publicado hace 20 días

Por qué Israel no puede abandonar a los drusos de Siria

Como nueva inmigrante en Israel, me asaltaba una pregunta incómoda: ¿por qué debemos intervenir en Siria para defender a los drusos? ¿Acaso no tenemos ya suficientes frentes abiertos —Gaza, Líbano, Irán, Yemen, Irak, Judea y Samaria—? Nuestros soldados están exhaustos, y, sin embargo, drusos israelíes piden enviarlos a otra guerra, que no es nuestra.Buscando respuestas, viajé hasta Abu Snan, una aldea drusa en Galilea. Allí me recibió Julia Hazima, periodista y profesora de inglés de 28 años. Desde el primer instante me habló con la calidez de quien visualiza en ti a una hermana perdida. Me presentó a sus padres, y pronto la casa entera se transformó en un ejemplo de hospitalidad. “Quiero que el mundo sepa lo que está pasando”, me dijo la joven antes de empezar nuestra conversación.Un pueblo milenario, siempre perseguidoHoy existen alrededor de un millón y medio de drusos en el mundo; la mitad reside en Siria. Su religión es monoteísta e incorpora elementos del judaísmo, el cristianismo, el islam y la filosofía griega. Creen en la reencarnación y valoran la lealtad entre hermanos por encima de todo. No es posible convertirse al druzismo ni está bien visto asimilarse. La mayoría desconoce los detalles profundos de su propia fe. Al no ser sunitas ni chiitas, y mantener ocultas sus creencias, han sido considerados herejes y por lo mismo perseguidos.La relación entre Israel y los drusos tiene raíces antiguas: los drusos consideran a Jetró, suegro de Moisés, uno de sus profetas fundadores. En tiempos modernos, ese vínculo tomó forma concreta a partir de 1948, cuando líderes drusos e israelíes sellaron un pacto de cooperación que muchos llaman “el pacto de sangre”.En la Guerra de los Seis Días, junio 1967, Israel ocupó los Altos del Golán, territorio que pertenecía a Siria, allí vivían muchos drusos sirios y quedaron bajo control israelí. Por décadas no tuvieron contacto con sus familias, al no poder cruzar las fronteras. La voz de una drusa israelí—¿Cuál es tu percepción de la situación actual en Siria?—Es como un rompecabezas incompleto —responde Julia—. El contacto con nuestros hermanos se cortó. Sueño con poder cruzar la frontera y conocer las tierras donde vivieron mis abuelos.—¿Qué hace especiales a los drusos?—Respetamos al ser humano por lo que es, no por su religión. Somos fieles a nosotros mismos y a los demás. Amamos nuestra tierra. Te doy un ejemplo: en Hurfeish, una aldea drusa de la Alta Galilea, Hezbollah la atacó con dureza, pero nadie quiso abandonar su hogar, aunque sus vidas corrían peligro.—¿Cómo te sientes como drusa en Israel?—Es un privilegio. Estoy orgullosa de ser drusa israelí, aquí soy yo misma. A veces nos llaman “drusos palestinos” y me disgusta. Acá me siento segura, no temo practicar mi religión. Puedo estudiar, desarrollarme y trabajar. En la comunidad drusa hay igualdad entre hombres y mujeres: podemos heredar bienes, entrar en política o en la policía, incluso pedir el divorcio. Si no fuera por los prejuicios de la sociedad árabe chovinista, podría llegar a ser guía espiritual. Agradezco a Israel todo lo que me ha dado.Bajo amenazaLa conversación cambia de tono cuando Julia recuerda la situación en Siria. Me muestra fotos y videos que circulan en secreto por las redes sociales. Me advierte que son fuertes. Tenía razón. Veo imágenes que me transportan al 7 de octubre: aldeas arrasadas, cadáveres, mucha sangre vertida, la misma brutalidad de Hamas.— Bashar al-Assad, aunque dictador, no intentó masacrarlos. Todo cambió con la llegada de Abu Mohammad al-Julani, excombatiente de Al Qaeda e Isis. Se presenta como moderado, con su traje y corbata, pero sus actos lo delatan. Es un extremista y un asesino. Ha impulsado una verdadera limpieza étnica.—Han secuestrado a cien mujeres, quinientos hombres y once niños —continúa Julia con los ojos vidriosos—. A las mujeres las venden como esclavas sexuales por sumas superiores a los 16.000 dólares. Hubo un caso estremecedor: un beduino compró a una drusa solo para devolverla a Suwayda. Aún existen hombres buenos, pero son excepciones. Los beduinos se han unido al régimen, en su intento de aniquilar a los drusos.La humillación también es un arma:—En muchos casos —agrega Julia—, los Sheiks fueron rapados, les cortaron barba y bigote a la fuerza, como señal de burla. Para nosotros eso es un símbolo de dignidad. Fue un acto denigrante.Con voz entrecortada relata lo siguiente:—Violar a una niña de cinco años en un centro de oración y luego decapitarla… ¿qué clase de animal hace algo así? También asesinaron a un joven y exhibieron su cabeza para culpar a los drusos. Una familia reconoció en esa imagen atroz a su propio hijo.Los relatos se suceden: han conquistado más de treinta aldeas, cortaron la luz y el agua, la gente tiene que caminar kilómetros hasta llegar a un hospital que está desprovisto de insumos y medicinas, cadáveres tirados por doquier en las carreteras, es desolador.El pacto de sangreCuando le pregunto por la relación entre drusos e israelíes, su mirada se ilumina.—Durante la Guerra de Independencia, se selló un pacto. Cuentan que en una batalla murieron juntos un soldado israelí y uno druso, y que sus respectivas sangres se mezclaron en la tierra. Ese símbolo representa nuestra lealtad mutua.Desde entonces, los drusos han servido en las Fuerzas de Defensa de Israel y han sido parte activa en la construcción del país. Por eso, dice Julia, la ayuda no es caridad: es una obligación moral.—Si Israel no los ayuda, nadie lo hará.Una petición urgenteLos drusos israelíes pidieron a Netanyahu que interviniera. Las FDI se movilizaron al rescate. También se les envió ayuda humanitaria en helicópteros, y algunos heridos fueron tratados en el hospital de Zfat. “Sin la intervención de las FDI, habrían masacrado a 40.000 drusos”, afirma Julia. Aun así, insiste en que se necesita más: un corredor humanitario desde Galilea hasta Suwayda y más presión internacional.Antes de despedirme, le pregunto cómo imagina el futuro.—Sueño con un reencuentro entre hermanos, con que los drusos sirios recuperen sus derechos. Quiero que sepan que Israel no es un estado de apartheid, que no crean las mentiras que lo demonizan. Y deseo que no tengamos que cruzar de nuevo la frontera con mil drusos israelíes dispuestos a morir defendiendo a nuestros hermanos.Salí de su casa con el corazón apretado. La pregunta inicial que me hice ya tiene respuesta. Israel no está peleando “otra guerra”: está honrando un pacto de sangre, un vínculo sagrado de lealtad compartida y sacrificio mutuo.--Nota del editorLamentamos no poder incluir todas las imágenes compartidas por la autora. Estas fueron obtenidas en condiciones de gran riesgo para quienes las capturan y hacen circular, y constituyen un testimonio gráfico de enorme valor. Sin embargo, por su crudeza, hemos optado por no publicarlas en su totalidad.

publicado 15 Agosto 2025

¿Por qué tradicionalmente el judaísmo prohíbe los tatuajes, y cómo se interpreta esa norma hoy en relación con la identidad corporal y la memoria? Por ejemplo, los sobrevivientes de la Shoá o entierros en cementerios judíos, entre otras.

La Torá enseña en Vaikrá 19:28 que no debemos grabar tatuajes, una norma que, según nuestros sabios (Makot 21a, Rambam, Shulján Aruj), nos separa de costumbres idolátricas y recuerda que el cuerpo es sagrado, creado Betzelem Elohim. Aunque está prohibido tatuarse voluntariamente, la halajá es clara: un tatuaje no te hace menos judío ni impide el entierro en un cementerio judío (Igrot Moshe YD II:61). El mito de la “prohibición de entierro” carece de base y es parte de un mito para desincentivar la práctica del tatuaje. En la Shoá, los números tatuados no fueron pecado, sino heridas forzadas que hoy son símbolos de memoria y resistencia como explica Rav Ovadia Yosef z”l (Yabia Omer YD 3:11). Rabinos contemporáneos como Jonathan Sacks recuerdan que la identidad se “escribe en el corazón” más que en la piel. La halajá mantiene la prohibición, pero responde con respeto, escucha y dignidad hacia toda persona, con o sin tatuajes.

publicado 18 Julio 2025

¿Cómo se puede encontrar el sentido y el propósito en la vida después de una tragedia como el atentado de la AMIA?

Harold Kushner, quien escribió tras la muerte de su hijo, nos desafía a buscar no el “por qué” del sufrimiento, sino el “para qué” de nuestra vida tras él. “No todo tiene una razón que podamos entender, pero todo puede tener un propósito que decidamos asumir”. A veces, la presencia divina se eclipsa —como la hester panim, el ocultamiento del rostro de D-os—pero incluso allí, el ser humano puede elegir ser luz en la oscuridad.En ese sentido, el judaísmo nos llama a la responsabilidad sagrada: no explicar el mal, sino responder al mal con bien. El concepto de Tikun Olam —reparar el mundo— no es una utopía ingenua, sino un llamado concreto. Como enseñó Heschel, “lo que D-os exige de nosotros no es una teología correcta, sino un corazón sensible y manos dispuestas a actuar”.Frente a la violencia, la respuesta judía no es el cinismo ni el nihilismo, sino el compromiso renovado con la vida, con la justicia, con el otro. Quien ha sufrido una tragedia no está obligado a “entenderla”, pero puede decidir transformar su dolor en fuerza moral, su memoria en responsabilidad.Como dice el profeta Isaías (58:10): “Si das tu alma al hambriento y sacias al alma afligida, tu luz nacerá en las tinieblas, y tu oscuridad será como el mediodía.”El judaísmo no ofrece respuestas simples al dolor, pero sí ofrece una presencia que sufre con nosotros, un llamado a la responsabilidad, y una visión de sentido que nace en la acción compasiva. D-os sigue buscando al hombre; nuestra tarea es responder con fidelidad, aún —y sobre todo— en medio del dolor Hineni- aca estoy de cuerpo y alma para asumir la responsabilidad de letaken olam bemaljut shadai.

publicado 04 Julio 2025

El efecto Mamdani

Zohran Mamdani tiene solo 33 años y hace poco era un miembro de la Asamblea Local de Nueva York, pero tras vencer a Andrew Cuomo en las primarias demócratas, está a un paso de convertirse en el próximo alcalde de la ciudad. Ex rapero, nacionalizado estadounidense en 2018, se define políticamente como “progresista y musulmán. Su ascenso ha generado entusiasmo en algunos sectores, pero también preocupación y muchas preguntas. ¿Es Mamdani aire fresco o un retroceso político con riesgos económicos?Asociado a figuras como Bernie Sanders y Alexandria Ocasio-Cortez, el candidato impulsa propuestas como transporte público gratuito, supermercados estatales y congelamiento de arriendos, medidas que sus críticos consideran inviables o fiscalmente irresponsables.Una mirada localMedios estadounidenses, como el Wall Street Journal, New York Post, New York Times y Washington Post, han publicado gran cantidad de editoriales y columnas, que revelan la visión sobre el candidato.En editorial llamada “República Popular de Nueva York”, el Wall Street Journal (WSJ) explica que Mamdani se ha convertido en la cara visible de un nuevo tipo de liderazgo progresista, que representa un giro a la izquierda que viene tomando fuerza entre votantes jóvenes y sectores desencantados con la política tradicional.El medio lo considera el cambio más radical en la política de la ciudad desde los años 70, y advierte que muchas de sus propuestas —como el transporte público gratuito, los supermercados estatales o el congelamiento de arriendos— pueden sonar bien en teoría, pero podrían terminar en una pesadilla financiera para la ciudad.El New York Post, dedica dos editoriales a estos temas. En ellos explica que la propuesta de congelar los arriendos de viviendas es eventualmente plausible, pero muy limitada, pues no es prerrogativa exclusiva del alcalde, sino de un comité.  Lo mismo ocurriría con la propuesta de supermercados estatales que “utilizaría fondos de los contribuyentes que en realidad no existen”.El Washington Post también se sumó a las críticas y fue incluso más duro. En su editorial “Mamdani: una mala noticia para Nueva York y para el Partido Demócrata”, expresa temor por medidas que puedan causar pérdida de empleos, fuga de empresas, desinversión, desabastecimiento y, en el peor de los casos, una crisis fiscal como la que sufrió la ciudad en los años 70.El medio también apunta a su historial con la policía. En una ciudad donde el tema de la seguridad sigue siendo clave, Mamdani ha sido un ferviente defensor de reducir el presupuesto de las fuerzas de seguridad y se opone a aumentar el número de oficiales. Sobre IsraelA diferencia de Eric Adams, Mamdani ha sido un defensor abierto del BDS y ha declarado que Israel no debería ser un Estado exclusivamente judío. Según el New York Times, el candidato ha explicado su respaldo a consignas como “globalizar la Intifada” argumentando que no se trata de un llamado a la violencia, sino de una expresión de lucha por los derechos palestinos. Para justificarlo, dijo que el término “intifada” se usa en traducciones árabes del Museo del Holocausto de Washington para referirse al Levantamiento del Gueto de Varsovia, algo que el propio Museo desmintió y calificó como ofensivo para los sobrevivientes.El editorial “Zohran Mamdani y los judíos” del Wall Street Journal (WSJ) se refiere a este tema de forma crítica: “Incluso la peor masacre de judíos desde el Holocausto fue una ocasión para la propaganda antiisraelí. Comenzó el 8 de octubre con una equivalencia moral perfecta: «Lamento la muerte de cientos de personas en Israel y Palestina en las últimas 36 horas». Después, su declaración giró hacia la crítica a la autodefensa de Israel, y a continuación vino la difamación: «El camino hacia una paz justa y duradera solo puede comenzar poniendo fin a la ocupación y desmantelando el apartheid».De ahí su idea de —en concordancia con la Corte Penal Internacional— arrestar a Benjamín Netanyahu si llega a la Gran Manzana.Ante esto, el WSJ plantea una pregunta de fondo: ¿puede el Partido Demócrata seguir respaldando a un candidato cuyas posturas generan tanta división, incluso dentro de su propia base?Por ahora se debe estar atento a si Cuomo decide seguir en carrera como independiente, lo que pavimentaría el camino para Mamdani en noviembre.

publicado 02 Mayo 2025

Una parashá dedicada a Máximo Nagel Hirsch Z’’L

En Tazria-Metzora, la Torá habla de marcas, pero no para excluir.Dice: “והובא אל אהרן הכהן” — “y será llevado a Aharón el sacerdote” (Vayikrá 13:2).Llevar lo herido al centro, no al margen. Mostrar la mancha, no para ocultarla, sino para comenzar a sanar.Los sabios preguntan: ¿Por qué la Torá trata tan extensamente al Metzora?Y responden: “Porque la palabra puede construir mundos o destruirlos” (Arajín 15b). Lo que se ve en la piel es apenas una sombra de lo que se pronunció, lo que se calló, lo que no se cuidó.Pero hay más. El Metzora es enviado fuera del campamento, no para ser apartado, sino —como dice el Rambam (Hiljot Tumat Tzaraat 16:10) —“para despertar el corazón, para que quien ve su aislamiento, reflexione sobre el camino de retorno”.Y es ahí donde recordamos a Máximo Nagel Hirsch (ז״ל). Un niño que no necesitó retiro para enseñar pureza, ni palabras complejas para iluminar a quienes lo rodeaban. Con su mirada, con su juego, con su risa, Máximo fue lo contrario al Metzora: un sembrador de presencia, un tejedor de vínculos.En días donde los silencios pueden aislar más que la piel herida, su memoria nos devuelve al corazón del mensaje: que toda vida —especialmente una que irradia desde tan temprano— nos llama a hablar con intención, a mirar con profundidad, a abrazar sin demora.Porque al final, como dice el Midrash (Vayikrá Rabá 17:3): “más que la impureza, Dios se preocupa por los corazones que regresan con sinceridad.”יהי זכרו ברוךQue su recuerdo nos purifique, y su luz nos enseñe a volver.

publicado 18 Abril 2025

¿Qué importancia adquiere la palabra “Libertad” en la continguencia actual del pueblo judío?

La palabra “libertad” en la contingencia actual del pueblo judío no es un concepto político, sino una categoría existencial. En la Torá, Dios no se revela primero como Creador, Juez ni Redentor, sino como el que libera: “Yo soy el Eterno tu Dios que te saqué de Egipto, de la casa de esclavitud” (Éxodo 20:2). La primera línea del Decálogo no habla de fe, sino de experiencia: salir del encierro.El Maharal de Praga explica que “la libertad es el estado natural del alma humana” (Guevurot HaShem, cap. 4), y por eso Egipto —Mitzrayim, que también significa estrechez— no solo es un lugar, sino una condición. En este tiempo donde el pueblo judío es presionado a justificar su mera existencia, volver a hablar de libertad es una forma de resistir no con poder, sino con sentido.El Midrash (Shemot Rabá 15:22) dice que en el Mar Rojo, las aguas se abrieron solo cuando un alma, Najshón ben Aminadav, se atrevió a caminar. La libertad comienza cuando uno da el paso antes que el mundo esté listo para entenderlo. No se trata de independencia territorial, sino de la dignidad de caminar hacia lo desconocido sin renunciar a quién uno es.Rabí Yehuda HaLeví decía: “Soy esclavo de Dios, por eso no soy esclavo de ningún amo” (Kuzarí V:20). La libertad judía no es estar sin yugos, sino elegir el yugo correcto: el de la memoria, la ética y la esperanza. En tiempos donde la opinión pública define quién es digno de compasión, la libertad es tener el coraje de narrar desde adentro nuestra propia historia, con todas sus heridas y su profundidad.

publicado 18 Abril 2025

Michelle Piaggio expone en el Círculo Israelita de Santiago

Desde el 7 al 30 de mayo, Michelle Piaggio realizará su exposición “Geometrías en Expansión” en el hall de la sinagoga del Círculo Israelita.Este evento es parte de la programación del ciclo de exposiciones 2025 del Departamento de Extensión Cultural del Mercaz. En esta edición, conversamos con Michelle para conocer su trabajo. - ¿Cómo nació la pasión por el arte y la necesidad de crear?- “Temprano comprendí que el arte no era solo una forma de expresión, sino una herramienta para observar y analizar la realidad. A diferencia de otros lenguajes, el arte me permitió detenerme y observar más allá de la superficie de las cosas. Fue una forma de poder interrumpir lo cotidiano con el fin de reflexionar desde y con la imagen.Con los años, confirmó que todo este mundo de las imágenes se transforma o en un ejercicio constante de pensamiento visual, donde cada decisión formal, conceptual o material estaba cargada de sentidos.Por ello, crear para mí no sólo fue producir objetos, sino enfrentarme a cruces estéticos con las diversas materialidades sobre la tela, como si se tratara de un escenario donde se ensayan nuevas formas de diálogos culturales. Como señala Roberto Farriol “obras que se mueven entre lo sagrado y lo cotidiano, lo racional y lo sensorial, lo moderno y la tradición”.- ¿Cómo definiría su estilo, qué materiales o técnicas ocupa?- “Toda expresión artística es, en esencia, una abstracción. Mi trabajo dialoga con el presente y con un pasado visual que abarca desde las estéticas geométricas del arte moderno, tanto europeo como norteamericano, hasta el arte virreinal, donde el barroco —como estilo y como forma de habitar— tiene una fuerte presencia en la cultura popular.Desde ese cruce, utilizo la geometría —líneas, planos, formas como triángulos y cuadrados— en tensión con huellas del trazo, texturas y tramas textiles que remiten al contexto cotidiano. El uso del color, los brillos y las opacidades propone una lectura sincrética de la estética: una convivencia entre lo heredado y lo contemporáneo.Trabajo sobre bastidores entelados con formas geométricas específicas. Uso acrílico por su plasticidad y brillo, y óleo por su carga histórica y materialidad clásica. En esa mezcla, se articula una identidad visual compleja, abigarrada, y profundamente ligada al tiempo que habitamos”.- ¿Qué te motivó a elegir al Círculo Israelita de Santiago como espacio para exponer tu trabajo artístico?- “Lo que primero me llamó la atención fue que la convocatoria pedía un proyecto, no solo una obra. Eso ya me motivó, porque me gusta pensar y trabajar el arte como una proyección, algo que dialoga con un espacio y su contexto particular. En este caso, se trataba de un lugar que congrega a una comunidad, y que se nombra a sí mismo como “círculo”. Esa idea, la de lo colectivo, lo simbólico, me pareció interesante y al mismo tiempo un desafío.No había reflexionado en profundidad por qué elegirlo, porque en realidad postulé por intuición. Pero en cuanto vi la convocatoria, en pocos días ya estaba armando el proyecto, y decidí presentar una propuesta geométrica que respondiera a ese contexto”.

publicado 11 Abril 2025

Comentario parashá Tzav y Pésaj

La parashá Tzav se centra en los sacrificios y el rol constante de los sacerdotes en el Mishkán. Uno de los aspectos más poderosos es el mandato de mantener el fuego encendido en el altar: “Esh tamid tukad al hamizbeaj, lo tichbé” – “Un fuego perpetuo arderá sobre el altar, no se apagará” (Vayikrá 6:6). Este fuego no es solo físico: representa la llama de la fe, la tradición y la continuidad judía.En Pesaj, esa llama se enciende en cada hogar judío a través del Seder. Pero no se trata solo de recordar la historia, sino de vivirla. “Bejol dor vador jayav adam lirot et atzmó keilu hu yatza miMitzraim” – “En cada generación, cada persona debe verse a sí misma como si hubiese salido de Egipto.” Es un ejercicio de empatía y de responsabilidad histórica. El Seder no es un museo del pasado, es una experiencia viva del presente.Recuerdo un Seder en la casa de mis abuelos en Brasil. La mesa larga, llena de primos, el aroma del guefilte fish mezclado con feijoada, las risas, los cánticos… Y en un momento, mi abuelo me miró, me entregó la copa del kidush para que la elevara, y dijo: “Tu generación es la que va a mantener esto encendido.” Sentí un nudo en la garganta. No entendía todo, pero entendí lo esencial: no somos espectadores de la historia, somos sus transmisores.Hoy, como adultos y educadores, tenemos esa misma tarea: garantizar que el fuego del altar, el fuego del Seder, no se apague. Que nuestras casas sean Mikdash me’at, pequeños santuarios, donde cada niño pueda sentirse parte del relato y heredero de una historia milenaria.

publicado 11 Abril 2025

Tefilá Latina del Negev: La única Tefilá en Israel en donde se lee y se explica la parashá en español

La Tefilá Latina del Negev nació del anhelo de la comunidad hispanohablante en Israel por vivir y compartir el Shabat de una manera significativa, cálida y cercana a sus raíces. En un país donde la diversidad es una riqueza, muchos olim (inmigrantes) latinos buscaban un espacio donde la espiritualidad, la música y la tradición se fusionaran en un ambiente acogedor y familiar.Este proyecto único en Israel fue creado y liderado por Ariel Toro, estudiante de jazanut en el Seminario Rabínico Marshall T. Meyer de Buenos Aires, Argentina. A diferencia de otras tefilot con música, el Kabalat Shabat Musical de la Tefilá Latina del Negev es el único en todo el país donde la Parashá de la Semana se lee y se explica en español, permitiendo una conexión más profunda y significativa para quienes tienen el idioma como lengua materna.Desde sus inicios, esta tefilá ha sido un punto de encuentro para personas de distintas edades y orígenes que comparten el deseo de vivir el Shabat de una forma más cercana y emotiva. A través de melodías inspiradoras, la lectura de la parashá en español y un cálido kidush, este espacio ha logrado unir a la comunidad en un ambiente de alegría y espiritualidad.Con el tiempo, el Kabalat Shabat Musical ha crecido y evolucionado, sumando cada vez más participantes y convirtiéndose en una tradición que ilumina los corazones de quienes asisten. Hoy, contamos con un espacio propio para su realización, gracias al apoyo y patrocinio del Instituto Israelí Chileno de Cultura y el Instituto O’Higginiano de Israel.Nada de esto sería posible sin el esfuerzo y dedicación de un gran equipo de voluntarios y colaboradores, quienes trabajan con un especial compromiso para que cada encuentro sea una experiencia única. Desde la preparación del kidush, la organización del espacio y la logística, hasta el acompañamiento musical y la difusión, cada uno aporta su granito de arena para fortalecer este proyecto. El Kabalat Shabat Musical se realiza el primer viernes de cada mes, y esperamos en un futuro no muy lejano poder transmitirlo online para todas aquellas personas que no pueden asistir en persona. Asimismo, trabajamos con entusiasmo para que pronto podamos llevar a cabo esta hermosa experiencia con mayor periodicidad, permitiendo que más personas se sumen y vivan la espiritualidad del Shabat a través de la música y la comunidad.Con más de 30 ediciones realizadas, la Tefilá Latina del Negev sigue fortaleciéndose, manteniendo viva la esencia del Shabat y demostrando que, a través de la música y la unión, podemos seguir construyendo comunidad y espiritualidad en nuestra tierra.

publicado 11 Abril 2025

David Julius, Premio Nobel de Medicina

David Julius nació el 4 de noviembre de 1955 y creció en Brighton Beach, que entonces era el hogar de una gran población de emigrantes judíos rusos. En un artículo autobiográfico describió las raíces judías de su familia: “Crecí en un vecindario costero de Brooklyn, que fue como una pista de aterrizaje para inmigrantes de Europa del Este como mis abuelos, que huyeron de la Rusia zarista y del antisemitismo en busca de una vida mejor”. Su padre era ingeniero electric, y su madre profesora de una escuela elemental.Julius se licenció en biología en 1977 del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), y en 1984 obtuvo el doctorado en bioquímica en la Universidad de Berkeley. Es profesor de la Universidad de California en San Francisco; él ha utilizado la capsaicina, sustancia química que hace picante el ají, para explorar cómo las terminaciones nerviosas humanas perciben el calor. Julius evidenció, con ayuda de la capsaicina, la existencia de una neurona sensorial, denominada nociceptor, que responde a estímulos físicos o químicos cuya intensidad produce dolor en el ser humano. Por lo tanto, Julius apoya la idea que la nocicepción es una modalidad sensorial específica e individual. Además, Julius identificó al canal TRPV1 como receptor neuronal de estímulos nocivos. David Julius ganó el año 2021 el Premio Nobel de Medicina junto con su colega estadounidense Ardem Patapoutian, por sus descubrimientos sobre los receptores de la temperatura y el tacto. “Los revolucionarios descubrimientos de los ganadores del Nobel  de este año nos han permitido comprender cómo el calor, el frío y la fuerza mecánica pueden iniciar los impulsos nerviosos que nos permiten percibir y adaptarnos al mundo”, declaró el jurado. “En nuestra vida diaria damos por sentadas estas sensaciones, pero ¿cómo se inician los impulsos nerviosos para que se puedan percibir la temperatura y la presión? Esta cuestión ha sido resuelta por los galardonados”. A juicio del jurado “la temperatura, el dolor y la presión forman parte de nuestro sentido del tacto, quizás el menos comprendido de los cinco sentidos humanos. Julius y Patapoutian han desvelado las bases moleculares y neuronales para las sensaciones térmicas y mecánicas”, prosigue el acta. Se trata de una investigación con potenciales implicaciones médicas, porque “arroja luz sobre cómo reducir el dolor crónico y agudo asociado a numerosas enfermedades, traumatismos y sus trata-mientos”. De hecho, varios laboratorios farmacéuticos están desarrollando investigaciones para identificar moléculas que actúen sobre estos receptores con el objetivo de tratar distintas formas del dolor crónico, por ejemplo el asociado a procesos inflamatorios neurógenos o los asociados a la artritis, cáncer o asma.David Julius es miembro de numerosas academias, como la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos y la Academia Nacional de las Artes y las Ciencias. Ha recibido numerosos premios, entre los que destacan el Premio Kerr en investigación básica de la Sociedad Estadounidense del Dolor, el Premio Zülch de investigación neuronal de la Sociedad Max Planck, el Premio Edward Scolnick en Neurociencia del MIT, el Premio Alden Spencer de Neurociencia de la Universidad de Columbia, el Premio Julius Axelrod de la Sociedad de Neurociencia, el Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica, y galardonado con el Premio Fundación BBVA Fronteras del Conocimiento en la categoría de Biología y Biomedicina, junto a Ardem Patapoutian. 

Ralph Steinman, Premio Nobel de Medicina

Ralph Steinman nació el 14 de enero de 1943 en Canadá, hijo de inmigrantes de Europa oriental. Su padre, Irving, y su madre, Nettie, eran dueños de un almacén. Recibió la licenciatura en ciencias en la Universidad McGill de Montreal y su doctorado en medicina en 1968 en la Universidad de Harvard. Completó su formación médica en el Hospital General de Massachusetts. Fue investigador en biología celular de la Universidad Rockefeller. En 1973, acuñó el término “célula dendrítica” durante su postdoctorado en la Universidad Rockefeller. Las células dendríticas, llamadas así por su forma arborizada, median la comunicación entre antígenos dañinos y los linfocitos T linfáticos (glóbulos blancos que activan moléculas para combatir estos antígenos). Steinman demostró que estas células dendríticas son capaces de capturar invasores, como el virus del resfriado común, y enviar señales a linfocitos específicos para que los destruyan.Steinman dedicó el resto de su carrera a investigar cómo estas células especiales podrían utilizarse para combatir el VIH y el cáncer. Sin embargo, los antígenos tumorales liberados por las células cancerosas evaden el sistema inmunitario eliminando o escondiéndose de las células T defensivas. La quimioterapia destruye directamente las células cancerosas, pero también destruye células sanas. Gracias a investigaciones de Steinman, los tratamientos de inmunoterapia contra el cáncer pueden aprovechar la capacidad selectiva del sistema inmunitario natural. Las vacunas de inmunoterapia manipularían las células dendríticas para capturar antígenos tumorales y presentarlos a linfocitos específicos del cáncer, mejorando la capacidad del organismo para encontrar y destruir células cancerosas con mucha mayor precisión que la quimioterapia. Sin embargo, la quimioterapia actúa con relativa rapidez mientras la inmunoterapia fortalece el sistema inmunitario con mucho tiempo. Se estima que alrededor del 10% de los pacientes con cáncer pueden beneficiarse de los tratamientos de inmunoterapia. Sin embargo, se espera que esta cifra aumente a medida que más investigaciones revelen cómo funcionan estos mecanismos.En 2007, cuando Steinman recibió el diagnóstico de cáncer con una esperanza de vida de 6 meses, envió muestras de su tumor a laboratorios de inmunoterapia de todo el mundo. Steinman sabía que quizás era demasiado pronto para este tipo de tratamiento; aun así, depositó su fe en su investigación y se convirtió en su propio paciente. Logró prolongar su vida tres años y medio más de lo previsto y mantuvo una buena salud física durante la mayor parte del tiempo. Finalmente, el cáncer dejó de responder a las vacunas y la enfermedad se extendió por todo su cuerpo. Falleció el 30 de septiembre de 2011, apenas tres días antes de saber que le habían concedido el Premio Nobel de Medicina, siendo el único fallecido galardonado con un premio Nobel, y que se convirtió en paciente de su propia investigación. La Fundación no otorga el Premio a personas fallecidas, pero en el momento del anuncio, la noticia de su fallecimiento aún no había llegado al comité del Nobel, por lo que decidieron que su esposa e hijos podrían aceptar el premio en su nombre.  Steinman recibió numerosos galardones tales como el Premio Albert Lasker, el de la Fundación Internacional Gairdner y el William B. Coley del Instituto para la investigación del cáncer de Estados Unidos; fue elegido miembro del Instituto de Medicina y de la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos. 

"La guerra también se libra en Wikipedia"

La enciclopedia más leída del mundoSi alguna vez alguien buscó la biografía de un personaje, un hecho histórico o detalles sobre un conflicto, lo más probable es que haya recurrido a Wikipedia. La plataforma es gratuita, rápida y está al alcance de todos. Sin embargo, pocas veces nos detenemos a pensar quién escribe lo que allí leemos.Conversamos con el experto en reputación online y miembro del consejo “La Voz del Pueblo”  del presidente Isaac Herzog, David Wiseman, para conocer más de este tema. Para él hoy existen dos guerras paralelas: la que ocurre en Gaza y la que ocurre en el ciberespacio. Al respecto, asegura que “Wikipedia es un campo de batalla tomado por soldados con teclado”.El entrevistado subraya que el problema no es menor:“Lo que se escriba hoy marcará la memoria colectiva del mañana. Incluso los libros de historia y los sistemas de inteligencia artificial se alimentan de Wikipedia”.Cuando cada palabra cuentaWikipedia se rige por reglas, fuentes y un espíritu de colaboración global. Pero, según Wiseman, esas reglas son maleables:“Más allá de las referencias, cada palabra importa. Un término puede suavizar o agravar la percepción de un hecho”.Y trae ejemplos concretos: Masacre en el festival de música Re’im: “Pese a ser el peor ataque terrorista de la historia de Israel, allí los perpetradores aparecen como militantes. En cambio, en el 11-S o los atentados de Londres se habla de terroristas”.Explosión en el hospital al-Ahli: “Al principio se atribuyó a Israel. Cuando se probó que fue un cohete de Hamás, las correcciones llegaron tarde. El daño ya estaba hecho”.Página sobre “genocidio contra los palestinos”: “Creada en octubre de 2023 a partir de un único paper académico. Pese a críticas y solicitudes de borrado, sigue publicada, reforzando narrativas contra Israel”.La conclusión, dice Wiseman, es clara:“Si organismos como la ONU o medios como The New York Times muestran parcialidad, Wikipedia la amplifica”.Medios, narrativas y dobles estándares—Usted señala que la cobertura mediática sobre Israel es distinta a la de otros conflictos. ¿Por qué?“Es muy evidente. Israel concentra muchísimos periodistas, más que zonas donde ocurren conflictos graves en África o Asia. Eso genera una obsesión mediática. Pero la segunda cuestión es si los periodistas realmente buscan la verdad o si quieren ser protagonistas de la historia. Muchas veces, dejan de ser observadores para convertirse en actores”.—¿Qué rol juega Wikipedia en este escenario?“Wikipedia es tanto un síntoma como una causa. Refleja lo que dicen los medios y la ONU, pero también amplifica sesgos. Lo crítico hacia Israel se publica sin trabas; lo que lo defiende o matiza, se rechaza”.—¿Puede dar un ejemplo?“En las páginas sobre crímenes sexuales queda claro. La que se refiere a Hamás minimiza los abusos del 7 de octubre, describiéndolos como reportados o controvertidos (ver aquí). En cambio, la que trata supuestos abusos del ejército israelí es categórica, citando a la ONU o a B’Tselem (ver aquí)”.La conversación deriva hacia un tema más amplio: el antisemitismo.“La tecnología avanza, pero la evolución ética no. Hace siglos se usaba el libelo de sangre o la acusación deicida para perseguir judíos. Hoy, aunque tengamos internet y redes sociales, esos prejuicios resurgen disfrazados en narrativas conspirativas y virales”.Las plataformas de inteligencia artificial tampoco escapan:“La IA refuerza y repite el sesgo. Si Wikipedia está contaminada, ChatGPT y otros sistemas lo replican. Es una tercera capa de desinformación que multiplica el problema”.¿Qué hacer?Ante la magnitud de la situación, Wiseman es categórico:“La única salida es que la Fundación Wikipedia reconozca que la situación está fuera de control. Fue pensada para construir conocimiento en colaboración, pero hoy está tomada por soldados digitales con agendas políticas. Si no se restablece la credibilidad, terminará siendo irrelevante”.La advertencia no es menor. Todos recurrimos a Wikipedia porque es rápida y confiable en apariencia. Pero justamente por eso, sus sesgos son más peligrosos. Lo que se publique allí no solo afecta a lectores casuales: moldea currículos escolares, artículos académicos, cobertura mediática y hasta el entrenamiento de inteligencias artificiales.Wiseman cierra con una reflexión poderosa:“La información también es un arma. En el caso de Israel, se usa para normalizar prejuicios, suavizar a terroristas y amplificar acusaciones infundadas. Por eso debemos leer, pero también cuestionar”.Esta entrevista nos recuerda que la lucha por la verdad no se libra únicamente en campos de batalla, sino también en la esfera digital. Wikipedia, la enciclopedia más consultada del planeta, puede convertirse en un espacio de construcción de conocimiento o en un amplificador de prejuicios. En tiempos de guerra, cada edición, cada palabra y cada omisión se convierten en parte de un frente más amplio: el de la memoria y la narrativa global.Un mensaje finalTenemos un desafío claro: verificar cualquier información antes de difundir, compartir solo fuentes confiables y educar sin polemizar. Así podemos contribuir a que la información sea más precisa, y no caiga en distorsiones ni manipulaciones.---¿Qué es la iniciativa «La Voz del Pueblo»?Es una iniciativa del presidente israelí Isaac Herzog para reunir a diversos líderes judíos de todo el mundo. Funciona como un consejo mundial que aborda los desafíos y las oportunidades de la comunidad judía global.Su objetivo es fomentar un diálogo sobre los desafíos y las oportunidades que enfrenta el pueblo judío y transformar este diálogo en estrategias viables. El consejo está compuesto por 150 miembros judíos seleccionados de todo el mundo.  

Equipo femenino del Hebreo rumbo al Sudamericano en Paraguay

El deporte escolar chileno tiene un nuevo motivo de orgullo, y la comunidad judía también. El equipo de handball femenino, categoría infantil del Instituto Hebreo se coronó campeón del Torneo Nacional Escolar, el campeonato más importante del país en esta categoría, logrando el derecho de representar a Chile en el Sudamericano Escolar de Asunción, Paraguay, a fines de noviembre.Para el entrenador Técnico Felipe Maurín, este triunfo tiene un valor que trasciende lo deportivo: “La experiencia es inolvidable para nosotros si lo vemos en el marco educativo y todo lo que esto conlleva a nivel escolar. No se trata solo de ganar, sino de formar personas a través de la disciplina y el compromiso”.El camino no fue sencillo. El equipo había quedado con un sabor amargo el año pasado, cuando perdió la final. Esa derrota, sin embargo, se transformó en motor: “Nos propusimos este año ganarlo. Fue un trabajo sistemático, comprometido, bien duro, con mucha exigencia, planificación, partidos y entrenamientos. Este es el resultado de un proceso de dos años”, subrayó Maurín.El logro no solo pertenece a las jugadoras, sino a todo un cuerpo técnico y una institución que creyó en el proyecto. “Estamos muy orgullosos del apoyo de todos los profesores, del equipo directivo de nuestro departamento y felices de poder darle esta alegría al Instituto Hebreo y a toda la comunidad”, añadió el entrenador.El compromiso y la entrega de las chicas fue clave: “Durante estos dos años se comprometieron a trabajar consistentemente para lograr el objetivo final, que era salir campeonas. La disciplina y la constancia fueron fundamentales”, destacó Maurín.En la ceremonia de premiación, además del título colectivo, llegó un reconocimiento que llenó de orgullo al colegio: Laila Klas recibió un doble galardón, como mejor central y mejor jugadora del torneo. Un logro que refuerza la calidad individual y el espíritu de equipo que caracteriza a esta generación.Con la mira puesta en el Sudamericano, el desafío ahora se redobla: “Este título nos da derecho a representar a Chile, y vamos con la responsabilidad y la ilusión de dejar en alto no solo al Instituto Hebreo, sino al país entero”, concluyó Maurín.Un tremendo aplauso comunitario a este equipazo y a sus profesores y entrenadores Felipe Maurín, Ayudante Técnico Rodrigo Bown y Delegado Tamara Kovacic, quienes con esfuerzo y dedicación llevaron al Hebreo a este gran logro.El Instituto Hebreo ya tiene una marca en la historia del handball escolar chileno. Y con esfuerzo, trabajo en equipo y pasión, estas jóvenes campeonas están listas para enfrentar el desafío continental.Colegio Instituto Hebreo, que representa a toda la región Metropolitana: Laila Klas, Maia Silva, Ariela Bonder, Carolina Brenner, Noa Benzaquen, Lia Ventura, Sofia Arancibia, Florencia Bronstein, Sara Mayerson, Fernanda Risnik, Josefa Hung y Laura Bernal.

La palabra Tikvá representa para el judaísmo no solamente esperanza, sino recorrido histórico.

La palabra Tikvá representa para el judaísmo no solamente esperanza, sino recorrido histórico. ¿A qué me refiero? Estamos empezando las altas fiestas y entonces miramos alrededor y miramos dentro de nosotros. Cuando miramos alrededor, encontramos un mundo lleno de interrogantes.Desde lo económico, grandes cambios en las normas del comercio internacional. Desde lo político, siguen las guerras en Ucrania y tristemente no termina todavía la guerra en Israel. Desde lo social, vemos como la inteligencia artificial nos abre caminos increíbles, impensados, pero también grandes interrogantes acerca de las posibilidades de conseguir trabajos en el futuro. Y en nuestro país, una incógnita gigante acerca de lo que sucederá en estos próximos días con las elecciones. Por eso la palabra Tikvá aparece con mayúscula en estos días del comienzo del año judío.Tikvá representa no solo la esperanza del futuro, sino Tikvá nos referencia también a nuestro legado histórico. Porque fue esa Tikvá, esa esperanza, la que mantuvo al pueblo de Israel en todas las vicisitudes y en todas las ocasiones difíciles que tuvimos que atravesar. Y fue esa esperanza la que a través de una canción se transformó en el himno del Estado de Israel.Cuando miramos hacia atrás, vemos un camino recorrido, difícil, pero exitoso porque llegamos hasta el día de hoy. Y podemos imaginar un futuro que no sabemos si será fácil, pero que Tikvá, que la Tikvá abrirá las aguas y nos permitirá pasar por un lugar seco hasta la otra orilla. Si pensamos en el año que hemos pasado, con sus dificultades, decimos con el poeta: “תכלה שנה וקללותיה תחל שנה וברכותיה ” que se termine un año con sus dificultades y con sus maldiciones y que comience un año con las bendiciones.Ese es mi deseo de corazón para esta linda familia que es nuestra comunidad. Y para Chile, y para el Estado de Israel, y para todo el mundo.Rab Eduardo Waingortin

¿Acuerdo de paz para Gaza?

El 7 de septiembre de 2025, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, informó que se estaba negociando un acuerdo para el alto al fuego y la liberación de rehenes en la Franja de Gaza. Según Trump, Israel había aceptado la propuesta, pero no así el movimiento Hamás, el que buscaría un acuerdo integral que contemple el cese al fuego, la entrada de ayuda humanitaria, la retirada israelí y una administración local independiente. Dos días después, el ministro de Exteriores israelí, Gideon Saar, confirmó que Israel había aceptado esta propuesta de paz, bajo dos condiciones: que el movimiento terrorista libere a todos los rehenes (se estima que son 48, vivos y muertos) durante el primer día del alto al fuego, y que este deponga las armas. También se contemplaba la liberación de presos palestinos y el comienzo de negociaciones de paz para el término de la guerra con la supervisión del propio presidente Trump.La propuesta estadounidense tiene lugar en un contexto de agudización de la guerra en Gaza, con una creciente oposición interna israelí, intensificada por las manifestaciones de los familiares de los rehenes convocando a protestas nacionales. En este sentido, el nuevo plan estadounidense surge en un marco de intensificación del conflicto, por lo cual esta propuesta pareciera ser un intento de Washington por mitigar la crisis o bien influir para una solución definitiva al conflicto.Hay que señalar que el presidente estadounidense ha anunciado previamente otros planes de paz para Gaza. Tras asumir su segunda presidencia, en enero de 2025, señaló su intención de terminar con la guerra en Gaza, proponiendo enviar a la mayor parte de la población de la franja a Egipto y Jordania, con la finalidad de crear un corredor de seguridad controlado por Estados Unidos. Con posterioridad, en julio del mismo año, con motivo de un encuentro entre Trump y el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, el presidente anunció que Israel y Hamás estaban negociando en Qatar una propuesta elaborada por Washington para una tregua en los bombardeos israelíes en Gaza y la liberación de los rehenes que permanecen en manos del grupo islamista palestino. Es importante mencionar que Qatar, un actor clave en la diplomacia de Medio Oriente, ha desempeñado un papel fundamental como mediador en este conflicto, manteniendo líneas de comunicación con ambas partes, lo que le ha permitido facilitar un diálogo que, de otro modo, sería imposible. La elección de Qatar como sede para estas negociaciones obedece a sus buenas relaciones con las potencias occidentales, especialmente con Estados Unidos, así como con grupos como Hamás. Ahora bien, todavía resulta difícil saber si el reciente ataque de Israel en contra de la oficina de Hamás en Qatar, ocurrido el 9 de septiembre, afectará o no el papel mediador de Doha y en qué medida podría influir en el logro de un acuerdo de paz para Gaza, que garantice la seguridad de Israel y la liberación de los rehenes israelíes, a casi dos años de su cautiverio. 

¿Por qué necesitamos el judaísmo en la era de la IA?

Acabo de regresar de la Convención sobre Humanidad y Tecnología en San Francisco. Miles de científicos e innovadores de vanguardia se reunieron para explorar la convergencia de la humanidad con los últimos avances tecnológicos. Ahora puedo confirmar lo que la mayoría de nosotros ya presiente: nuestro mundo pronto será radicalmente diferente. Y no en décadas, sino en años. La Inteligencia Artificial ha redefinido el desafío del progreso. A diferencia de revoluciones pasadas—como la del vapor, la electricidad y el internet—la IA no solo desafía nuestros empleos o habilidades. Penetra más profundamente. Desafía nuestra identidad. Imita nuestras voces, reproduce nuestra creatividad y traspasa nuestra capacidad de tomar decisiones. Ya no solo nos sirve, sino que empieza a reemplazarnos. Los humanos ya no son necesarios por su capacidad de pensar, sentir o juzgar. La IA escribe nuestras canciones, pinta nuestros cuadros, narra nuestras historias y diagnostica nuestras enfermedades. Lo que antes requería la lenta alquimia de la imaginación humana, ahora toma apenas unos segundos de procesamiento de máquina. Creíamos que la creatividad y el ingenio eran un bastión impenetrable del espíritu humano. Pero la IA ha encontrado la forma de entrar.  Recuerdo vívidamente cuando el maestro de ajedrez Garry Kasparov perdió ante Deep Blue de IBM en 1997. Nos encogimos de hombros. Era solo una máquina astuta calculando más rápido que un humano. Deep Blue costó 100 millones de dólares, pesaba 1.5 toneladas y llenaba dos gabinetes del tamaño de refrigeradores. Podía derrotar a un gran maestro en ajedrez, pero no podía reconocer una sonrisa ni cantar una canción de cuna. Hoy, tu teléfono inteligente es millones de veces más potente que Deep Blue. Identifica tu rostro y comprime tu vida en un dispositivo que llevas en el bolsillo. Y eso es solo el principio. Los implantes neuronales, los miembros biónicos, la conciencia sintética y los robots que simulan emociones ya están en desarrollo. La línea entre el código y la conciencia se está difuminando más rápido de lo que podemos comprender. Sin embargo, una contrarrevolución está en marcha. En este nuevo entorno, las emociones se convertirán en un lujo. La autenticidad será un bien escaso. La gente anhelará lugares donde el sentimiento sea sagrado y donde ser visto y valorado no pueda reducirse a una fórmula. A medida que la Inteligencia Artificial se expanda, también lo hará el deseo de otra IA: la Intimidad Auténtica. Estamos entrando en una era en la que las personas buscarán santuarios de significado; espacios donde lo sagrado supere la eficiencia, donde el alma prevalezca sobre los datos y la dignidad triunfe sobre la clonación digital. La pregunta “¿Qué significa haber sido creado a imagen y semejanza de Dios?”, volverá, con renovada urgencia, al centro de nuestra conversación colectiva. Creo que esto significa que estamos entrando en tiempos de extraordinaria oportunidad para las instituciones religiosas. El judaísmo, si decide estar a la altura de las circunstancias, tiene profundos regalos que ofrecer. Nuestra tradición enseña que el ser humano no es simplemente una máquina pensante (Homo sapiens) o un trabajador productivo (Homo faber). Somos tzelem Elokim, creados a imagen y semejanza de D-s. Esa identidad no puede ser subcontratada ni replicada. Es espiritual. Es sagrada. Es nuestra.  Sin embargo, me preocupa. A medida que el antisemitismo aumenta y las presiones políticas se intensifican, nuestro enfoque comunitario se ha reducido a la supervivencia. Es comprensible. Debemos protegernos. Sin embargo, también debemos recordar que estamos entrando en una era en la que el valor mismo del ser humano está en juego.  Si el judaísmo se reduce a la política y la preservación, perderá su llamado profético. Debemos declarar: El Shabat no es solo un ritual, sino una afirmación de la dignidad humana. En un mundo que nunca deja de producir, responder y actualizarse, el Shabat es una resistencia sagrada. Reclama nuestro tiempo de la tiranía del algoritmo. Nos recuerda: no eres una máquina. No eres un producto. No te define tu rendimiento. Eres un alma. Un día a la semana, nos bajamos de la cinta de producción y redescubrimos nuestra humanidad, no retirándonos del mundo, sino santificándolo. La oración es una práctica de vulnerabilidad.Pronunciamos palabras que no están optimizadas para generar un impacto, sino que se ofrecen desde el corazón. Hacemos una pausa. Reflexionamos. Pedimos. En una cultura obsesionada con la confianza y el control, la oración es el acto radical de decir: “Necesito. Siento. Me pregunto”. La Torá nos recuerda que el significado no se encuentra en la velocidad o la escala, sino en la relación. Lo Divino se revela no a través de datos, sino a través de la presencia. A través del diálogo. A través de historias. A través de momentos de temblor, perdón y asombro.  Estas prácticas —Shabat, oración, aprendizaje— nos entrenan para ser humanos en un tiempo que olvida lo que eso significa. La lA seguirá avanzando. Esto es una bendición. Puede ayudarnos a resolver problemas complejos, mejorar la salud, extender la capacidad humana y liberar tiempo. Pero a medida que las máquinas se vuelven más poderosas, se vuelve cada vez más urgente proteger lo que no se puede programar: el asombro, la compasión, el amor, la maravilla, el perdón, la comunidad y la santidad. En un mundo de inteligencia artificial, que el judaísmo sea un manantial de sabiduría auténtica. En una cultura que se inclina hacia la perfección de la máquina, volvamos a la poesía de la imperfección y a la santidad de la presencia.Regresé de San Francisco con optimismo. Me encontré con algunos de los científicos más influyentes del mundo, muchos de los cuales estaban profundamente preocupados por las implicaciones humanas de su trabajo. Sin embargo, me sentí solo. Hasta donde pude ver, fui el único líder religioso presente. Conocí a muchos judíos, mentes brillantes en ciencia, emprendimiento e inversión. Pero la mayoría de ellos, cuando les pregunté sobre su vida espiritual, respondieron: “Soy budista”. El mundo busca la profundidad espiritual. El judaísmo la tiene. Pero solo si nos atrevemos a dar un paso al frente. Es hora de encarnar el judaísmo ante los mayores desafíos de la humanidad. No solo para sobrevivir, sino para liderar.

Barry Barish, Premio Nobel de Física

Barry Barish nació el 27 de enero de 1936, en Omaha, Nebraska, Estados Unidos. Hijo de Lee y Harold Barish, inmigrantes judíos de Polonia. Sus abuelos eran de la región de Europa del Este de una pequeña aldea cerca de Kiev. Llegaron a Omaha a inicios del siglo XX, donde había una pequeña comunidad judía. Luego su familia se trasladó a Los Ángeles por cuestiones laborales, donde había una comunidad judía más grande. No se considera religiosamente judío, pero su esposa y amigos son judíos. No tuvo una educación judía religiosa porque su familia era muy pobre, por lo que no pudo ir a una escuela hebrea. De niño le gustaba leer. Su padre no fue a la escuela y su madre venía de una familia donde su padre no les permitía a sus hijas ir a la escuela. Aunque sus padres no fueron educados, tenían un gran valor por la educación.Barish asistió a la John Marshall High School entre otras escuelas. Obtuvo un BA en Física en 1957 y se licenció en física experimental de altas energías en 1962 en la Universidad de California. Ingresó al Instituto de Tecnología de California (Caltech) en 1963 para experimentar en física de partículas utilizando aceleradores. Entre 1963 y 1966, fue investigador, y entre 1966 y 1991, profesor adjunto, profesor asociado y profesor de física. De 1984 a 1996 fue el investigador principal del Caltech High Energy Physics Group. De 1991 a 2005, fue catedrático de Física. Algún tiempo trabajó en la Universidad de Cornell donde probó un principio de física nuclear llamado “resonancia magnética nuclear”, del que igualmente nadie sabía cuál sería su uso. Pero hoy día se trata del dispositivo de escaneo más importante en medicina.En 1950, Einstein desarrolló una nueva teoría de la gravedad después de 200 años de la teoría de Newton, en la que predice que así como la electricidad y la luz se manifiesta en ondas, la gravedad también lo hace, pero pensó que no podrían ser detectadas porque son muy pequeñas. No pudo tener la visión de lo que se podría hacer en la actualidad con láseres modernos y óptica, dispositivos más sensibles de los que pudo llegar a imaginarse. Gracias a la detección de ondas gravitacionales anticipadas por Einstein, que venían de la fusión de dos agujeros negros que ocurrió hace 1.3 mil millones de años, pero tan lejos que le tomó todo ese tiempo hasta llegar hasta el punto en que captaron su señal, logro con el que Barish obtuvo el Premio Nobel de Física 2017. Este descubrimiento está considerado como uno de los logros científicos más importantes al validar uno de los pilares de la física moderna, la teoría general de la relatividad y abrir una nueva ventana para observar el Universo. Es miembro de la Sociedad de Física, de la Academia de las Artes y Ciencias, y de la Academia Nacional de Ciencias de los Estados Unidos, de la Academia de Ciencias de Rusia y de la Royal Society. Ha obtenido las siguientes distinciones: Premio Enrico Fermi, Giuseppe and Vanna Cocconi Prize, Medalla Henry Draper, Premio Nobel de Física, Premio Princesa de Asturias de Investigación Científica y Técnica, y la Medalla Nacional de Ciencia de los Estados Unidos. Está casado con Samoan Barish y tienen dos hijos.

Comunidad Judía elevó plegaria por el país

En un ambiente de recogimiento y solemnidad, la Comunidad Judía de Chile (CJCh) realizó ayer, 2 de septiembre, la tradicional Tefilá por Chile, en la sinagoga de Viña del Mar. La ceremonia, equivalente al Tedeum católico, reunió a unas 300 personas, entre ellas parlamentarios, embajadores y representantes del gobierno, en vísperas de las Fiestas Patrias.El acto estuvo encabezado por la Ministra Secretaria General de la Presidencia, Macarena Lobos, el Canciller Alberto Van Klaveren y el presidente de la CJCh, Alfredo Misraji, junto a rabinos y líderes comunitarios.Durante la ceremonia, la ministra Lobos destacó la relevancia del encuentro: “Chile es una gran familia donde conviven personas de diferentes credos, creencias, etnias y procedencias. Esa diversidad nos obliga a respetar la dignidad de todos y todas, y a rechazar toda forma de odiosidad, discriminación e intolerancia”. En esa línea, condenó la reciente vandalización de la sinagoga Bicur Joilim, señalando que “esto merece el repudio de todas y todos”.Por su parte, el presidente de la Comunidad Judía, Alfredo Misraji, puso énfasis en los desafíos actuales: “No podemos olvidar que Chile aparece hoy como el país con los índices más altos de antisemitismo en Latinoamérica. Luchar contra el odio es una tarea colectiva, porque cuando se normaliza contra cualquier minoría, se termina expandiendo hacia todos”. Al mismo tiempo, subrayó el profundo arraigo de la comunidad en el país: “Somos chilenos, orgullosos de nuestra patria, agradecidos de esta tierra que acogió a nuestros abuelos y bisabuelos”.En tanto, el canciller Van Klaveren señaló que el mensaje de la Tefilá es “de paz, de tolerancia, de convivencia entre las diferentes comunidades y credos que aportan a la diversidad de nuestro país”. Asimismo recalcó que “la comunidad judía ha hecho un aporte histórico muy importante y, obviamente, representa un factor relevante en la sociedad chilena. Y creemos que esta actividad tradicional, que se realiza todos los años, tiene un valor especial”. Además, valoró que la actividad se realizara en Viña del Mar como un gesto de descentralización y reconocimiento a las regiones.Los rabinos de Chile elevaron plegarias por la paz, la solidaridad, el diálogo y el bienestar de nuestra nación. Asimismo, se pidió por la liberación de los civiles israelíes secuestrados por Hamás en octubre de 2023. El encuentro finalizó con una oración interreligiosa que simbolizó la esperanza de un Chile unido, respetuoso de su diversidad y fortalecido en sus tradiciones.---Un compromiso que trasciende generacionesLa Tefilá por Chile no solo es un acto religioso: es también una expresión de amor y gratitud hacia la tierra que recibió a la comunidad judía hace más de un siglo. En un país diverso y desafiante, la oración se transforma en un recordatorio de que el respeto, la unidad y la defensa de la dignidad humana son pilares irrenunciables para construir el futuro.La comunidad judía de Chile reafirma así su compromiso con la nación: aportar desde la educación, la cultura y el diálogo, siempre desde la convicción de que Chile es más fuerte cuando todas sus tradiciones y todas sus voces conviven en armonía.

La Inspiradora Visita de Mía Schem a Chile

Mia fue secuestrada ese fatídico 7 de octubre, cuando Hamás irrumpió con una violencia nunca antes vista en el sur de Israel. Además de ser una de las víctimas, fue la protagonista del primer video difundido por Hamás para mostrar a un secuestrado. En él, se la veía herida en un brazo, hablando frente a la cámara en condiciones complejas. Su imagen recorrió el mundo y se convirtió en símbolo del drama de los rehenes. En paralelo, su mamá, se transformó en una vocera incansable, recorriendo el mundo para exigir su liberación. El reencuentro fue finalmente posible en noviembre, tras un acuerdo parcial. Ahora, juntas, decidieron compartir su historia en Chile, país que no les es ajeno por su historia familiar.El encargado de abrir la conversación fue Roberto Avram, sheliaj de Keren Hayesod, quien recordó esa raíz chilena que conecta de manera íntima a la familia con la comunidad. Luego cedió la palabra a Ariela Agosín, ex presidenta de la Comunidad Judía de Chile, quien condujo con delicadeza una entrevista que osciló entre lágrimas, silencios y sonrisas fugaces.“Sabía que mi mamá me estaba  buscando”La voz de Mia era suave, pero cada palabra parecía tallada en piedra. Recordó cómo los primeros días en los túneles le parecieron interminables. La oscuridad, la incertidumbre, el no saber si alguna vez volvería a salir. “El cuerpo duele, pero lo que más hiere es no saber si el mundo te recuerda”, confesó.Contó que a veces cerraba los ojos y trataba de imaginar a su madre. “Me repetía que ella estaba afuera, que no iba a dejar de buscarme. Esa idea fue lo que me mantuvo viva”. La sala entera la escuchaba con un nudo en la garganta.La decisión que todo lo cambióMia recordó cómo, de manera espontánea, decidió asistir al festival junto a su mejor amigo, Elia Toledano Z”L. “A las 6:29 grabé mi último video con Elia y le dije: ‘vámonos a casa’. Él iba conmigo en el auto cuando comenzaron los disparos. Sentí que mi mano volaba, como si estuviera desconectada de mi cuerpo. Arrancamos por lados distintos… y nunca más lo volví a ver”, contó con dolor.Tras ser capturada, fue trasladada a Gaza en un vehículo rodeada por siete hombres armados. “En el camino solo vi cadáveres y autos quemados. Cuando llegamos, me dijeron: ‘bienvenida a Gaza’. No abrí los ojos, no quería mirar. Me sacaron de mi país, de mi casa…me hizo pensar en las historias que escuché de la Shoá. Me trataron así solo porque soy judía. No había humanidad, cero humanidad…”. Soportó encierro, ausencia de medicinas e incluso una cirugía improvisada sin anestesia. Estuvo vigilada las 24 horas y fue obligada a participar en un video de propaganda. “El lugar era como una jaula, lo sentía así. Creía que era la única secuestrada, pero luego supe que había muchos más”, contó.La lucha incansable de una madre Keren, a su lado, recordó esos mismos días desde la superficie. Mientras Mia sobrevivía bajo tierra, ella recorría despachos, se enfrentaba a cámaras, tocaba puertas de gobiernos y organizaciones. “Mi deber era gritar. No podía dejar que el mundo olvidara a mi hija. Lo hice como madre, pero también como judía, porque ninguno de nosotros puede quedarse solo”, dijo con la voz entrecortada.No ocultó la frustración. Reconoció que buscó apoyo en Chile, apelando a la nacionalidad de su padre, pero nunca recibió respuesta del presidente Gabriel Boric. “Hubiera esperado un gesto, una palabra. No llegó. Eso también duele”, confesó.El día en que la vida volvióCuando le preguntaron por el reencuentro, Mia sonrió apenas. “Cuando vi a mi mamá, pensé que estaba soñando. La abracé y no quería soltarla. Tenía miedo de que si la soltaba, todo desapareciera”, dijo.El relato arrancó lágrimas a muchos de los presentes. Algunos se abrazaban entre sí. Otros simplemente lloraban en silencio. No era un discurso político ni una ponencia formal: era la vida desnuda de una hija y una madre que volvieron a encontrarse después del infierno.El peso de la memoriaMia habló también de lo que vino después de la liberación. “No es que vuelves a casa y todo sigue igual. El cuerpo tiene cicatrices, la mente está cansada, los recuerdos aparecen en cualquier momento. Pero estoy viva, y eso lo cambia todo”.En sus palabras había tanto dolor como resiliencia. No quiso presentarse solo como “la rehén liberada”. Recalcó que es también hija, hermana, mujer joven con sueños interrumpidos pero no apagados. “Quiero volver a bailar, quiero viajar, quiero estudiar. No quiero que mi identidad quede solo marcada por el cautiverio”, afirmó.Dejando de lado la intimidad de su relato, Mia fue categórica: “somos los shlijim, los mensajeros. Todo el mundo necesita saber lo que nos sucedió el 7 de octubre. Lo que nos pasó. Simplemente fui a una fiesta y de repente me encontré en Gaza sola. Perdí a muchos amigos, pasé cosas tan difíciles… parte de mi curación pasa por hablar, hablar frente al mundo. Y es muy importante que el mundo y el pueblo judío entiendan realmente lo que nos sucedió”.La herida que une a todo un puebloEl auditorio no era un público distante: muchos compartían con ella un lazo personal. La familia de Mia tiene raíces en Chile. Su abuelo, Zeev Scharf, emigró en 1954 a Israel, y en esta visita, madre e hija aprovecharon de visitar las tumbas familiares en Conchalí. “Realmente, fue muy emocionante. Nunca había estado aquí”, cuenta Mia. Un vínculo que conmovió aún más a quienes las escuchaban.“En este país está parte de nuestra historia”, dijo Keren. “Y por eso sentimos que hablar aquí no es solo contar lo que pasó, sino también recordar que los secuestrados son hijos, nietos y hermanos de todos nosotros”.“No quiero que olviden a los que siguen allá”En medio del aplauso que siguió a sus palabras, Mia pidió algo más: que nadie olvide a quienes aún permanecen en Gaza. “Yo tuve la suerte de salir. Pero hay muchos que siguen esperando. No podemos olvidarlos”.Ese llamado resonó fuerte. No era solo admiración: era un compromiso compartido.Una noche distinta a las demásLa velada se transformó en un espacio íntimo de memoria y humanidad. No hubo protocolo capaz de encorsetar lo que Mia y Keren compartieron. Fueron lágrimas, confesiones y silencios pesados que dijeron más que cualquier discurso.Algunos se acercaron después a abrazarlas. Otros se quedaron quietos, procesando lo escuchado. Todos sabían que habían presenciado algo irrepetible: el relato vivo de una hija que volvió de la oscuridad y de una madre que nunca dejó de buscarla.

Seminario Rabínico Latinoamericano distingue al Rabino Eduardo Waingortin

Con gran orgullo queremos compartir una noticia que nos llena de alegría; nuestro Rabino Eduardo Waingortin fue distinguido por el Seminario Rabínico Latinoamericano Marshall T. Meyer., con el título de Doctor Honoris Causa.Este importante reconocimiento se entregó en el Evento de Ordenación Rabínica y Otorgamiento de Doctorados Honoris Causa, que se realizó el pasado lunes. Como Mercaz, nos sentimos profundamente honrados de que nuestro Rabino reciba esta distinción, fruto de su incansable labor, compromiso y liderazgo, que ha dejado huella en nuestra Comunidad, en el Seminario Rabínico y en Am Israel. El Doctorado fue entregado por el Rab. Ernesto Yattah, Vicerrector y Decano de la Escuela Rabínica A.J. Heschel, quien le dedicó estas emocionantes palabras: “Distinguidos invitados, colegas, alumnos y amigos. Al entregar estos doctorados honramos trayectorias que encarnan lo mejor de nuestra misión. Compromiso y sabiduría puestos al servicio del pueblo de Israel y de toda la humanidad. Con emoción invito a recibir este reconocimiento a tres egresados distinguidos de nuestra Casa de Estudios. Invito en primer lugar al Rabino Eduardo Waingortin, egresado de nuestro seminario en el año 1986. Está casado con Gachi y juntos formaron una hermosísima familia con cuatro hijos. Eduardo es contador público y licenciado en Administración por la Universidad de Buenos Aires. Desde hace años se desempeña como Rabino del Círculo Israelita de Santiago de Chile. Además de ser capellán judío en la Casa de Gobierno y representante de la comunidad judía ante las más altas autoridades nacionales de Chile. Eduardo ha demostrado un compromiso profundo con la continuidad judía y con la educación. Hizo crecer la comunidad judía de Chile. Es un educador destacado, un líder espiritual cercano a la gente y un pastor sensible a las necesidades de su comunidad. Se ha caracterizado por ser un constructor de consensos y de comunidades sólidas. Y por acompañar con generosidad la experiencia rabínica de quienes dan sus primeros pasos en la vida pastoral. Además ha sostenido un vínculo permanente con nuestro seminario, colaborando como asesor, tutor y referente nuestro en múltiples funciones. En el año 2016 el Congreso de Chile le concedió la ciudadanía por gracia, en reconocimiento a sus servicios prestados al país. Su labor combina enseñanza, liderazgo y compromiso comunitario. Ha dejado una huella imborrable en la vida judía. Hoy lo distinguimos por lo tanto con el doctorado honoris causa, el liderazgo comunitario”.

¿Qué significa realmente el “reconocimiento” y por qué es tan complicado?

Cada septiembre, cuando se abre el período de sesiones de la Asamblea General de Naciones Unidas (UNGA) en Nueva York, la cuestión palestina vuelve a ocupar titulares en todo el mundo. Este año no es la excepción: mientras algunos países anuncian que “reconocen” a Palestina, la UNGA aprueba resoluciones con amplia mayoría y los dirigentes palestinos insisten en que la comunidad internacional ya ve a su territorio como un Estado independiente. Sin embargo, al mismo tiempo, Palestina no figura en la lista oficial de Estados miembros de la ONU ni tiene un asiento con derecho a voto en la propia Asamblea General que justo ahora se reúne.Para muchos lectores, esta avalancha de declaraciones, gestos simbólicos y tecnicismos puede resultar confusa y alarmante. ¿Qué significa exactamente que un país reconozca a Palestina? ¿Qué implica el reconocimiento en la ONU? ¿Y por qué, pese a todo el apoyo diplomático, Palestina sigue sin convertirse en miembro pleno de la organización?¿Qué significa “reconocimiento”?Lo primero es entender que toda esta discusión se da en torno a lo que académicos y expertos en temas internacionales llamamos Derecho Internacional. Si bien es común que los Estados reconozcan algunas reglas del juego en el tablero internacional, lo cierto es que ninguna de estas leyes o reglas es obligatoria (es decir, vinculante) para ningún Estado soberano e independiente, dado que, por el mero hecho de ser reconocido como tal, dicho Estado puede aceptar o rechazar las reglas, sin que exista una pena distinta a un simple bochorno o un repudio de la comunidad internacional. No es posible llevar a un Estado a la cárcel, ni tampoco es posible obligarle a hacer algo que no quiere, dado que es soberano e independiente.Aclarado que el Derecho Internacional es en teoría vinculante, pero en la práctica voluntario, debemos distinguir los dos niveles de reconocimiento internacional que existen.El primero es el reconocimiento bilateral. Esto ocurre cuando un país decide, por sí mismo, tratar a otro como un Estado soberano. Implica abrir embajadas, firmar tratados, establecer relaciones diplomáticas formales e iniciar intercambio económico. Hasta hoy, 194 Estados miembros de la ONU —principalmente en África, Asia y América Latina— han reconocido oficialmente a Palestina, incluyendo Chile. En mayo de 2024, por ejemplo, España, Irlanda y Noruega anunciaron conjuntamente que darían este paso, lo que fue recibido como un gesto político importante en Europa Occidental. Países como Francia, Reino Unido, Canadá, Australia, San Marino y Malta anunciaron recientemente que se sumarán a este reconocimiento en septiembre, marcando un giro importante entre las potencias occidentales. Detalles sobre este punto lo discutiremos más adelante, pero vale la pena destacar el principio por el que Suiza rige su política exterior en materia de reconocimiento de otros Estados: “ninguna unidad política necesita ser reconocida para convertirse en Estado, ni un Estado tiene la obligación de reconocer a otro. Al mismo tiempo, ni el reconocimiento es suficiente para crear un Estado, ni su ausencia lo suprime”.El segundo nivel es el reconocimiento multilateral, que corresponde al ámbito de la ONU. Ser admitido como miembro pleno significa tener voz y voto en la UNGA, un asiento en todas las instituciones de la organización, y una legitimidad internacional casi indiscutible. Palestina busca este estatus desde hace décadas, pero el camino está plagado de obstáculos políticos y legales. También desarrollaremos este punto más adelante.¿Qué convierte a un territorio en “Estado”?El derecho internacional establece criterios relativamente claros. La Convención de Montevideo de 1933 señala que para ser considerado un Estado se requiere tener: una población permanente; un territorio definido, aunque las fronteras puedan estar en disputa; un gobierno efectivo que ejerza autoridad; y la capacidad de relacionarse con otros Estados a través de instituciones diplomáticas. Además, la Convención prohíbe explícitamente el uso de fuerza militar para lograr soberanía.El caso palestino despierta controversia. La población permanente existe —más de 5 millones de palestinos viven en Judea y Samaria (Cisjordania) y Gaza—, pero el territorio definido está fragmentado y sujeto a disputas con Israel, quien administra sus controles fronterizos y por ende parte de su soberanía. El gobierno efectivo se encuentra dividido: en Judea y Samaria gobierna la Autoridad Palestina, mientras que en Gaza lo hace Hamás, catalogado como grupo terrorista por Israel, EE.UU., la Unión Europea y la mayor parte de Occidente. Finalmente, la capacidad de relaciones internacionales existe parcialmente —Palestina tiene embajadas y suscribe acuerdos—, pero su Parlamento está suspendido desde 2007, por lo que es imposible ratificar cualquier nuevo acuerdo que suscriba. De hecho, las elecciones para reelegir un Parlamento se suspendieron indefinidamente en mayo de 2021.Por su parte, la Carta de las Naciones Unidas (la “Constitución” de la ONU), añade que un candidato debe ser “amante de la paz” y comprometerse a respetar las reglas de la Organización. La Carta no define lo que es ser un “amante de la paz”, dejándolo a completa interpretación abierta… ¿es, por ejemplo, Estados Unidos un amante de la paz?, ¿o Rusia, o Irán, o Corea del Norte?... ¿Fue Yasser Arafat un “amante de la paz” cuando se presentó con una rama de olivo y la funda de su pistola ante la UNGA en 1974? — no está verificado que Arafat haya efectivamente portado la pistola, algunos afirman que fue obligado a dejarla en custodia antes de subir al podio, pero el hecho que mencionara que la traía consigo da para reflexionar. Entonces, ¿qué significa que un país reconozca a otro como un Estado independiente? Simplemente significa que uno de los 193 jugadores en este tablero internacional, reconoce que existe otro jugador que quisiera participar del juego, aunque no esté sentado a la mesa sobre la que se encuentra el tablero.¿Cómo se forma parte de la ONU?Ser miembro de Naciones Unidas no es automático: el proceso tiene dos etapas, como si fueran dos puertas cerradas con llave.Luego de que un pueblo que declara su independencia, su representante le solicita al Secretario General de la ONU que considere su postulación como miembro de la organización, declarando formalmente su adherencia a la Carta de la ONU.Luego, el Secretario General recomienda el pueblo postulante al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Este Consejo de Seguridad está compuesto por 15 miembros, de los cuales cinco son permanentes (EE.UU., Rusia, China, Francia y Reino Unido). Para recomendar la admisión de un nuevo país, se necesitan al menos 9 votos afirmativos y que ninguno de los cinco permanentes se niegue, es decir, que use su poder de veto. Históricamente, EE.UU. siempre se ha negado a la incorporación de Palestina como un miembro pleno de la ONU y, dado que tiene poder de veto, el proceso no sigue adelante.El segundo paso, es la aprobación de la UNGA: una vez que el Consejo de Seguridad da luz verde, la decisión pasa a los 193 Estados miembros reunidos en la UNGA. Allí se requiere una mayoría de dos tercios para admitir al nuevo país.Si ambas puertas se abren, el Estado obtiene asiento, bandera y voto en la ONU (reconocimiento pleno). Pero si el Consejo de Seguridad dice que no, el proceso muere allí mismo.Este mecanismo ha sido utilizado en varias ampliaciones: en 1955, por ejemplo, 16 países fueron admitidos al mismo tiempo (entre ellos Austria, Italia y España), en 2002 ingresó Suiza, que hasta entonces había mantenido neutralidad estricta, mientras que el más reciente ha sido Sudán del Sur, en 2011. Desde entonces, la Autoridad Palestina ha desarrollado una campaña internacional bautizada “Palestine 194”, en referencia a su reconocimiento como el Estado número 194 de Naciones Unidas.¿Es posible enmendar o cambiar la Carta de Naciones Unidas para facilitar la incorporación de más Estados como miembros plenos? En la teoría sí, pero en la práctica es muy complejo, dado que los Estados no reescriben sus leyes tan fácilmente.Para ello, primero un Estado miembro de la ONU debe proponer cambiar la Carta. Luego, la idea se debate en la UNGA entre los 193 países. De ellos, al menos 129 (dos tercios) deben aprobar la moción. Luego, este cambio se debe ratificar de manera interna por al menos dos tercios de los Estados miembros de la ONU —lo que implica una discusión y votación en cada uno de sus parlamentos—, pero a su vez, cada uno de los Miembros Permanentes del Consejo de Seguridad deben ratificar la moción en sus poderes legislativos. Si alguno de ellos no lo hace, la moción no sigue avanzando.Sólo se han dado casos pequeños de reformas a la Carta de la ONU: en 1965 se aumentó el número de miembros en el Consejo de Seguridad, pasando de 11 a 15, y el número de miembros del Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas (ECOSOC) aumentó de 18 a 27. Otras grandes reformas, como eliminar el poder de veto o cambiar las reglas de membresía no han tenido éxito porque los Miembros Permanentes tendrían que aceptar reducir su poder de injerencia.¿Dónde está Palestina hoy?Desde el punto de vista de reconocimiento bilateral, Palestina es aceptada como tal por 129 Estados independientes, incluyendo Chile desde el 7 de enero de 2011. No obstante, 12 de ellos no han establecido relaciones diplomáticas a más de 13 años de su reconocimiento.En el plano multilateral, Palestina solicitó oficialmente ser admitida como miembro pleno de la ONU en 2011. La iniciativa fue bloqueada en el Consejo de Seguridad por la amenaza de veto de EE.UU. Como alternativa, en noviembre de 2012, la UNGA aprobó por 138 votos a favor, 9 en contra y 41 abstenciones (5 países no se presentaron a votar) otorgar a Palestina el estatus de “Estado Observador No Miembro”, lo cual ya es un avance sustantivo, dado que hasta 2011 sólo era reconocida como “Miembro Observador”.Este cambio en el título demuestra un avance simbólico hacia el reconocimiento pleno, aunque en la práctica no le entregue más derechos y sea el mismo que tiene la Santa Sede (Vaticano), que le permite participar en los debates de la UNGA con voz, pero sin voto, adherirse a tratados internacionales y unirse a organismos especializados de la ONU. Desde entonces, Palestina se incorporó a la UNESCO, la OMS, la FAO, y se adhirió al Estatuto de Roma, lo que le da acceso a la Corte Penal Internacional y a la Corte Internacional de Justicia, actuando como un Estado independiente en muchas de las discusiones globales, incluso en la UNGA.No obstante, Palestina no puede votar en la UNGA ni presentarse a candidaturas a órganos como el Consejo de Seguridad. En términos de poder político real dentro de la ONU, su posición sigue siendo limitada.¿Cuáles son los principales obstáculos que enfrenta Palestina?El veto estadounidense, que como miembro permanente del Consejo de Seguridad, ha reiterado que bloqueará cualquier intento de Palestina de convertirse en miembro pleno. Washington insiste en que la creación de un Estado palestino debe ser resultado de negociaciones directas con Israel, no de resoluciones internacionales unilaterales.Criterios de Estado incompletos, como la falta de control territorial y la división política interna dificultan la percepción de Palestina como un Estado consolidado. Israel sostiene que no puede existir un Estado sin fronteras claras ni un gobierno único. A ello se suma la complejidad institucional: el Consejo Legislativo Palestino (PLC), elegido por los residentes de Judea y Samaria, y de Gaza, no es el parlamento del Estado Palestino, sino el órgano de autogobierno interno de la Autoridad Palestina. En cambio, la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) es la que la ONU reconoce como representante legítimo del Estado Palestino. La OLP tiene su propio parlamento, el Consejo Nacional Palestino (CNP), que incluye a palestinos tanto de los territorios como de la diáspora, y del que surge el Comité Ejecutivo de la OLP, considerado el gobierno oficial en el plano internacional. Esta dualidad entre la Autoridad Palestina y la OLP, junto con la fragmentación política entre Fatah en Judea y Samaria y Hamás en Gaza, refuerza la percepción externa de que Palestina carece de una estructura estatal unificada y estable.Finalmente, el impacto en el proceso de paz, ya que muchos países europeos apoyan la solución de “dos Estados”, pero evitan un reconocimiento unilateral en la ONU por temor a que esto congele las negociaciones. Alemania, por ejemplo, ha reiterado que el reconocimiento debe ser el resultado de un acuerdo bilateral que ponga el fin a la guerra. Otros países, en cambio, sostienen que el reconocimiento es un paso necesario para equilibrar el proceso.¿Qué puede hacer Palestina mientras tanto?Ante la imposibilidad de lograr membresía plena, Palestina ha optado por una estrategia de acumulación de apoyos simbólicos y legales: mantener su estatus de observador y usarlo para intervenir en los debates internacionales; ingresar a más organismos especializados de la ONU, como la OMS o la FAO;  promover resoluciones en la Asamblea General que, aunque no son legalmente vinculantes, refuerzan la percepción de legitimidad; recurrir a tribunales internacionales para denunciar políticas israelíes y buscar respaldo jurídico.; y ampliar el reconocimiento bilateral, especialmente en Europa Occidental, con la esperanza de generar presión política sobre Israel y EE.UU.¿Qué significa, en la práctica, el actual ruido mediático sobre el reconocimiento del Estado Palestino?No es más que eso: ruido. En la realidad, nada cambia, porque Palestina, en su condición actual, no tiene la capacidad de cumplir con todas las condiciones que el Derecho Internacional le exige para ostentar dicho título.Lo que hemos escuchado de Francia, Reino Unido, Canadá, Australia, San Marino y Malta en los últimos meses no es más que el aprovechamiento de una instancia internacional, donde están puestos los ojos de, literalmente, todo el planeta, para pronunciar un discurso unilateral y así, sumar tal vez otros 6 Estados a la lista de los 129 que ya han hecho lo mismo antes.Por ahora, Palestina seguirá actuando como un actor híbrido: reconocido por muchos, observador en Naciones Unidas, con presencia en algunos organismos internacionales, pero sin el poder de un Estado miembro pleno. Para entender las noticias sobre “reconocimientos” y “votaciones” conviene recordar esta diferencia: ser reconocido por algunos países no equivale a tener asiento y voto en la ONU. Y mientras no haya un acuerdo negociado con Israel, ni un cambio en la política de EE.UU., la silla palestina en la UNGA seguirá vacía.

Vandalizan por cuarta vez la sinagoga más antigua de Santiago durante el Shabat

La madrugada del pasado sábado, mientras los fieles se encontraban en plegaria, la sinagoga Bicur Jolim —la más antigua de Santiago— fue víctima de un nuevo ataque vandálico. Desde su fundación en 1905–1906, este templo ha sido símbolo de la presencia judía en la capital chilena y ahora acumula ya cuatro agresiones de esta índole en los últimos años.Estos actos vandálicos no son aislados: en los últimos meses, templos judíos en ciudades como Viña del Mar, Valdivia, Temuco y Concepción también fueron blanco de pintadas ofensivas y grafitis con consignas de odio. La situación ha encendido alarmas dentro de organizaciones comunitarias y entre observadores internacionales de derechos humanos, que advierten sobre un preocupante aumento del antisemitismo en Chile.Preocupaciones que ya habían sido anticipadas por instancias diplomáticas. En 2022, Deborah Lipstadt, enviada especial de EE. UU. para la lucha contra el antisemitismo, alertó que “la comunidad judía local se siente muy presionada”. Asimismo, la Relatora Especial de la ONU sobre libertad religiosa dirigió una comunicación al Presidente Gabriel Boric, advirtiendo sobre un posible incremento de hostigamientos y vandalismo hacia la comunidad judía en Chile, y sobre el riesgo de impunidad si no se actuaba con firmeza.Aunque el Gobierno ha condenado categóricamente el antisemitismo y enfatizado la distinción entre opiniones hacia el Gobierno de Israel y ataques hacia judíos, líderes de la comunidad sostienen que estas posturas no se traducen en acciones concretas que detengan la escalada. “Acá el móvil de los ataques no es Israel, sino los chilenos que sufren el odio y la constante estigmatización por el solo hecho de ser judíos”, afirmó Gabriel Silber, vocero de la Comunidad Judía de Chile.Las cifras también respaldan la percepción de un deterioro generalizado. El Informe Anual de Derechos Humanos del Departamento de Estado de EE. UU. de 2025 reporta un aumento de contenidos antisemitas en redes sociales, discursos de odio y profanaciones de sinagogas. Asimismo, la Liga Antidifamación (ADL) registra que 2023 fue el año con más incidentes antisemitas en Estados Unidos desde que comenzó sus registros, reflejo de una tendencia global que también afecta a Chile.En respuesta, la Fiscalía designó en abril un fiscal coordinador para aglutinar todas las causas relacionadas con delitos contra lugares de culto judíos. Sin embargo, las autoridades comunitarias consideran que estas medidas siguen siendo insuficientes frente al “patrón” de hostigamiento en curso.

Joseph Stiglitz, Premio Nobel de Economía

Joseph Stiglitz nació en Indiana el 9 de febrero de 1943 en una familia judía, pero no hay información disponible sobre su nivel de observancia religiosa o práctica del judaísmo. De 1960 a 1963, estudió en el Amherst College, en el cuarto año de pregrado se trasladó al  MIT donde realizó su postgrado. De 1965 a 1966 estudió en la Universidad de Chicago, y de 1966 a 1967 estudió para su PhD en el MIT, y de 1969 a 1970, fue investigador Fulbright en la Universidad de Cambridge. En años siguientes impartió clases en las universidades de Yale, Duke, Stanford, Oxford y Princeton. Es actualmente Profesor en la Universidad de Columbia.Es conocido por su visión crítica de la globalización, de los economistas de libre mercado, del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial. En 2000, fundó la Iniciativa para el Diálogo Político, un centro de estudios con base en la Universidad de Columbia, y dirige el Instituto Brooks para la Pobreza Mundial, de la Universidad de Mánchester. Considerado generalmente un economista de la nueva economía keynesiana, fue durante 2008 el economista más citado en el mundo. ​ En  2012 ingresó como académico correspondiente en la Real Academia de Ciencias Económicas y Financieras de España. Durante la presidencia de Bill Clinton fue presidente del Consejo de Consejeros Económicos. En el Banco Mundial, estuvo como primer vicepresidente y economista jefe hasta que el Secretario del Tesoro lo forzara a renunciar. Ha sido uno de los autores principales en el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático. Es miembro de la Pontificia Academia de Ciencias Sociales. Fue laureado con el Premio Nobel en el año 2001 por sus análisis de mercados e información asimétrica. Su investigación más famosa es sobre el “screening”, una técnica usada por un agente económico para extraer la información privada de otro. La literatura económica neoclásica tradicional asume que los mercados son siempre eficientes excepto por algunos casos. Stiglitz y otros revocan esa presunción; para él, no existe la “mano invisible” de Adam Smith.Stiglitz ha incursionado en política en una controvertida posición de izquierda. El politólogo chileno Axel Kaiser destaca cómo Stiglitz ha estado más que dispuesto a promover y defender a los demagogos y dictadores socialistas de Latinoamérica. Visitó al Presidente Boric, quien se ha autodefinido como “marxista” y que ha prometido “enterrar el neoliberalismo”, su amistad con la corrupta dinastía Kirchner en Argentina es de larga data, a quien apoyó en su agenda “antineoliberal”, gobierno que terminó en 2022 con una tasa de inflación de más del 100% y una tasa de pobreza de casi el 40%. Cuando Evo Morales necesitaba a un economista internacional para dar credibilidad a la nacionalización de los campos de gas y petróleo, Stiglitz estuvo feliz de complacerlo. En 2007, Stiglitz viajó a Ecuador para reunirse con la administración de Rafael Correa para discutir políticas económicas. En 2007, Stiglitz también viajó a Caracas para reunirse con Hugo Chávez y felicitarlo personalmente por el gran trabajo que estaba realizando en el frente económico y de políticas públicas. Pero en ningún lugar se reflejó más claramente el desprecio de Stiglitz por la democracia liberal, la verdad y los derechos humanos que en sus visitas a Cuba en 2002 y 2016. Está casado con Anya Schiffrin y tiene cuatro hijos.

Hoy volvemos a celebrar el sueño que Herzl hizo realidad

En 1897, Chile vivía un momento clave de su historia nacional, consolidando la República parlamentaria y recibiendo una ola de inmigración europea que empezaba a dar forma a nuevas comunidades, incluida la judía. Mientras tanto, en Basilea (Suiza), Theodor Herzl reunía a 200 delegados para inaugurar el Primer Congreso Sionista, un extraordinario acontecimiento que marcó el nacimiento del movimiento que, medio siglo más tarde, haría realidad el Estado de Israel.Allí se presentó el “Programa de Basilea”, cuyo primer objetivo declaraba explícitamente: “el sionismo busca establecer un hogar para el pueblo judío en Palestina”. Cabe destacar que se trataba de la tierra histórica del pueblo judío, identificada en la tradición bíblica como Eretz Israel, bajo dominio otomano en aquel entonces, que entonces estaba bajo dominio del Imperio Otomano. A nivel internacional, el nombre “Palestina” se usaba como denominación geográfica desde la época romana, cuando el emperador Adriano rebautizó la provincia como “Syria Palaestina” tras sofocar la revuelta judía de Bar Kojba.Tras este hito, se consolidó el movimiento sionista —entendido como el proyecto para establecer un hogar nacional judío— y se creó la Organización Sionista Mundial. Herzl impulsó gestiones diplomáticas con el Imperio Otomano y con diversas potencias europeas, buscando el reconocimiento legal de este anhelo. Paralelamente, judíos de distintos lugares comenzaron a retornar a la Tierra de Israel, evocando así las palabras del himno nacional de Israel, Hatikva: “La esperanza de dos mil años, de ser un pueblo libre en nuestra tierra, la tierra de Sion y Jerusalén”. En ese marco, se fundaron kibutzim (comunidades agrícolas) y nuevas ciudades, como Tel Aviv en 1909.El resto es historia: en 1948 se fundó el Estado de Israel, dando concreción al sueño que en Basilea había sido trazado más de medio siglo antes, y cumpliendo el anhelo de un pueblo que durante siglos mantuvo viva la esperanza de regresar a su tierra ancestral.Han pasado 129 años y el sionismo ha debido resistir la tergiversación de quienes niegan a los judíos su derecho a un hogar nacional. En mayo recién pasado se realizó la elección para el 39.º Congreso Mundial Sionista. La votación en Estados Unidos registró una participación récord: más de 230.000 votos contabilizados, un salto extraordinario frente a los 123.575 de 2020.Este renovado despertar democrático también se vivió en Chile. Por eso conversamos con Debbie Guberek, presidenta del Consejo Sionista de Chile, sobre los desafíos actuales.¿Qué significado adquiere hoy el sionismo?“Hoy, el sionismo representa mucho más que la aspiración por un Estado judío: es la afirmación de la necesidad vital de un Estado que proteja al pueblo judío en todo el mundo. Israel no solo es un refugio material ante las amenazas externas, sino que también debe ser un faro de judaísmo intelectual, espiritual y cultural.Ser sionista fuera de Israel implica comprender profundamente el rol central que tiene el Estado judío en la vida del pueblo judío global. Fortalecer a Israel, apoyar su desarrollo y ayudar a educar y reconectar a quienes están “confundidos” o desconectados de su identidad judía es parte esencial de ese compromiso”.¿Cómo se enfrentan las críticas cuando el término “sionista” se ha manoseado para ser convertido en una causa que genera controversia?“Depende de qué tipo de crítica se trate: El antisionismo (es decir, la negación del derecho del pueblo judío a la autodeterminación en su tierra ancestral) no es una crítica legítima: es una forma moderna de antisemitismo.En cambio, las críticas legítimas hacia políticas o decisiones específicas del gobierno israelí son válidas, como ocurre en cualquier democracia. Lo importante es que estas críticas se hagan con honestidad, sin aplicar dobles estándares que no se utilizan para otros países y/o pueblos”.¿Cuál es la participación de Chile en estas elecciones y cuáles fueron los resultados?“Chile, al igual que más de 40 federaciones sionistas en el mundo, participa enviando delegados al Congreso Sionista Mundial. Tras las elecciones, la delegación que representará a Chile en el 39 Congreso Sionista Mundial estará compuesta por las 4 facciones que obtuvieron mayoría de votos para adjudicarse los escaños disponibles, reflejando así la diversidad de nuestra comunidad.  Dichas facciones ganadoras con los porcentajes más altos en votos quedaron: Masortí (39,10%), TH4  (23,63%), Mizrachi (19,18%) Meretz (10,20%)Los resultados demuestran una comunidad activa, organizada y con visión de futuro, que busca aportar desde Chile a los desafíos y oportunidades del pueblo judío en el mundo”.

Israel y dos de sus problemas: la imagen y qué hacer el día después de Hamas

Al ser un sistema parlamentario, muchas decisiones son tomadas por el gabinete, esta vez fue el de Seguridad que resolvió lo que parece ser algo intermedio, no hay ocupación de toda la Franja, donde Israel tiene una presencia de más o menos el 75%, pero se avanza hacia Ciudad de Gaza y su millón de habitantes. Quizás influyeron situaciones tales como evitar que se reanude el juicio en la Corte Internacional de Justicia, donde la resolución existente le pide a Israel no alterar la realidad jurídica, pero es más probable que tenga relación con cuán dividido está Israel, ya que en general en estas decisiones, a no ser que se trate de EE. UU. no influye demasiado la opinión del exterior, siendo la de Europa más bien irrelevante, al igual que en Ucrania (reunión Putin-Trump).Tampoco fue determinante la conocida objeción del general Eyal Zamir a nombre del Estado Mayor, cuya exagerada cobertura periodística es una indicación más de cuánto desconocimiento hay en el exterior sobre las características de la democracia israelí, ya que lo ocurrido es más habitual de lo que se cree, debido a características tan especiales como que casi todos quienes toman decisiones han usado uniforme, y que son instituciones de dotación pequeña, al basarse en la conscripción, pero lo importante, es que después de hacer pública su objeción, hay total obediencia a lo que disponen las autoridades civiles. En ese mismo sentido, tampoco es extraño a la democracia israelí que nada menos que 600 ex altos funcionarios de seguridad, incluyendo ex jefes del Mossad y Ejército le hubiesen pedido a Trump intervenir para detener la guerra en Gaza, lo que sin duda se pudo haber hecho tal como se hizo en El Líbano, ningún fin del mundo, solo parte del debate público, sorpresivo solo para quienes opinan sin saber.Sin embargo, las presiones internacionales apuntan a dos carencias básicas de la gestión de Netanyahu, que son un terrible problema de imagen y la falta de un plan político sobre el día después de Hamas. Para Israel son problemas serios, en ningún caso atribuibles solo a Netanyahu, ya que se arrastran desde hace mucho tiempo. El de imagen quizás viene desde Líbano 1982 (por ejemplo, atribuirle a Israel una masacre que no hizo, como fue Sabra y Chatila), que con el paso del tiempo, se ha profundizado, tanto que no se soluciona con lobby o relaciones públicas, sino que necesita una política de Estado de la cual Israel carece totalmente, y lo que se hace en la Hasbará, la estrategia de diplomacia pública que se traduciría como explicación o aclaración de las decisiones tomadas, más bien ha fracasado, dada la magnitud de un problema que ha crecido tanto, que sin duda hoy está perjudicando el esfuerzo bélico.Y en el caso del día después de Hamas, Israel ha carecido, no solo ahora, sino desde hace mucho tiempo de una propuesta política al respecto, lo que ha oscurecido los logros militares, no solo haber derrotado a Irán, sino también haber triunfado en 7 frentes, donde eso sí permanece abierto aquel donde empezó, el de Gaza. Tan fuerte es la carencia, que solo ahora hay una indicación de Netanyahu, tan general que al final dice muy poco. Esta carencia viene desde hace mucho tiempo, ya que quizás el último que tuvo una estrategia al respecto fue Ariel Sharon, aquel que hace 20 años se retiró de Gaza, esperando no volver.Para mí la solución es una sola, avanzar hacia el Estado Palestino que tantas veces ha sido rechazado por ellos, a través de quienes ya dieron el paso de reconocer a Israel como un Estado judío, que son los países árabes sunitas, con quienes la lucha contra Irán desarrolló una alianza de hecho, es decir, retomar la idea original de la ONU de 1947, para lo cual se necesita derrotar totalmente a Hamas, ya que o si no, nadie en el mundo árabe querrá involucrarse en Gaza. Esta alianza, por ahora de hecho, es el cambio más profundo que ha dejado esta guerra, y en general ha pasado desapercibido su impacto y significado.La carencia de definiciones políticas de Israel conduce a que apenas se anunciara que esta nueva fase se movería a Ciudad de Gaza, comenzó la lucha de narrativas, la de Israel diciendo que no quería quedarse permanentemente, sino que lo que se buscaba era liberar a Gaza de la tiranía de Hamas y que en el futuro no sea un peligro ni para Israel ni para sus habitantes, sus primeras víctimas. La otra es aquel relato que desde ya culpa a Israel de todo lo que ha pasado, pasa y seguirá pasando, que pone toda la presión en ese país, y ninguna en Hamas, la de la ONU y de países como el Reino Unido y Francia, que con enorme superioridad moral, olvidan la responsabilidad de las ex potencias coloniales en la situación actual, además que tiene razón el Secretario de Estado Marco Rubio, en hacer hincapié en la responsabilidad de Macron, que por unos likes más, y dado el carácter minoritario en su país, anunció el reconocimiento del Estado Palestino, que no cambia nada, ya que hay 141 países que ya han dado ese paso, pero por el momento elegido enterró una negociación con Hamas que iba mejor orientada que las anteriores para la liberación de los rehenes, tanto que el grupo terrorista se marginó, diciendo que lo anunciado por Francia (Reino Unido y Canadá) era una victoria, ya que según ellos, nada de esto habría pasado sin el 7-X.En esta lucha de narrativas, a Israel seguramente no le va a ir bien, considerando la explosión de antisemitismo que ha tenido lugar, y se va a repetir lo que ha pasado desde el principio de esta guerra, éxito en lo militar, pero fracaso en la imagen y en lo político, fundamentalmente por errores propios, ya que cuesta entender que un país que ha funcionado tan bien en lo militar, económico o tecnológico, no haya sido capaz de abordar como política de Estado, dos temas que tanto lo perjudican hoy, como ocurre con la imagen, y la falta de una propuesta política para el día después, sobre todo, que atribuirla a algo que siempre ha existido como el antisemitismo (o judeofobia, como prefiero decirle) es algo limitado y que no confronta el problema actual, ya que no aporta soluciones.Es así como ante esta inacción, la narrativa de Hamas y sus cifras falsas han penetrado a los medios de comunicación occidentales, siendo la última las fotografías falsas de un niño que se transformó, cortesía de la BBC y del New York Times en el símbolo de las denuncias de hambruna, pero como se demostró, todo había sido trucado en Pallywood.¿Es que Israel como país no puede hacer nada?, nada contra Hamas, a pesar de que es difícil encontrar otro grupo que haya cometido mayor cantidad de atrocidades contra su propia gente, no como una consecuencia no deseada, sino a propósito. ¿Israel no puede hacer nada?, ¿nada, salvo quejarse? Por cierto, nadie pretende que no se le critique, ya que la recibida en Israel es quizás más fuerte que la de otros lugares, pero ¿echarle toda la culpa y que no se presione a quienes han usado y abusado de su propia población, al convertirla en escudos humanos?Pensar que todo hubiese sido distinto si Hamas hubiese devuelto a rehenes, cada vez más olvidados y deshumanizados, ¿y si el mundo hubiese presionado a Hamas? Solo palabras en Europa y la ONU, al final, casi de buena crianza, con una destacable excepción, la Liga Árabe, quienes pidieron el desarme de Hamas, diciendo que “debe poner fin a su dominio en Gaza, entregar las armas y liberar a los rehenes”, parecido a lo que dice Israel, quien ha enfrentado esta guerra con gran comprensión de esos países, además que allí no se han dado las manifestaciones antisemitas que han abundado en Londres, París o Nueva York. Estos países árabes han actuado así porque conocen el fundamentalismo, brindándole la comprensión que hoy ha desaparecido en buena parte de Occidente, salvo, por cierto, en EE. UU. Al parecer, Europa ha cometido el mismo error de la ex URSS, de querer avanzar sin Israel y en su contra.Por cierto, la respuesta de Hamas fue el total rechazo a lo solicitado, doblando la apuesta. Hoy, los rehenes parecen ser su única carta, y que puede hacer entonces Israel, que es fácilmente manipulable en lo psicológico, al estar muy dividido. ¿Cuál es la alternativa a lo que está haciendo? ¿Que Hamas siga vivo? Gaza es una tragedia de enormes proporciones, pero la responsabilidad primera ha sido de Hamas, y nadie ha hecho retroceder tanto la idea de los dos Estados como Hamas.Comprensiblemente, a los familiares de los rehenes no les gusta la decisión, ya que hay una cuota de peligro para sus cercanos, y así amenazaron los terroristas, pero el debate general del país está cruzado por la polarización que provoca el juicio pendiente al primer ministro, y la sospecha de que ello influye en sus decisiones. En esta escalada, el gabinete israelí acordó cinco principios o condiciones, además del desarme de Hamas y el regreso de todos los rehenes, vivos o muertos, la desmilitarización de Gaza, el control de seguridad israelí en la Franja y el establecimiento de una administración civil, sin Hamas o la Autoridad Palestina. Sin embargo, es muy difícil que la narrativa sea exitosa, con un país unido el 7-X, pero hoy muy dividido, y con las terribles carencias en el manejo de dos temas hoy claves, la imagen y la falta de una propuesta política para el día después, trabajada como política de Estado en Israel y consensuada con sus nuevos aliados, los que mejor parecen comprender y apoyar a Israel hoy, además del gobierno de EE. UU., los países árabes sunitas.La definición de la guerra como la continuación de la política por otros medios, apunta al futuro. Si Israel pensara más y mejor en términos de sus carencias, daría todos los pasos necesarios para seguir fortaleciendo esa alianza, antes que la falta de avance perjudique la actual relación con la Casa Blanca, donde Netanyahu tiene razón al decir, que en su larga vida política, no había tenido este nivel de acercamiento con un gobierno de la que es la potencia necesaria e insustituible para Israel, cual lo es EE. UU., sobre todo, en un momento, donde hasta Alemania anuncia que va a suspender la entrega y venta de armamentos a Israel, hasta Alemania. Israel tiene razón en que hoy el tema del Estado palestino puede ser una especie de regalo para Hamas, como también que en el futuro cercano es posible que la falta de avance perjudique la recepción del Premio Nobel de la Paz, que tanto ha buscado, casi perseguido, Trump.Por su parte, lo que ha ocurrido en el mundo con el antisemitismo, no pasó de la noche a la mañana, ya que no hubo mecanismos de detección y de anticipación oportuna ante una realidad donde la serpiente abandonó el nido, de tal forma que está influyendo y hasta condicionando las guerras de Israel, no solo en imagen sino también en la guerrilla legal, el lawfare, donde el paso siguiente ya parece claro, después de las falsas alegaciones, donde Israel ha demostrado impotencia, las de “genocidio” y “apartheid”, todo indica que vienen acciones judiciales contra turistas israelíes, pidiendo el arresto de algunos o muchos, acusándolos de “crímenes de guerras”, ya que la mayoría son ex soldados, y el mecanismo ya ha sido ensayado en países que tienen en sus legislaciones alguna forma de jurisdicción universal como Argentina, Brasil, o Bélgica, y hasta donde se sabe, Israel no ha sido proactivo en esta materia preparando los equipos de trabajo y la estrategia para contrarrestar algo que está en marcha.Cuando se premia al agresor de esta guerra y se castiga a la víctima, y donde el primer ministro del Reino Unido olvida hasta la participación de su país en, por ejemplo, el bombardeo de su RAF a Dresde, donde entre el 13 y el 15 de febrero de 1945, junto a EE. UU. causaron más de 25,000 muertos comprobados (más según los alemanes), a pesar de que allí no había industria de guerra alguna. No hay duda que así como necesita un gran acuerdo nacional para que la propuesta política sea automática en Israel, en el caso de la imagen, ha fracasado de tal forma, que necesita no solo una política de Estado al respecto, sino también ayuda, y si la busca que no sea en una gran empresa de EE. UU., ya que una de las razones del fracaso de la estrategia de Hasbará es presentar a Israel como un ejemplo de diversidad, étnica, religiosa como también cultural con uno de los desfiles gay más importantes del mundo, pero que por ejemplo, no ha dado resultado en las comunidades progresistas o wokes, ya que en EE. UU. es precisamente aquello que rechazan, dada su actitud crítica de su propio país y de sus habitantes.No hay duda de que se requiere un cambio de estrategia y de gestión, dada la magnitud del problema, lo que también alcanza a muchas de las comunidades judías del exterior, incluyendo las europeas y la de EE. UU., no solo por el antisemitismo desatado en las calles y universidades, sino que en el caso de Israel conviene preguntarse cómo y por qué no ha logrado mostrar que entre las muchas condiciones que pone Hamas, nunca figura entre ellas la creación de un Estado palestino como tampoco no solo los europeos, sino hoy Canadá nunca condicionan el reconocimiento del Estado palestino a la devolución de los rehenes, ejemplos que ponen en evidencia la preocupante gravedad de las carencias de Israel.Más aún, así como el gobierno de EE. UU. con sus sanciones llevó a las universidades a una situación donde la opinión pública entendió la gravedad del antisemitismo que habían permitido en sus aulas, por qué Israel o los judíos europeos no han elevado algún caso de judeofobia y discriminación vivida en Europa, como fue el caso Dreyfuss, todavía vigente en el mundo, como caso célebre que haga uso de la abundante legislación de DD. HH. y la jurisprudencia que existe en Europa. Al respecto, recordemos que hace no demasiados años, fue usada por los proislamistas en forma vergonzosa contra alguien tan admirable como Oriana Fallaci, nada menos.No es lobby, tampoco es relaciones públicas, pero lo que viene probablemente va a empeorar antes de mejorar para Israel y los judíos, y es más probable, que Israel pueda reaccionar antes que las comunidades judías, que todavía parecen demasiado afectadas por lo que ha ocurrido. Para ello, hay que buscar “fuera de la caja”, fuera de Israel quizás como también fuera de las habituales asesorías de empresas estadounidenses, ya que sus consejos no han dado resultado hasta el momento, en un contexto donde hay que insistir que para las campañas que se necesitan, el problema no son hoy los países árabes, sino Occidente, salvo excepciones en Europa, y en el caso de EE. UU. también se necesita un cambio de paradigma, ya que en el futuro cercano es difícil pensar en el bipartidismo, sino que con los procesos que están teniendo lugar en el partido demócrata, es posible pensar en una situación parecida a la que sufrió el partido laborista, de anti Israel bajo Jeremy Corbyn en el Reino Unido, lo que no es tarea ni para académicos ni para el Mossad.Son demasiadas las derrotas en imagen y narrativa, una tras otra, como tampoco hay respuestas rápidas a la instalación de bulos, donde una “política deliberada de hambre” ha sido el equivalente a lo que hiciera la KGB soviética, todavía vigente en el mundo. Tampoco se actúa con la velocidad de las redes sociales, que genera narrativas en forma casi instantánea. Si uno mira lo que ha pasado, quizás por vez primera, en medio de una guerra, un país llamado Israel hace una pausa para llevar comida a la población civil de quienes invadieron. Sin embargo, se les acusa de estar provocando un genocidio y una hambruna. ¿Es que Israel no puede hacer nada por restablecer la verdad? Si se concreta la querella contra el NYT como lo hiciera Ariel Sharon por Sabra y Chatila contra Time sería un paso en la dirección correcta, pero también mucho ayudarían casos célebres contra personalidades del espectáculo, quienes debieran sufrir las consecuencias.En este restablecimiento de la verdad ¿Por qué las comunidades judías no confrontan públicamente a quienes se presentan como judíos en actos proterroristas en occidente, sea por razones políticas o religiosas, pero que permiten a los organizadores decir que no son antisemitas, sino solo “antisionistas”? No es libertad de expresión, sino aclarar que solo hablaban por sí mismos. Al respecto, recuerdo a quienes visitaban a los ayatolas en Irán, los que lo hacían con el Ministerio de Asuntos Judíos de Arafat o los que se hicieron presentes en las cumbres antirracistas de la ONU en Durban I y II¿Es que no se puede hacer nada, salvo protestar? ¿En qué se ha fallado tanto tiempo? ¿Cuánto influye el hecho de que se ataca a Israel sobre la base de medias verdades? ¿Cómo es posible que después de denunciar durante años a esa industria de producción de imágenes falsas llamada Pallywood, Israel se haya dejado sorprender una vez más, esta vez con la hambruna?, citada una y otra vez como justificativo de decisiones europeas recientes.Es así como se ha impuesto un relato, donde el hecho probado del antisemitismo no es argumento suficiente para una inacción que ha ayudado a que los terroristas hayan impuesto su narrativa.