EIM, Alan Guendelman, subrayó la relevancia del acuerdo en el contexto actual: “Somos pocos judíos en Chile y, en un país donde ya no siempre es tan fácil sentirse judío en la calle, necesitamos más que nunca dejar de competir entre nosotros y empezar a trabajar juntos”.Este acuerdo entre el Estadio Israelita Maccabi y el Círculo Israelita de Santiago nace justamente con ese propósito: colaborar al máximo”.El mismo espíritu mostraba Jessica Kanonitsch, directora ejecutiva del EIM: “Cuando nos presentaron la idea saltamos de felicidad, porque la unidad nos hace fuertes. Entre los beneficios concretos, el EIM ofrecerá a los socios del Mercaz talleres deportivos para los niños de Gan Babait, acceso a eventos y a nuestras instalaciones, generando beneficios mutuos. Llegó la hora de unirnos y avanzar de la mano. Esta es una invitación a que todas las comunidades hagamos lo mismo”.Álvaro Rosenblut, vicepresidente del EIM, destacó el liderazgo de David Naschelski en el impulso del proyecto y dijo: “La misión de nuestras instituciones es hacer comunidad, y este acuerdo va en esa línea. Con los actuales niveles de antisemitismo en el país, los espacios comunitarios se convierten en lugares de contención. Mientras más actividades podamos ofrecer, más fortalecemos nuestra misión de liderazgo comunitario”.En la firma del acuerdo también estuvieron presentes los rabinos del Círculo Israelita de Santiago, Gustavo Kelmeszes, Ari Sigal y Lucas Lejderman, quienes felicitaron la iniciativa por lo que significa para la vida judía en nuestro país.Según los firmantes, este es solo el comienzo. Como expresó Alan Guendelman: “Esto allana el camino para que cada miembro de nuestra comunidad se sienta apoyado, que tenga espacios de encuentro y, sobre todo, que pueda vivir una vida plena, orgulloso de ser judío, de actuar y proyectarse como judío junto a su familia, en un entorno donde se sienta seguro, acompañado y feliz”.Con este acuerdo, el EIM y el Mercaz marcan un precedente en el trabajo conjunto institucional, reforzando la unidad y la identidad de la vida judía en Chile.¡Mazal Tov!