Se viene uno de los estrenos teatrales más esperados del año, el 5 de septiembre comienza el ciclo de funciones de la Obra “Caín”.
Para conocer los entretelones entrevistamos a Yuval Brodsky, su autor y director.
- Estimado Yuval, cuéntanos de tu vida comunitaria y también de tu vida profesional, ¿Cuándo empezaste en el teatro?
- Desde chico, de la época en la que estaba en el Instituto Hebreo me gustaba actuar, escribir, hacer videos, imaginar mundos, aunque en ese tiempo no existía el teatro en el colegio, yo me las ingeniaba para actuar o hacer videos en los trabajos que nos mandaban cada vez que podía. La primera vez que me subí a un escenario de verdad fue el año 99 en el primer montaje del grupo de teatro Maccabi,” El violinista en el tejado” y fue amor a primera vista, ya no me quería bajar del escenario. Ya después me fui animando a escribir, y luego también a dirigir, con el grupo de Maccabi, escribí y dirigí 7 obras, “Modin”, “El Golem”, “Al otro lado de la cerca”, “Inmigrantes”, “Varsovia”, “Edén” y “Mesías” (que no pudimos estrenar por la pandemia). En Santiago estudé Psicología y actuación y luego me especialicé en dirección y dramaturgia en Buenos Aires y Madrid, donde tuve la oportunidad de aprender de grandes maestros del mundo teatral. He montado obras en varias ciudades además de Santiago, Hice obras en España, Argentina y Alemania. El año pasado con mi amigo Matias Pimstein formamos el grupo Cocokú junto al apoyo de la fundación Leon Avayú y montamos nuestra primera obra “Los Elegidos”, que le fue realmente bien, con dos temporadas llenas. Este año con Andrés Valenzuela como productor estamos montando nuestra segunda obra, Caín.
- ¿De qué trata la obra “Caín”?
- Caín me venía resonando hace tiempo, quería escribir una obra que tratara sobre el origen de lo que atribuimos como el mal en nuestra cultura, Caín en apariencia es la primera persona que comete un gran crimen, esa historia para mí, ha configurado gran parte de lo que somos hoy como sociedad, y quería usarla como punto de partida para hablar de lo que vivimos hoy por hoy, lo que vemos en nuestras calles, lo que nos cuentan los noticieros y como relacionar eso con aquellas lejanas historias bíblicas. Esta obra será muy interesante de ver ya que solo dos actores estarán representando todo un mundo donde aparecerán muchos personajes. Esta obra los hará reír, emocionarse, pensar, reflexionar y estoy seguro de que no los dejará indiferentes. También tendrá música en vivo lo que le aporta un elemento especial a la obra. Es una de esas obras que hay que ver, por que son de alguna manera un espejo de aquello que somos y hemos sido. Cuando escribo una obra no pienso en un mensaje particular que quiero que el público se lleve, lo que siempre espero es lograr generar preguntas, preguntas que luego abran espacios de discusión, y ciertamente con Caín creo que ocurrirá eso.
Caín es una obra con muchas capas, habla al mismo tiempo de muchas cosas, es de esas obras que vale la pena ver varias veces, no porque sea difícil de entender, porque hay muchos elementos que puedes ir desvelando cada vez que la ves. Es un viaje donde el publico es una parte esencial de la obra, pero no quiero dar spoilers, así que mejor que la vean.
- ¿Por qué elegiste a los actores Eduardo Bronfman y Natan Jusid?
- Tuve el privilegio de dirigir a Natan y Eduardo en Los Elegidos, y debo decir que sin dudas son dos de los actores más talentosos con los que he trabajado, ambos actores profesionales, Eduardo con una larga trayectoria y enorme experiencia sobre las tablas y Natan recién egresado de la escuela de teatro de la católica es un talento puro.
Para esta obra quería dos actores que pudieran entrar en el cuerpo de múltiples personajes, lo que requiere un enorme trabajo, no solo de interpretación y memoria, si no de técnica vocal y corporal, y estos dos actores me han dejado maravillado en cada ensayo con sus talentos.
Realmente hacen una pareja extraordinaria que no pueden perderse de ver en esta obra.