Personal branding, herramienta efectiva durante un proceso de selección laboral
Por LPI
¿Qué es el branding personal y por qué es relevante en estos tiempos?
-El branding personal puede describirse como una intención deliberada en dejar una huella en las personas con las que interactuamos, generando así la capacidad de ser recordados o identificados con ciertas características particulares y diferenciadoras.
A medida que la conexión e interacción entre las personas es cada vez más rápida, sino instantánea, gracias a las plataformas tecnológicas y a la alta exposición que ellas generan, se vuelve cada vez más desafiante contar con una narración consistente de uno mismo y de lo que se desea proyectar.
¿Cuál es su utilidad y cómo se aplica?
-La utilidad de realizar este ejercicio de crear un relato de mí mismo es que me brinda la oportunidad de revisar cuáles son realmente mis motivaciones y qué desafíos me interesa tomar para cumplirlas. Esto, ayuda a generar una impresión mucho más convincente con quien interactúo y me ayuda a transmitir de una manera clara y ordenada cuáles son mis intereses y características diferenciadoras y cómo éstas pueden ser relevantes o de utilidad para quien recibe mi mensaje.
¿Cómo se puede potenciar una búsqueda de trabajo con herramientas de branding personal?
-Cuando se está en una transición laboral, quién realiza este ejercicio narrativo se encuentra en una situación ventajosa, tanto para identificar las oportunidades laborales que serán de su real interés, como también para optar a ellas, al desenvolverse de manera más efectiva en la transmisión de sus fortalezas e intereses durante un proceso de selección laboral.
Así como antiguamente se debía plasmar esto en un currículum y aplicar a ofertas de empleo, hoy las herramientas son múltiples y digitales. Hoy no solo está el desafío de estar presente en múltiples plataformas utilizadas -redes sociales, portales de empleo, grupos de networking, Head Hunters, outplacements- sino de ser consistente en ellas, saber elegir en cuáles estar presente y no sobreexponerse. La herramienta más utilizada hoy y que reúne todas estas características (estar presente sin estar sobreexpuesto, comunicar la situación de empleo actual e intereses laborales, y generar contacto con tomadores de decisión) es sin duda la red social LinkedIn.
¿Qué herramientas de branding personal pueden ser útiles para alguien que busca trabajo? ¿Qué recomendaciones harías y cuáles son, para ti, los errores más frecuentes que se cometen?
-La primera instancia en que se utiliza el branding personal para buscar empleo es en la presentación personal de uno mismo y de su situación actual cuando se generan o se retoman redes de contacto con este fin. En este discurso de primer aproach ya es muy importante ser estratégico, ya que se busca no solo comunicar, sino también generar interés para abrir una oportunidad y lograr recordación. En esta instancia, es importante entender que lo que se busca es solo generar una oportunidad para posteriormente ser entrevistado o evaluado. Por lo que se debe ser preciso en el mensaje y proactivo (de manera activa y respetuosa) en el seguimiento para conseguir una oportunidad de evaluación.
Una vez que se tiene la oportunidad de ser entrevistado para una posición en particular, es muy importante la preparación. Esto incluye no solamente revisar y preparar mi narración (experiencia, intereses, fortalezas y motivaciones), sino también investigar y recopilar la mayor información posible sobre la historia y situación actual de la empresa a la que estoy postulando (reputación, cultura, resultados y desafíos). Esto me da la oportunidad de conocer si mis valores están alineados con la cultura de la empresa y de entender dónde puede estar mi aporte a la compañía (destacando ciertas fortalezas y compartiendo experiencias previas similares a las que atraviesa la empresa). Además, mostrarme preparado durante una entrevista no solo es una importante señal de interés de mi parte para quien me evalúa, sino que a su vez me da una sensación de control sobre la entrevista, lo que me permite desenvolverme de manera más segura y tomar un rol protagónico, lo que generará alta recordación en el entrevistador.
No menos importante en la preparación, sobre todo en la modalidad actual de trabajo a distancia, es asegurarse de contar con un ambiente cómodo para el desempeño y que genere una buena impresión en quien me entrevista. Tanto utilizar una indumentaria acorde a la formalidad de la compañía a la que postulo, como también asegurarme que todas las herramientas audiovisuales funcionen de manera correcta, generarán una entrevista fluida y dejarán una buena sensación en quien me entrevista.
En cuanto al discurso mismo durante una entrevista laboral, lo más importante es ser consistente en mis experiencias y motivaciones durante toda la entrevista, sin importar que ésta pueda ir tomando un curso que nos haga sentir que no somos la persona idónea para la posición. Si bien es positivo mostrar flexibilidad, uno de los errores más comunes que cometen los candidatos es llevar ésta al extremo, cayendo en contradicciones respecto de sus motivaciones o en una evidente adaptación o exageración de ellas en función de la posición en particular, lo que genera desconfianza y demuestra ansiedad o desesperación por obtener un empleo.
Una recomendación para lograr consistencia y credibilidad es ser capaz de dar ejemplos concretos de mi experiencia laboral que confirmen mis fortalezas y logros de manera tangible. Por otra parte, es importante transmitir de manera transparente los motivos de cambios laborales anteriores, no emitir juicios respecto de antiguas relaciones laborales y de relatar hechos con la mayor objetividad.
Por último, es importante entender una entrevista laboral como una oportunidad de realizar preguntas al entrevistador y aclarar dudas respecto de lo que se espera de la persona a contratar, de los desafíos de la posición y de la empresa, como también de los próximos pasos en un proceso de selección. Tampoco se debe olvidar que del otro lado de la entrevista hay una persona, con quien podemos generar empatía a través del relato de alguna anécdota o alguna historia que consideremos pertinente, que le brinde espontaneidad al momento y que ayude a dejar una marca, que sí o sí será una marca personal.