Una hermosa cadena de solidaridad
Las fechas de Rosh Hashaná y Iom Kipur son tiempos que naturalmente nos llevan a hacer una revisión sobre cómo ha estado nuestra vida y qué tanto hemos logrado de los propósitos que nos hemos autoimpuesto para mejorar y desarrollarnos en distintas áreas. También estamos más sensibles a nuestro entorno y, si bien algunas veces lo cuestionamos, también debemos ser capaces de agradecer y ver lo afortunados que somos con lo que tenemos, especialmente con la oportunidad única de vivir en una comunidad como la nuestra, donde la tzedaká y trabajar por un Tikun Olam colectivo son pilares fundamentales que nos definen. No es común encontrar una solidaridad como la que vemos acá, donde sin duda nunca te sentirás solo.Nuestras instituciones comunitarias se preocupan del bienestar personal de cada uno de los miembros que requieren ayuda, promoviendo la igualdad de oportunidades como una forma de hacer justicia y proveer un mundo mejor para todos. Como Fobeju, el Fondo de Becas para la Educación Judía en Chile, con mucha dedicación, cariño y alegría nos ocupamos de poner nuestra parte en esta hermosa cadena, sabiendo que somos una pieza fundamental en la continuidad de nuestro pueblo milenario, que ha pasado por tantas vicisitudes que lo han puesto en riesgo. Es inspirador en nuestro trabajo cotidiano y en nuestra experiencia de ser judíos en la diáspora, saber que desde la creación del Instituto Hebreo hubo quienes velaron porque todos quienes quisieran educación judía para sus hijos, pudieran tenerla sin importar su condición económica. Que supieran desde tan temprano, aun antes de la Segunda Guerra Mundial, la importancia de mantener vivos nuestros valores, tradiciones, cultura y el sueño de la Tierra Prometida. Si bien para lograr nuestra misión necesitamos recaudar los fondos que requiere el Instituto Hebreo para cubrir las becas de sus alumnos, y por ello nuestra tarea principal se centra en sumar Amigos de Fobeju que quieran velar junto a nosotros por la continuidad de la identidad y la educación judía en Chile, hay mucho de lo que hacemos que busca cimentar y sembrar la tzedaká y el Tikún Olam como valores propios de nuestra identidad. Estamos muy agradecidos del Instituto Hebreo, porque hemos desarrollado una enriquecedora alianza valórica que nos permite dentro de sus puertas contribuir en los pilares que lo sustentan y que además nos dan la posibilidad como Fobeju de promover que las nuevas generaciones se hagan parte del aseguramiento de la educación judía sionista en nuestro país, y de esa forma, de la continuidad de nuestro pueblo en Chile. El colegio, junto con buscar la excelencia académica, trabaja muy fuertemente para que sus estudiantes se conviertan en personas virtuosas, guiadas por tres valores fundamentales: Tikún Olam (la búsqueda del perfeccionamiento del mundo y la sociedad), Arvut (la solidaridad y responsabilidad con los demás) y Tzedaká (la asistencia social como expresión de justicia). Sustentados en estos tres valores y los que promueve el programa Torat Jaim desarrollado por el colegio, realizamos junto al IH actividades de concientización, empatía, responsabilidad por los otros e iniciativa por tomar acción, fomentando de esa forma, desde los 18 meses a los 18 años, la tzedaká entre nuestros niños, que son el futuro de nuestra comunidad…. Sembramos en las nuevas generaciones aquello que fue innato entre quienes vieron nacer el colegio. Si bien ahora estamos trabajando activamente con los cerca de 1.500 alumnos del Hebreo, por las aulas de calle Santa Rosa, Serrano, Copiapó, Nataniel, Macul y Las Condes, han pasado tantos otros más a quienes quisiéramos llegar en este momento.Cuántos de ustedes que nos leen, o a quienes ustedes conocen, tienen parte de su historia en las salas del colegio. Recuerdos de shabat y festividades guiadas por sus morim y acompañados por sus compañeros, muchos de ellos seguramente que se han convertido en amigos de la vida. Exalumnos o no, todos o casi todos tenemos parte de nuestra historia ligada al colegio y más importante aún cuánta de nuestra historia personal se ha definido por nuestra identidad judía. A todos ustedes queremos transmitirles la urgencia del mensaje que le compartimos a los actuales estudiantes del Instituto Hebreo: la permanencia de los alumnos en el colegio, y con ello su formación en comunidad como judíos de bien, conocedores de sus valores y tradiciones, es una tarea de todos. Cada uno de nosotros, judíos de Chile, somos responsables de asegurar la continuidad de nuestro pueblo.Hacerse parte en esta tarea debe ser también una forma de demostrar la solidaridad que nos caracteriza, y todos deberíamos sumarnos para lograr traspasar a las nuevas generaciones, le dor va dor, nuestros valores y tradiciones a través de la educación judía. Fundación Fobeju forma parte de esta gran cadena solidaria que tanto nos enorgullece y que nos permite ser la comunidad que somos. Necesitamos contar con todos ustedes para preservar la identidad de nuestro pueblo a miles de kilómetros de nuestra tierra y asegurar una educación judía sionista entre las nuevas generaciones, que a su vez serán responsables mañana, de la tarea que hoy nos toca a cada uno de nosotros en honor a nuestra fe, nuestra historia y nuestro futuro.Como comentaba en un comienzo, vivir en nuestra comunidad es algo por lo que todos debemos agradecer, y por lo que debemos estar tremendamente orgullosos. Pero aquello que nos hace tan valiosos es algo de lo que todos debemos hacernos parte, porque somos muchas almas, pero un solo pueblo que trabaja unido por su continuidad.